El Photomuseum repasa a trav¨¦s de 40 retratos la obra de B¨¢rbara Niggl
La reportera gr¨¢fica alemana B¨¢rbara Niggl retrat¨® indistintamente entre 1958 y 1962 rostros de personalidades del mundo literario hoy de primera fila, como Truman Capote, o la mirada inocente de ni?os ante la c¨¢mara de una de las pocas mujeres que entonces se dedicaba a la fotograf¨ªa. El Photomuseum de Zarautz difunde hasta el domingo parte de su trabajo. Muestra 40 retratos en blanco y negro de su extenso archivo que evocan el pasado y se presentan como un documento ¨²nico.
Las instant¨¢neas de B¨¢rbara Niggl son la memoria del pasado; evocan tiempos a trav¨¦s de rostros de personajes que entonces no pod¨ªan so?ar todav¨ªa con alcanzar la fama. Retrat¨® a G¨¹nter Grass con treinta a?os, cuando era un artista pl¨¢stico becado en Par¨ªs, preocupado por desterrar el miedo de su hijo ante la c¨¢mara fotogr¨¢fica. Por su trabajo como reportera gr¨¢fica, una de los pocas mujeres que ejerc¨ªan esta profesi¨®n en Alemania en los a?os sesenta, Nigll se movi¨® en c¨ªrculos de artistas e intelectuales que con su complicidad ayudaron a fraguar su trabajo y ahora son un testimonio documental de primera mano. El espectador puede conocer un poco m¨¢s al escritor neoyorquino Truman Capote en la antepenumbra de su fama mundial, parapetado entre los matorrales de un jard¨ªn de Munich. Y descubre en una escena de un caf¨¦ callejero a la modelo Varuschka von Lehndorff, que, a primera vista, pasar¨ªa inadvertida. Todas las fotograf¨ªas, con un evidente sello personal, tienen la virtud de la singularidad y, tal y como asevera el experto Peter von Becker, rebosan libertad y naturalidad: "Hay una ausencia total de poses". Incluso cuando Evelyn Waugh, con un elegante sombrero y puro en mano, parece m¨¢s un gangster sacado de la escena de una pel¨ªcula americana, que un escritor ingl¨¦s. Las instant¨¢neas no necesitan color para apropiarse de la fuerza expresiva que B¨¢rbara Niggl busc¨® siempre fuera de su estudio. Y es que nunca entendi¨® su trabajo como una puesta en escena o una investigaci¨®n. M¨¢s bien trat¨® de desentra?ar la vida de personas, sin interpretarla: buscaba la esencia y elud¨ªa los aditivos arbitrarios o innecesarios. B¨¢rbara Niggl naci¨® en Berl¨ªn en 1936. Le atraj¨® la fotograf¨ªa desde joven y cuando todav¨ªa hac¨ªa pasillos en el Instituto de Periodismo Gr¨¢fico de M¨²nich, el diario S¨¹ddeutsche Zeitung reconoci¨® su talento y comenz¨® a reproducir sus im¨¢genes. A Niggl se la rifaban. Trabaj¨® para la revista M¨¹nchner Illustrierte y en la revista Scala Internacional, publicada por la Oficina de Prensa e Informaci¨®n de la Rep¨²blica Federal de Alemania. En 1958, asisti¨® a una serie de lecturas con escritores y autores dram¨¢ticos internacionales, que se organiz¨® en M¨²nich con motivo del s¨¦ptimo centenario de la fundaci¨®n de esta ciudad. Muchos de los retratos que se exponen en el Photomuseum de Zarautz, cedidos por el Instituto Goethe, surgieron en ese contexto. Su vertiginosa trayectoria propici¨® el que B¨¢rbara Niggl decidiera a principios de los sesenta convertirse en fot¨®grafa profesional independiente. Hoy esta reportera gr¨¢fica que vive en Feldafing contin¨²a en activo.
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