La denominaci¨®n de los c¨ªtricos prev¨¦ acoger el 10% de la cosecha en la primera campa?a. Inc¨®gnitas

El consejo regulador de la Indicaci¨®in Geogr¨¢fica Protegida (IGP) C¨ªtricos Valencianos, una suerte de denominaci¨®n de origen para las naranjas, mandarinas y limones de la Comunidad, prev¨¦ que entre un 10% y un 15% de la cosecha lleve la etiqueta identificativa. "Con un porcentaje as¨ª nos conformar¨ªamos en la primera campa?a", dijo Enrique Blasco, presidente del consejo que ayer present¨® el dise?o de la etiqueta. Por su parte, el consejero de Agricultura, anunci¨® que se est¨¢ estudiando la creaci¨®n de una subdenominaci¨®n para las mandarinas de La Plana.

"Con este distintivo pretendemos acreditar la calidad de los c¨ªtricos de esta comunidad y diferenciarlos de aquellos que puedan llegar de otros pa¨ªses", explic¨® el consejero de Agricultura, Salvador Ortells, que insisti¨®, durante la presentaci¨®n de la imagen del consejo, en calificar de "hist¨®rico" ese momento. "Supone que la Comunidad Valenciana haya conseguido una verdadera utop¨ªa, acreditar la calidad y origen de los c¨ªtricos", dijo el consejero. Ortells se?al¨® que se est¨¢ trabajando ya en la subdenominaci¨®n de La Plana -que hab¨ªan pedido las cooperativas de Castell¨®n- y anunci¨® que en el futuro podr¨ªan crearse otras, aunque matiz¨® que esto ocurrir¨¢ siempre que se acredite suficientemente. Por su parte, el presidente del consejo, Enrique Blasco, destac¨® que esta identificaci¨®n responde a la necesidad de potenciar mayor consumo de los c¨ªtricos de la Comunidad, y a?adi¨® que el trabajo que queda por delante es convencer a los productores para que se vayan incorporando a la IGP. La etiqueta comenzar¨¢ a aparecer la pr¨®xima campa?a citr¨ªcola -la 1999-2000-, y se espera que entre el 10% y el 15% de la producci¨®n valenciana la lleve, lo que se traducir¨ªa en unos 400.000 kilos. Hasta 28 variedades A la IGP C¨ªtricos Valencianos pueden acogerse un total de 28 variedades de c¨ªtricos que se producen en la totalidad de la Comunidad. Son tres de satsumas, 11 de clementinas, cinco de h¨ªbridos, cinco de n¨¢vel, dos de blancas y dos de limones. Entre otros indicadores, como el calibre, los c¨ªtricos que merezcan la IGP deber¨¢n presentar un porcentaje de zumo que superar¨¢ el 35% y el 40% -dependiendo de las variedades- y un ¨ªndice de madurez superior a 7. No se descarta que en el futuro puedan incorporarse otras variedades, dependiendo de la implantaci¨®n en el territorio valenciano y de su aceptaci¨®n en los diversos mercados. Blasco se?al¨® que el consejo promocionar¨¢ la marca a partir de ahora, para lo que recaudar¨¢ fondos tanto de los productores como de los comercializadores que utilicen la etiqueta. El canon que se ha impuesto es de dos c¨¦ntimos de peseta para cada una de las dos partes. La Consejer¨ªa de Agricultura ha financiado el arranque del consejo regulador. El presidente del consejo conf¨ªa en que todos los actores citr¨ªcolas apoyen la iniciativa.El nacimiento de la IGP C¨ªtricos Valencianos no surgi¨® de una demanda del sector que se arrastrara en el tiempo. M¨¢s bien al contrario. Los productores catalanes de c¨ªtricos estaban preparando una denominaci¨®n, lo que lleg¨® a o¨ªdos de los valencianos, que, inmediatamente, se pusieron manos a la obra. En unos meses ya estaba lista. Pero ?realmente se necesitaba? Los productores privados siempre se han mostrado esc¨¦pticos ante la necesidad de crear una nueva marca, m¨¢s cuando las que se comercializan tienen prestigio suficiente en los mercados internacionales. Existe otro peligro. La dificultad de controlar una producci¨®n tan masiva como la de los c¨ªtricos. En Espa?a se producen cinco millones de toneladas. Normalmente, las denominaciones de calidad -ya sean de origen, espec¨ªficas o de cualquier otra clase- se dedican a producciones m¨¢s limitadas, con lo que es m¨¢s f¨¢cil su control. Adem¨¢s, la presencia de innumerables mensajes sobre el fruto -la marca comercial, la IGP, la subdenominaci¨®n comarcal... - puede provocar una dispersi¨®n del mensaje.