Zaplana estudia la oferta de una firma francesa para hacer un trasvase de agua desde el R¨®dano

Erradicar para siempre el fantasma de la sequ¨ªa y garantizar el suministro para consumo humano en el Mediterr¨¢neo espa?ol con los excedentes del R¨®dano. ?se es el objetivo que se ha marcado una sociedad de capital franc¨¦s radicada en Nimes, que ha ofrecido al Consell que dirige Eduardo Zaplana y a la Generalitat catalana una participaci¨®n en el proyecto de construcci¨®n del acueducto Languedoc-Rousill¨®n, al objeto de ampliar la canalizaci¨®n hasta las cuencas deficitarias de las que se nutren las dos autonom¨ªas espa?olas.

De momento, el presidente catal¨¢n, Jordi Pujol, y Zaplana no han contestado a la invitaci¨®n, aunque estudian seriamente tal posibilidad a la espera de que las Cortes Generales desbloqueen la puesta en marcha del Plan Hidrol¨®gico Nacional resultante del Libro Blanco del Agua, que incluye el trasvase de caudales desde las cuencas excedentarias a las deficitarias del territorio nacional. La Sociedad para el Estudio y Promoci¨®n del Acueducto Languedoc-Rousill¨®n (SEPA LRC), con sede en Nimes y de capital privado, se plantea la soluci¨®n al problema de la sequ¨ªa desde una concepci¨®n europe¨ªsta de los excedentes que registran los r¨ªos m¨¢s caudalosos. El R¨®dano, que nace en San Gotardo (Suiza), forma el lago Ginebra, entra en Francia, recibe al Saona en Lyon y desemboca en el Mediterr¨¢neo, tiene agua en abundancia a lo largo de sus 812 kil¨®metros de longitud, suficiente para abastecer regiones del sur de Francia deficitarias y, m¨¢s all¨¢, solucionar los problemas que c¨ªclicamente afectan al este de Espa?a. El acueducto planteado por SEPALRC se prolongar¨ªa hasta Valencia, desde donde el caudal ser¨ªa a su vez trasvasado a las cuencas m¨¢s deficitarias, entre las que destacan las de los r¨ªos Segura y Vinalop¨®, cuyas comarcas atraviesan cada verano serios problemas de abastecimiento para riego de campos, cuando no para consumo humano en situaciones extremas. En su recorrido, la conducci¨®n artificial del agua procedente del R¨®dano suministrar¨ªa a las Marinas Alta y Baixa, donde la falta de recursos h¨ªdricos condiciona el desarrollo del sector tur¨ªstico, su principal actividad econ¨®mica e importante fuente de ingresos. La sobreexplotaci¨®n de acu¨ªferos han desencadenado una salinizaci¨®n generalizada en los caudales, que desaconsejan el consumo humano del agua. Plan hidrol¨®gico El agua, indiscutible fuente de riqueza y progreso, se ha convertido en la gran asignatura pendiente de los sucesivos gobiernos socialista y popular. Autoridades auton¨®micas y locales, adem¨¢s de representantes de las confederaciones hidrogr¨¢ficas deficitarias y, sobre todo, las organizaciones agrarias, llevan a?os reclamando la puesta en marcha del Plan Hidrol¨®gico Nacional, que a su entender evitar¨ªa las ya tradicionales disputas entre comunidades aut¨®nomas. Cada verano se repite la misma historia: la Comunidad Valenciana reclama caudales del trasvase Tajo-Segura, a los que se suele oponer el ejecutivo de Castilla-La Mancha, reacio a ceder agua por debajo de un l¨ªmite que pondr¨ªa en peligro el llamado caudal ecol¨®gico de sus r¨ªos y embalses. Al final, el Consejo de Ministros se ve obligado a mediar en el conflicto, que nunca se resuelve al agrado de todos. La aprobaci¨®n del Plan Hidrol¨®gico no parece inminente, aunque el mi¨¦rcoles finaliz¨® el periodo de exposici¨®n p¨²blica del Libro Blanco del Agua, marco legal que servir¨¢ al Parlamento para regular los trasvases. Un trasvase del R¨®dano parece no ser del agrado del Ministerio de Medio Ambiente, que mantiene la teor¨ªa de que las interconexiones entre las cuencas espa?olas ser¨ªa suficiente para una soluci¨®n definitiva del problema. En ese l¨ªnea, la ministra Isabel Tocino y el presidente Zaplana suscribieron un convenio de colaboraci¨®n en materia de obras de infraestructura hidr¨¢ulica, que tiene por objeto asegurar la estabilidad en el suministro a medio plazo y superar desequilibrios. El convenio compromete a ambas partes a realizar importantes inversiones. La Administraci¨®n central asumir¨ªa obras por importe de 46.600 millones, mientras la Generalitat valenciana ejecutar¨ªa actuaciones por valor de 68.800 millones m¨¢s. Modernizaci¨®n de sistemas de riego, interconexi¨®n J¨²car-Vinalop¨®, interconexi¨®n entre Picassent y Manises, abastecimiento a la Marina Baixa, mejora en presas, reutilizaci¨®n de aguas depuradas para riego y ampliaci¨®n de plantas de depuraci¨®n se recogen en el documento.