?Har¨¢ falta un pedig¨¹e?o?

Los agricultores y ganaderos espa?oles est¨¢n preocupados por su futuro. En los foros europeos est¨¢n en juego gran parte de sus rentas y expectativas profesionales. Hace pocos d¨ªas supimos que en Espa?a ha descendido la renta agraria y las decisiones europeas son claves para el bolsillo de los agricultores y muy importantes para la econom¨ªa espa?ola en su conjunto.Se est¨¢ negociando la Agenda 2000 y la nueva Pol¨ªtica Agraria Comunitaria (PAC), es decir las condiciones de producci¨®n y mercado de los principales productos del campo. El partido a¨²n no ha concluido: est¨¢ pendiente de la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno, hoy y ma?ana, en Berl¨ªn.

En el primer tiempo los ministros de Agricultura cerraron un pre-acuerdo el d¨ªa 11. Con el voto favorable de la nuestra, han aprobado una PAC que supone importantes rebajas reales para nuestra agricultura. Su car¨¢cter provisional no debe ser origen de falsas esperanzas porque si se deciden modificaciones en Berl¨ªn ser¨¢n para reducir el gasto y, en consecuencia, encorsetar m¨¢s las medidas adoptadas.

Las cuentas agr¨ªcolas a¨²n no se han echado en serio. Queda pendiente esta tarea, que debe alejarse de la simplificaci¨®n de los esl¨®ganes gubernamentales. Que el resultado pudiera haber sido peor no significa que sea bueno. Que el list¨®n se haya puesto bajo para que lo salte la ministra no significa que debamos felicitarnos.

El descenso de los precios institucionales producir¨¢ una importante merma en los ingresos de los agricultores por la venta de sus productos. La apertura a los mercados mundiales tambi¨¦n tendr¨¢ su efecto negativo en Espa?a. Adem¨¢s, las ayudas no se orientar¨¢n a los agricultores que realmente viven de la agricultura, sino que seguir¨¢n proliferando los cazasubvenciones profesionales.

Con estos mimbres, no se entienden las alharacas que ha provocado la negociaci¨®n comunitaria en los miembros del Gobierno. ?Qu¨¦ celebra Loyola de Palacio? ?De qu¨¦ material ficticio son las medallas que se coloca? ?D¨®nde est¨¢n los n¨²meros que respaldan el pretendido beneficio de unas decisiones econ¨®micas y, por tanto, cuantificables?

No es mi estilo ser cicatero en reconocimientos ajenos. Adem¨¢s, no quiero repetir las mezquindades de otros partidos cuando practicaban "la oposici¨®n constructiva" y calificaban de "pedig¨¹e?os" a quienes consegu¨ªan lo que ahora no saben defender. Para Espa?a es positivo el aumento de la cuota l¨¢ctea, la elevaci¨®n de los rendimientos de herb¨¢ceos y el incremento del n¨²mero de animales con derecho a prima en el sector vacuno. Pero las repercusiones globales del preacuerdo supondr¨¢n una reducci¨®n de los ingresos de los agricultores que perjudicar¨¢n especialmente a los m¨¢s peque?os.

En Castilla-La Mancha nos hemos detenido en hacer los c¨¢lculos y los resultados no justifican las alegr¨ªas. Los mencionados acuerdos provocar¨¢n aqu¨ª una p¨¦rdida al sector agrario de 9.936 millones de pesetas por a?o, el 3,5% de la renta agraria regional. En cereales y oleaginosas las ayudas suben un 10%, pero la bajada en los precios es del 20%, "un detalle" que se le olvida mencionar a la ministra. Con el nuevo sistema, y tomando la producci¨®n regional de la ¨²ltima campa?a, los agricultores perder¨¢n 9.300 millones y esta p¨¦rdida supone el 6,3% de la renta del sector.

?C¨®mo quedar¨¢ el girasol, el gran sacrificado de esta negociaci¨®n? S¨®lo en Castilla-La Mancha se pierden 2.700 millones de pesetas/ a?o al haberse suprimido la ayuda espec¨ªfica a este cultivo. Un negro futuro sin paliativos que la ministra ha tratado de colorear anunciando medidas agroambientales. Ella sabe que ha condenado al girasol y que de ninguna manera la Uni¨®n Europea aceptar¨¢ que lo que se recorta por un lado se incremente por otro.

