Asesinado a trancazos en un robo un empleado de un bar de Benissan¨®

Los asaltantes del local tomaron una tranca de la le?era, se aproximaron hasta la tumbona en la que dorm¨ªa, en un peque?o almac¨¦n contiguo, y le golpearon brutalmente en la cabeza hasta que muri¨®. Vicente Sancho Masqueza, un hombre viudo de 67 a?os, empleado de la Cantina del Pou de Benissan¨® (Camp de T¨²ria), fue asesinado en la madrugada de ayer durante el robo del local. El fallecido estaba en libertad con cargos, tras haber sido detenido en octubre por prostituci¨®n de menores.

La Guardia Civil cree que el asesinato se cometi¨® entre las cinco y las seis de la madrugada. Los asaltantes (se desconoce su n¨²mero y no ha trascendido que se haya producido ning¨²na detenci¨®n) entraron por el paellero, aprovechando que una tela mosquitera estaba rota, y forzaron los barrotes de la ventana de la cocina. Una vez dentro de este local, en el que se celebran numerosos banquetes, robaron el dinero de la m¨¢quina registradora (unas 10.000 pesetas, seg¨²n los empleados), forzaron las tragaperras y arrancaron el tel¨¦fono. Luego, seg¨²n los investigadores, se dirigieron al almac¨¦n contiguo, "posiblemente para aumentar su bot¨ªn", en opini¨®n de los agentes. All¨ª se encontraron a Masqueza (como llamaban todos a la v¨ªctima). Los agentes sospechan que le golpearon mientras dorm¨ªa para que no ser descubiertos y para robarle a sus anchas la cartera, en la que guardaba el dinero para pagar a los proveedores a la ma?ana siguiente. En total, no se llevaron m¨¢s de 30.000 pesetas. Su hermana Amparo, que tambi¨¦n trabaja en el local, lo hall¨® muerto a las 7.45. "La puerta estaba abierta", relata, "cuando me acerqu¨¦ a su cama plegable vi que ten¨ªa la cabeza hecha polvo y el cuerpo cubierto de sangre de cintura para arriba". Estaba tumbado de costado, "en la postura en la que sol¨ªa dormir". Lo que le extra?a es que no se despertara con tanto ruido porque "ten¨ªa el sue?o muy ligero". Vicente carec¨ªa de vivienda propia. Los due?os del local, en el que llevaba unos cinco a?os trabajando, le dejaban dormir all¨ª, cuando no se marchaba a casa de su hermano Jos¨¦, y ¨¦l "vigilaba para que no entraran a robar". "Era un poco gru?¨®n, pero le encargabas algo y lo hac¨ªa enseguida", comentaba ayer una empleada, informa Francesc P¨¦rez. Vicente y su hermano Jos¨¦ fueron detenidos en octubre por la Polic¨ªa Auton¨®mica junto a otros 21 vecinos de la comarca acusados de prostituci¨®n de menores. Pero el juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 3 de Ll¨ªria los dej¨® a todos en libertad con cargos. "No creo que lo hayan matado por eso", dec¨ªa ayer su hermano Jos¨¦, "¨¦l era el que menos culpa ten¨ªa".