Un nuevo sistema sustituir¨¢ la tarea de las cajeras en los "h¨ªper"

Hace ahora unos 25 a?os se pon¨ªa en marcha un revolucionario sistema de control de mercanc¨ªas, el c¨®digo de barras, que permit¨ªa identificar cualquier producto de forma clara, r¨¢pida e inequ¨ªvoca. Pues bien, este sistema podr¨ªa tener los a?os contados. Su sustituto ya est¨¢ en el mercado en Espa?a: es una etiqueta inteligente que lleva incorporado un chip con una diminuta antena de radiofrecuencia, que permitir¨¢ pagar todos los productos de una vez e, incluso, sin necesidad de empleados en las cajas. Adem¨¢s, es considerado por los expertos un "excelente" sistema para evitar hurtos.Gabriel Izard, director t¨¦cnico de AECOC (Asociaci¨®n Espa?ola de Codificaci¨®n Comercial que gestiona estos c¨®digos en todo el pa¨ªs), no aventura "si con los nuevos sistemas el c¨®digo de barras desaparecer¨¢ y en cu¨¢nto tiempo, pero ahora mismo ser¨¢n complementarios", opina. S¨ª sabe de las ventajas del actual c¨®digo de barras: "sin este sistema, la distribuci¨®n comercial de ahora ser¨ªa imposible, las colas en los hipermercados ser¨ªan probablemente interminables y seguro que los productos ser¨ªan mucho m¨¢s caros".

Este sistema naci¨® en 1973 y se empez¨® a aplicar en los mercados en 1974. Los c¨®digos no s¨®lo evitan la engorrosa tarea de colocar precios en todos los productos, lo que facilita el control en las cajas con pasarlos simplemente por un lector. Tambi¨¦n permiten a las empresas reducir los stocks, gestionar m¨¢s r¨¢pidamente toda la informaci¨®n sobre existencias y saber el volumen de las ventas al momento. El c¨®digo de barras se convert¨ªa as¨ª en un "lenguaje universal" y estandarizado. En Espa?a tardar¨ªa en llegar algo m¨¢s. Fue en los inicios de los ochenta cuando dos establecimientos, Mercadona, de Valencia, y Ecovol, de Sevilla, comenzaron a implantarlo.

No obstante, si en los ochenta este sistema era claramente el futuro, para algunos es ya el pasado. Cualquier establecimiento podr¨ªa implantar ahora mismo un nuevo sistema, las etiquetas inteligentes desarrolladas por la empresa americana Checkpoint Systems y la japonesa Mitsubishi. Ser¨¢ otro modo de comprar y que alguien ha llamado ya "el comercio del siglo XXI". Estas etiquetas, de 55 cent¨ªmetros, elaboradas con una base de papel y esta?o, incorpora un chip con una microantena de radiofrecuencia capaz de almacenar hasta 96 bits de informaci¨®n, bastante m¨¢s que el c¨®digo de barras.

Adi¨®s a las colas

?Qu¨¦ ventajas tiene frente al sistema actual? Pues que permitir¨¢ reconocer al instante y simult¨¢neamente, sin sacarlos de las bolsas o el carrito, todos los productos que pueda llevar, a una velocidad de 25 art¨ªculos por segundo. "En unos cuantos segundos autochequear¨¢ todas las compras y evitar¨¢ p¨¦rdida de tiempo y, desde luego, las colas", asegura el director de marketing de Checkpoint, Joan Albert Roger. Adem¨¢s, el propio usuario podr¨¢ ver en un monitor y de forma sucesiva la imagen de todos los productos que ha adquirido y su precio para comprobar lo que se lleva a casa.

?Ser¨¢n necesarias cajeras? Pues, no. La se?al de cada producto llegar¨¢ al ordenador y ¨¦ste registrar¨¢ la compra y comunicar¨¢ al usuario cu¨¢nto tiene que pagar, y le dar¨¢ un tique detallado. En la misma caja habr¨¢ un sistema que permitir¨¢ al consumidor poder pagar con tarjetas.

Las pegas est¨¢n ahora en el coste de estas etiquetas, unas 150 pesetas por unidad, que compensa en determinados productos, los m¨¢s caros, pero no obviamente en una lata de tomate. Seg¨²n confirma Joan Albert Roger, ya existen conversaciones con algunas empresas espa?olas para implantarla, lo que "va a cambiar el comercio tal y como hoy lo conocemos".