El sentido del arte
Algunos, como ni?os que son, no pueden evitar sacudirse de encima cierta timidez cuando se les pregunta por sus inquietudes o aficiones. Pero no es preciso esperar una contestaci¨®n de palabra para comprobar qu¨¦ es lo que m¨¢s les gusta. Basta con verlos sobre las tablas. Cuando suben al escenario la timidez desaparece y la pasi¨®n por el teatro se revela con toda su fuerza. Las Cacat¨²as Parlantes -as¨ª decidieron llamarse cuando comenzaron este taller de teatro hace ahora m¨¢s de seis a?os- es un grupo compuesto por 26 chavales de entre 6 y 14 a?os que presenta una caracter¨ªstica particular frente a cualquier otra agrupaci¨®n teatral: es el ¨²nico grupo de teatro infantil cuyo elenco cuenta con ni?os ciegos. En el grupo -dirigido por Loreto Su¨¢rez- hay tambi¨¦n chavales videntes. Porque la idea es lograr, a trav¨¦s del teatro, un nexo de integraci¨®n entre quienes gozan del don de la vista y aquellos a los que se les neg¨® este sentido. "Tratamos de que los videntes tengan alguna relaci¨®n con los que son afiliados. Eso facilita el que adopten un compromiso m¨¢s serio a la hora de responder a esta actividad", explica Loreto Su¨¢rez. Y, de hecho, el compromiso existe. De lo contrario no se explicar¨ªa c¨®mo algunos ni?os son capaces de levantarse a las siete de la ma?ana un s¨¢bado, recorrer hasta 200 kil¨®metros de ida hacia Almer¨ªa, ensayar durante horas y volver a recorrer los mismos 200 kil¨®metros de vuelta hasta casa. Tampoco se explicar¨ªa la trayectoria continuada que durante m¨¢s de seis a?os ha mantenido el grupo y que les ha permitido ya presentar diversos montajes en lugares como Canarias, Madrid, Valencia o Ja¨¦n, entre otros. "Algunos de estos chavales llevan en el grupo desde que comenzamos en 1992. Y se nota la influencia positiva que en ellos tiene esta actividad. Se convierten en ni?os m¨¢s extrovertidos y logran que su autoestima vaya en alza", comenta la directora y escen¨®grafa de las Cacat¨²as Parlantes. Fran Garc¨ªa, ayudante de direcci¨®n, se encarga de la parte musical de los montajes: "Realizamos una selecci¨®n de los ni?os seg¨²n los que m¨¢s se adapten a la coreograf¨ªa, independientemente de que tengan m¨¢s capacidad o menos para el baile y la m¨²sica. Es una forma de trabajar en la que estas improvisando constantemente en funci¨®n del ni?o". Durante estos d¨ªas Las Cacat¨²as Parlamentes -los 26 tienen alg¨²n papel en la obra- est¨¢n inmersos en plena vor¨¢gine de ensayos, porque el pr¨®ximo s¨¢bado es el gran d¨ªa. Estrenar¨¢n en El Ejido (Almer¨ªa) su ¨²litma propuesta: Ese loco bajito llamado Federico. Un montaje en el que, am¨¦n de textos de Lorca, se incluye tambi¨¦n un espacio de acciones propias cuyo sentido explica Su¨¢rez: "Se trata de que los ni?os desarrollen acciones entre ellos durante la obra, al margen de los textos de Lorca, para que se pueda ver c¨®mo es cada uno". A mediados de abril, participar¨¢n junto a los grupos de adultos en la VII Muestra de Teatro ONCE. Raquel G¨®mez tiene 13 a?os y encarna a don Crist¨®bal. "Lo que me parece m¨¢s dif¨ªcil de todo es hacer la voz", explica. Elisa Rodr¨ªguez vive en Almer¨ªa. Eso le permite ahorrarse el madrug¨®n que cada fin de semana deben afrontar sus compa?eros que viven en la provicia. Esta joven, que encarna al zapatero en el montaje Ese loco bajito llamado Federico, confiesa, como sus compa?eros, que los nervios no le son ajenos cuando llega la hora de actuar. Las Cacat¨²as Parlantes han demostrado que el tes¨®n es siempre un buen aliado. No pueden ver los rostros del p¨²blico para el que act¨²an. Pero han aprendido a cultivar el sentido del arte y eso les permite dirigir sus interpretaciones hacia el coraz¨®n del respetable.
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