"El Gobierno debe velar por la integridad de todos, aunque pueda suponer su ca¨ªda"
"Percibo a la sociedad vasca intranquila, temerosa, a veces m¨¢s enfrentada de lo que estaba en plena actividad armada de ETA". Esto escrib¨ªa Javier Elzo (Beasain, 1942) en un art¨ªculo el pasado viernes, d¨ªa en que se realiz¨® la entrevista en su despacho de catedr¨¢tico de Sociolog¨ªa de Deusto. Estudi¨® en Lovaina y se doctor¨® en Deusto, donde ha trabajado siempre. Vive en San Sebasti¨¢n y en Bilbao ha publicado la mayor¨ªa de sus obras. Se define nacionalista y se considera dialogante e indulgente "menos con los que van de puros, los pisacalles, ¨¦sos que creen que no se equivocan y que los dem¨¢s somos los malos". Pregunta. En 1996, escrib¨ªa: "Estamos ante un callej¨®n con dos sociedades de posturas dispares, con discursos agotados y mir¨¢ndose con rabia y odio". ?Sigue existiendo ese callej¨®n? Respuesta. S¨ª, vivimos en un enfrentamiento a nivel pol¨ªtico y medi¨¢tico. Y me temo que, en menor escala, entre los ciudadanos. Lo observo en conversaciones que antes no se produc¨ªan. P. ?Eso es bueno o malo? R. Bueno, porque aflora uno de los grandes defectos de a?os: no saber hablar a calz¨®n quitado, oy¨¦ndonos unos a otros, afirmando cada uno su planteamiento y respetando el del otro. Y es malo porque se da excesiva importancia a lo que no tiene. P. ?Se refiere a la f¨®rmula pol¨ªtica, que calific¨® como "tema importante, pero problema accesorio y que en todo caso habr¨¢ que decidir democr¨¢ticamente y que no tiene que ser id¨¦ntica a lo largo de la historia"? R. As¨ª es, pero partamos de una realidad: no existen vascos ni espa?oles puros. Este momento que vivimos, multicultural, multi¨¦tnico, la identidad y el modo de ser no est¨¢ en ser vasco o espa?ol s¨®lamente. Existe lo local, lo continental, lo mundial, numerosos c¨ªrculos conc¨¦ntricos. Pregunt¨¦monos qu¨¦ diferencia hay entre uno que se dice nacionalista vasco y un no nacionalista. En un nacionalista el componente vasco tiene un peso en su identidad superior al espa?ol o al europeo. P. ?Superior? R. Me refiero a la repercusi¨®n que puede tener en su vida o en su proyecto de sociedad. A ¨¦l le gustar¨ªa que el m¨¢ximo de decisiones se tomara en el ¨¢mbito vasco, ser due?o, hasta donde sea posible, de lo que quiere hacerse con nuestra historia, cultura, leyes, industria, salarios,... Esto lleva impl¨ªcito otra forma de ser nacionalista: la conservaci¨®n del pa¨ªs, porque ser¨ªa algo muy grave la desaparici¨®n de este pueblo y el nacionalista lo teme porque hay precedentes. P. ?Y el que rechaza al otro y lo utiliza como referencia? R. Es preocupante que haya colectivos que definan su nacionalismo m¨¢s por el hecho de decir que no son espa?oles o franceses. O sea, que defiendan una identidad por repulsi¨®n, por rechazo. Yo no tengo ning¨²n inconveniente en decir que hay en m¨ª una parte importante de espa?ol, y tambi¨¦n de franc¨¦s. En mi estructura y desarrollo mental, en mi cosmovisi¨®n, Le Monde ha tenido m¨¢s importancia que Sabino Arana, por ejemplo. Otra cosa es que uno reconozca en el fundador del PNV que en un momento determinado levantara la voz para decir "?oigan, que esto desaparece, que se diluye!" P. En lo que s¨ª parece que hay acuerdo es en que la sociedad vasca es muy plural. R. En efecto, pero cada uno hace un an¨¢lisis distinto que puede comprobarse en las t¨ªpicas pregunta de "?usted c¨®mo se siente: vasco, m¨¢s vasco que espa?ol, m¨¢s espa?ol que vasco, espa?ol?" Cada uno utiliza las respuestas que le interesan y las interpretaciones pueden ser correctas, pero la ¨²nica verdad es que la gran masa est¨¢ con matices diversos entre vasco y espa?ol. P. Usted ha hablado del d¨¦ficit democr¨¢tico en la transici¨®n vasca. ?En qu¨¦ sentido? R. Ha existido fundamentalmente en el hecho de que una parte de ciudadanos no aceptara la resoluci¨®n de los conflictos por v¨ªa democr¨¢tica. Pero tambi¨¦n en el hecho de que la mayor¨ªa no votara a favor de la Constituci¨®n. Esto indica que el pueblo vasco es nacionalista, aunque sea una mayor¨ªa corta que incluso podr¨ªa cambiar. P. Expl¨ªquese. R. Cuando pronunci¨¦ el discurso inaugural de la Universidad de Deusto, en 1986, dije que la sociedad vasca era nacionalista y que si la natalidad en ese ¨¢mbito sub¨ªa podr¨ªa pensarse que ser¨ªa m¨¢s nacionalista. Pues bien, eso no se ha cumplido e indica que ha habido un incremento de j¨®venes no nacionalistas por razones demogr¨¢ficas, lo que no se ha probado, pero sospecho. En otras palabras, yo creo que en estos ¨²ltimos a?os, las familias no nacionalistas han tenido una tasa de natalidad superior. P. ?Que opini¨®n le mereci¨® la propuesta de pacificaci¨®n de Ardanza y lo que ocurri¨®? R. El no aceptar esa propuesta me pareci¨® un grav¨ªsimo error porque el documento ten¨ªa suficiente base para sentarse todos los partidos, todos, en la misma mesa. Todav¨ªa me hago cruces ante ese hecho. Como me las hago por que al PP y al PSE les pillara a contrapi¨¦ la tregua de ETA. ?Pero si lo sab¨ªamos todos, incluso con dos semanas de antelaci¨®n! P. Usted consider¨® siempre contraproducente el aislamiento de HB, pero advirti¨® de que "el est¨®mago y la raz¨®n" le dec¨ªan que hab¨ªa que hacer sentir a esa coalici¨®n que se han re¨ªdo de todo el mundo. ?Sigue con esa tesis? R. S¨ª. El aislamiento es contraproducente, lo cual no quiere decir que dejes pasar aquello en lo que no est¨¢s de acuerdo. Hay que hablar con todos, pero hay que hablar tambi¨¦n de los hechos. Las ¨²ltimas amenazas y violencias son no s¨®lo intolerables y condenables, sino continuamente denunciables, especialmente por los nacionalistas. Adem¨¢s, como son los que gobiernan, tienen la primera obligaci¨®n de velar por la integridad y la libertad de todos, aunque pudiera suponer la ca¨ªda del Gobierno.
