Ense?anzas de un sondeo

A. R. ALMOD?VAR El sondeo de opini¨®n publicado por este peri¨®dico el pasado d¨ªa 27 ofrece perfiles para muy diversas lecturas. Las de tipo global ya est¨¢n hechas, y no hay que insistir en ellas. Los socialistas mantienen su hegemon¨ªa, aun perdiendo 4,7 puntos (algunas luces rojas se habr¨¢n encendido en el cuartel general de Chaves); la derecha se le acerca; los nacionalistas suben un poquito y los comunistas frenan su aparatosa ca¨ªda. Interesan tambi¨¦n otros pormenores y sutilezas, de no poca enjundia. En las cocinas del PP ha de haber serios motivos de preocupaci¨®n, aunque disimulen. El enigma Arenas -enti¨¦ndase, su descabalgamiento como candidato a la Presidencia de la Junta y el puntapi¨¦ recibido en sentido ascendente- no acaba de ser asimilado por el electorado conservador, que lo mantiene en cabeza de sus correligionarios, con un 5,3. Todos los dem¨¢s han perdido puntuaci¨®n, y la que m¨¢s la alcaldesa de Sevilla, Soledad Becerril. Pero lo llamativo es que la de C¨¢diz, y sustituta de Arenas, Te¨®fila Mart¨ªnez, es la peor valorada del grupo, con un 4,8. En ella no se cumple ni siquiera la constante de que a menos conocido m¨¢s estima. Es la menos conocida y la peor calificada. Un buen ejemplo, en suma, de c¨®mo las corrientes internas de un partido pol¨ªtico discurren a veces contra la ley de la gravedad. No es el ¨²nico. Curiosamente esta contradicci¨®n donde tambi¨¦n preocupa es en el PA, por lo que puede afectar a ese oscuro objeto de deseo que es para ellos la posibilidad de sumar nueva mayor¨ªa con el PP. Pero tambi¨¦n en los de Pacheco los resultados se contradicen. Sube un poco el conjunto, pero cada uno de sus l¨ªderes baja, y el que m¨¢s Rojas Marcos (lo que unido al retroceso de Becerril en Sevilla abre m¨¢s amplias perspectivas para S¨¢nchez Monteseir¨ªn en su aspiraci¨®n a la alcald¨ªa). De alto valor es la opini¨®n sobre las contiendas pol¨ªticas Sevilla-Madrid: no reconocimiento del censo por el Gobierno de Aznar -obstinaci¨®n suicida-, contramedicamentazo y mejora de las pensiones m¨¢s bajas, por el de Chaves. En las tres gana el andaluz, aunque algunas de sus medidas tengan m¨¢s valor simb¨®lico que otra cosa. Pero es que los s¨ªmbolos mueven monta?as. Cap¨ªtulo aparte merecen los datos sobre Canal Sur Televisi¨®n. El aprobado alto (6,7) que recibe el conjunto de la programaci¨®n ha puesto muy contentos a sus directivos -y a nosotros tambi¨¦n, por lo que nos cuesta como contribuyentes-, pero no constituye ninguna sorpresa ni anula las cr¨ªticas concretas que se le hacen desde diversos frentes, incluido el de muchos lectores de este peri¨®dico. Tambi¨¦n el foro Andaluc¨ªa, Nuevo Siglo acaba de ratificarse en ellas. Tanto unas como otras van dirigidas de modo fundamental a la programaci¨®n de la primera cadena y en horas de m¨¢xima audiencia, que es donde se producen los culebrones y otros espantos. No se suele censurar a los informativos (salvo que sus presentadores siguen utilizando mayoritariamente un estupendo castellano de Valladolid), ni a otros programas de calidad: culturales, de medio ambiente, cine, etc¨¦tera. Es l¨®gico que la media salga aprobado. ?D¨®nde est¨¢ la sorpresa?