No es razonable afirmar que lo que no consigamos en Europa se pagar¨¢ con presupuestos nacionales. Para eso no es necesario negociar ni, mucho menos, celebrar la negociaci¨®n.

En el vino, olvidando las demandas del sector, la delegaci¨®n espa?ola no ha conseguido que se corrija ninguna de las deficiencias de la propuesta inicial de la Comisi¨®n. Tan s¨®lo se han aprobado nuevos derechos de plantaci¨®n en el 1,5% de la superficie, una medida que rechazan los productores. Y hay que recordar a la ministra, tan amiga de apelar a errores del pasado, que el Gobierno de Felipe Gonz¨¢lez paraliz¨® en 1994 un intento de reforma del mercado del vino.

La reforma aprobada sigue siendo preocupante. No se ha avanzado nada -tampoco se ha planteado- en la chaptalizaci¨®n, que consiste en a?adir az¨²car al vino para subir su graduaci¨®n, con lo que tendremos que seguir soportando, simple y llanamente, una competencia desleal. Sorprende que no se haya adoptado ninguna medida para controlar esta pr¨¢ctica, ni siquiera para su identificaci¨®n en las botellas, y que, sin embargo, se haya aprobado la prohibici¨®n de mezclas de vinos blancos y tintos. Es decir, se impiden mezclas de vinos diferentes, pero se admite sin rechistar el vino con remolacha. Tambi¨¦n es preocupante el cap¨ªtulo de las destilaciones v¨ªnicas porque la falta de concreci¨®n generar¨¢ gran incertidumbre entre los productores.

Ser¨ªa deseable que el mismo inter¨¦s que pone el Gobierno de Aznar por aparecer ante c¨¢maras y micr¨®fonos les impulsara a trabajar en los pasillos y despachos de las instituciones comunitarias. La ministra se preocupa por la puesta en escena, pero le falla el libreto. Le gusta fabricar im¨¢genes de agresiones exteriores, de forma que luego cualquier peque?o logro pueda interpretarse con orgullo patrio. Debut¨® en Bruselas -siempre ante la televisi¨®n- dando una cesta de fresas al ministro franc¨¦s, demoniz¨® al comisario Fischler en la reforma del aceite de oliva y, en las ¨²ltimas negociaciones, volvi¨® a denunciar las negras intenciones de alemanes y franceses. Siempre se plantea su trabajo como una lucha contra las fuerzas del mal que enmascara la falta de estrategia en unos foros que exigen trabajo diario m¨¢s que jaculatorias y publicidad. No se puede ser la primera en la manifestaci¨®n y la m¨¢s eficaz en la negociaci¨®n. Hay que elegir entre imagen y eficacia. Entre sus apelaciones a la herencia recibida y la fabricaci¨®n de nuevas amenazas, parece olvidar que el verdadero problema es la renta de los agricultores.

En pocos d¨ªas todo quedar¨¢ decidido para varios a?os. Deseo el mayor de los ¨¦xitos a Aznar en la cumbre de Berl¨ªn, pero para valorar los resultados ser¨ªa necesario conocer cu¨¢l es la postura espa?ola ante esta cita crucial. As¨ª, podr¨ªamos saber lo que se gana y se pierde. Europa es un espacio para la uni¨®n pol¨ªtica, pero, mientras llega, es un zoco donde cada cual trata de sacar adelante las propuestas que m¨¢s convienen a su pa¨ªs.

?Alguien conoce las propuestas que va a defender el se?or Aznar? ?Se limitar¨¢ a tratar de conservar los fondos de cohesi¨®n conseguidos por el "pedig¨¹e?o" Gonz¨¢lez? ?Pagaremos su mantenimiento con reducciones en Fondos Estructurales y precios agr¨ªcolas?

Jos¨¦ Bono es presidente de Castilla-La Mancha.