Las chicas del 99, en un pedestal
Javier Elzo es un gran conocedor de la sociedad, que ha estudiado con detalle desde su c¨¢tedra de Sociolog¨ªa en Deusto y como director de la Escuela Universitaria de Trabajo Social de San Sebasti¨¢n. Suyas son numerosas publicaciones, la mayor¨ªa dedicada a la juventud, para la que trabaja como soci¨®logo y como padre: "Mi sue?o es dejar a mis hijos una sociedad m¨¢s humanizada y que est¨¦n preparados para saber apreciar el valor y la distancia de la cr¨ªtica". Por esa dedicaci¨®n a la juventud, tiene un gran reconocimiento. Ahora trabaja en la publicaci¨®n del libro sobre los j¨®venes espa?oles y vascos del 99. Desvela algunas sorpresas: "Aumenta la importancia que dan a las relaciones primarias, principalmente el grupo de amigos, hasta el punto de que empiezan a considerarlo m¨¢s importante que el propio trabajo". En esa ¨²ltima autoimagen reflejada por los j¨®venes destaca el fen¨®meno chico/chica. "En contra de lo que hab¨ªamos pensado, de que iba a producirse una homogeneizaci¨®n, la tendencia es contraria. El conjunto de los j¨®venes tiene una mejor imagen de las chicas que de los chicos. Y si lo analizamos separ¨¢ndoles, las chicas tienen una mejor imagen de s¨ª mismas de la que les dan los chicos, y en algunos valores los chicos se distancian m¨¢s bajando su propia autoestima". ?Qu¨¦ consecuencias puede traer esto? "Por ejemplo, que los chicos est¨¢n ya un pel¨ªn a la defensiva respecto a las chicas y ¨¦stas se han subido a un pedestal, que hace que el grupo de chicas que no alcanza esa altura tenga una crisis dura. Los chicos, por el contrario, cuando no alcanzan el ritmo de valores de las chicas lo tienen ya previamente interiorizado y la crisis es menor". Carriles difuminados Javier Elzo tiene muchos m¨¢s datos sobre la manera de ser y pensar de los j¨®venes de ahora, de los que cree que "est¨¢n m¨¢s dejados a s¨ª mismos que nunca, con los carriles sociales m¨¢s difuminados, aunque esos j¨®venes tengan m¨¢s preparaci¨®n y medios que nunca". ?Y la tolerancia, sigue aumentando? "Lo que aumenta es la indiferencia. Hay poqu¨ªsima participaci¨®n en movimientos sociales, con baja permanente del asociacionismo. Existen menos entusiasmos y compromisos; hay una menor implicaci¨®n en casi todo". ?Por ejemplo? "Los j¨®venes han sido muy pacifistas, pero ahora, sin servicio militar obligatorio, el pacifismo est¨¢ comenzando a caer en picado". Sin embargo, ¨¦sa no ser¨¢ la ca¨ªda m¨¢s espectacular. "La mayor ca¨ªda es la dimensi¨®n religiosa. La religi¨®n entra en el nivel del desinter¨¦s absoluto". ?Esto se ve¨ªa venir? "Hace cinco a?os emit¨ª la hip¨®tesis de que aumentar¨ªa la religiosidad, pero la de signo individual, personalizada, pero que se iba a producir un movimiento en contra de lo institucional". ?Y la pol¨ªtica? "Veo un ligero repunte a la izquierda, ligero. Y tambi¨¦n hay una mayor exigencia respecto a las virtudes p¨²blicas, es decir, se manifiestan en contra absolutamente de la corrupci¨®n, de la injusticia, del soborno o del enga?o en la declaraci¨®n fiscal". "Existe igualmente un aumento en la permisividad en el ¨¢mbito de las relaciones". ?Y la familia? "Es la instituci¨®n manifiestamente m¨¢s querida por los j¨®venes, que van en busca de la uni¨®n libre, pero, eso s¨ª, como modos y maneras utilizados por la familia de siempre".
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