Dialogar, dialogar

LA FECHA prevista del 10 de marzo para la creaci¨®n del nuevo Ejecutivo norirland¨¦s que debe reunir a protestantes y cat¨®licos no ha podido respetarse. Hay sensaci¨®n de crisis, aunque a¨²n no de tragedia. La ministra brit¨¢nica para Irlanda del Norte, Mo Mowlam, ha preferido dar tiempo al tiempo y no forzar una situaci¨®n imposible: los protestantes moderados de David Trimble se niegan a dar al Sinn Fein las dos carteras que le corresponden mientras el IRA no haya empezado a entregar las armas, algo que no estaba escrito en los acuerdos del Viernes Santo de 11 meses atr¨¢s, que preve¨ªan para el desarme un plazo de dos a?os. Lo que s¨ª se exig¨ªa es la renuncia a la violencia y la aceptaci¨®n de las reglas democr¨¢ticas.El IRA, a lo que se ve, ni quiere ni puede entregar las armas, lo que resulta doblemente grave. Pero la insistencia de Trimble en esta exigencia imposibilita a¨²n m¨¢s que el IRA ceda siquiera de modo simb¨®lico, pues muchos seguidores de un IRA cuestionado y al que le surgen escisiones ver¨ªan en tal gesto una rendici¨®n, especialmente cuando ning¨²n grupo terrorista protestante importante se est¨¢ desarmando. El desarme del IRA no se ve facilitado por las noticias de que algunos disidentes del IRA estaban planeando asesinar al l¨ªder del Sinn Fein, Gerry Adams. Son amenazas que no pueden tomarse a la ligera. Todo el mundo recuerda el caso de Michael Collins, antiguo dirigente del IRA, asesinado en 1922 por los que hasta poco antes hab¨ªan sido de los suyos, tras haber aceptado la paz a cambio de la partici¨®n de Irlanda.

Mientras, Londres y Dubl¨ªn han firmado cuatro tratados que han de poner en marcha las instituciones (¨®rganos transfronterizos, consejo ministerial Norte-Sur, consejo brit¨¢nico-irland¨¦s, conferencia de Gobiernos), as¨ª como arropar a la Asamblea y al pr¨®ximo Ejecutivo norirlandeses, y relativizar el concepto mismo de soberan¨ªa. Mowlam ha fijado un nuevo plazo para la creaci¨®n del Ejecutivo, hasta el nuevo Viernes Santo. La celebraci¨®n de San Patricio en Washington el mi¨¦rcoles, donde Clinton ha invitado a los principales l¨ªderes norirlandeses, puede contribuir a encontrar una soluci¨®n.

El acuerdo a cumplir reposa sobre un equilibrio pol¨ªtico: nadie sal¨ªa como ganador ni como perdedor. Avanzar por el camino de la paz requiere seguir preservando ese equilibrio y no pedirles a unos m¨¢s que a los otros. Y una vez iniciado el di¨¢logo, seguir dialogando. Lo peor no es que se retrasen los plazos, sino que por una u otra raz¨®n las partes dejaran de dialogar. El hecho de que Trimble y Adams se entrevistaran cara a cara el martes por segunda vez puede alimentar ciertas esperanzas. Hay que seguir pedaleando. De otro modo, la bicicleta se caer¨¢.