El CIP homenajea a los corresponsales de la Revoluci¨®n de los Claveles
Premio especial a Eduardo Barrenechea
Veinticinco a?os despu¨¦s de que los capitanes portugueses decidieran taponar sus fusiles con claveles, en lo que fue el principio del fin de la dictadura instaurada por Salazar, el Club Internacional de Prensa (CIP) rindi¨® ayer en Madrid un emocionante homenaje a los espa?oles que estuvieron all¨ª para contarlo: los corresponsales de prensa. Caso de Eduardo Barrenechea, uno de los primeros, junto a Luis Carandell, en llegar a Lisboa aquel abril de 1974 de la mano del diario Informaciones (dirigido entonces por Jes¨²s de la Serna), fallecido hace cuatro a?os. Gracias a Barrenechea y a otros 15 corresponsales, Espa?a, que a¨²n vivir¨ªa un a?o y medio bajo el r¨¦gimen de Franco, recibi¨® "una inyecci¨®n de moral y esperanza", seg¨²n expres¨® ayer el catedr¨¢tico Enrique Bustamante. El acto, informal, trufado de recuerdos y an¨¦cdotas contadas por sus propios protagonistas -Luis Carandell, F¨¦lix Pacho,Eduardo Sotillos, etc¨¦tera- estuvo presidido por la figura y la obra de Barrenechea. Las fotos que ¨¦l tom¨® durante la "revoluci¨®n pac¨ªfica, democr¨¢tica, progresista y renovadora" de Portugal colgaban de la pared. Y en una de ellas pod¨ªa verse a este "rebelde absoluto", en palabras del presidente de la Asociaci¨®n de la Prensa, Jes¨²s de la Serna, con sus gafas negras, el pelo hacia delante, traje y corbata, siempre elegante, junto a un soldado portugu¨¦s. Su viuda, Elisa de la Fuente, tambi¨¦n periodista, recogi¨® el premio especial que el CIP dedic¨® a su marido por las cr¨®nicas portuguesas y por sus libros sobre ese pa¨ªs. Barrenechea sigui¨® ligado a Portugal despu¨¦s de la revoluci¨®n. En 1988 retrat¨® para EL PA?S las cenizas a las que hab¨ªa quedado reducido el barrio lisboeta de El Chiado.
Al acto acudieron numerosos compa?eros de Eduardo Barrenechea, especialmente del diario Informaciones y del semanario Cuadernos para el Di¨¢logo. No pudo acudir el presidente de la asociaci¨®n Capitanes de Abril, Vasco Louren?o, que mand¨® un saludo a trav¨¦s de un representante. "Ten¨ªamos que estar aqu¨ª", afirm¨®, porque los periodistas espa?oles "proyectaron el movimiento de la libertad" m¨¢s all¨¢ de Portugal. Los corresponsables portugueses que acudieron recibieron de las manos del presidente del CIP, Tito Drago, y de las de Jes¨²s de la Serna, un grabado como recuerdo de lo que vivieron hace 25 a?os en Portugal: un fusil con un clavel cruzados por una pluma.
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