El apellido paterno preceder¨¢ al materno en caso de desacuerdo

Los hijos podr¨¢n llevar en primer lugar el apellido de la madre si as¨ª lo acuerdan sus padres. Pero si no logran el consenso, el apellido paterno se colocar¨¢ el primero. Lo aprobaron ayer los diputados de la comisi¨®n de Interior y Justicia del Congreso, cuya propuesta ser¨¢ refrendada por el pleno, en principio la pr¨®xima semana, gracias al acuerdo del Partido Popular (PP) y el PSOE. La iniciativa, que funde cinco propuestas distintas, supone de hecho la capacidad de veto del padre. Por eso el primer promotor de la propuesta, Nueva Izquierda-Iniciativa per Catalunya, mantendr¨¢ una enmienda en el pleno. Su intenci¨®n es que sean los tribunales quienes decidan qu¨¦ apellido se antepone cuando no haya acuerdo entre los progenitores.

La diputada Merc¨¦ Rivadulla argument¨® esta pretensi¨®n por el hecho de que lo m¨¢s normal es que sea el hombre quien acuda al Registro Civil a inscribir al ni?o, por lo que la Administraci¨®n no tiene por qu¨¦ enterarse de cu¨¢l es el deseo de la madre. En este punto se le uni¨® tambi¨¦n Izquierda Unida, pero no el PSOE, que acab¨® sum¨¢ndose a la postura defendida por el PP.

La nueva ley, si es aprobada, mantendr¨¢ la posibilidad de cambiar el orden de los apellidos al llegar a los 18 a?os, sea cual sea la opini¨®n de los padres; obligar¨¢ a registrar a todos los hijos de la misma pareja con el mismo orden de apellidos y permitir¨¢ modificar los nombres inscritos de forma incorrecta de acuerdo a la graf¨ªa de la lengua oficial correspondiente. Los diputados nacionalistas -CiU y Bloque Nacionalista Galego, sobre todo- aplaudieron esta decisi¨®n. Todo ello sin coste alguno, gracias a una propuesta del PP que fue apoyada por el resto de grupos.

Los socialistas, por su parte, retiraron su proposici¨®n de anteponer siempre el apellido materno con la que pretend¨ªan cambiar "una discriminaci¨®n hist¨®rica", seg¨²n explic¨® a Efe Javier S¨¢ez de Cosculluela.

Cuando esta ley se apruebe de forma definitiva, no entrar¨¢ en vigor antes de tres meses, el tiempo que necesita el Gobierno para modificar el reglamento que regula el Registro Civil.