"Chopin no era un poeta del piano"

Catedr¨¢tico de la Universidad de Bristol, Jim Samson ha alcanzado renombre mundial por sus investigaciones en torno a Chopin, especialmente recordado en este a?o en que se conmemora el 150? aniversario de su muerte. Autor de una biograf¨ªa de referencia (Oxford University Press), editor de un reciente Companion to Chopin (Cambridge University Press) y coeditor de un proyecto de edici¨®n cr¨ªtica de las obras completas del compositor polaco (Peters), sus estudios han hecho mucho por cambiar la imagen de un m¨²sico seriamente desfigurado por la historiograf¨ªa rom¨¢ntica. Samson ha explicado muchos de los avances de la investigaci¨®n chopiniana en un curso de la Universidad de Alcal¨¢.

Fue precisamente otro de los grandes nombres del piano del siglo XIX quien empez¨® a asociar a Chopin con una serie de etiquetas enga?osas: "Cuando muri¨® Chopin, su primera biograf¨ªa la escribi¨® nada menos que Liszt", explica Samson. "Esa biograf¨ªa es uno de los primeros documentos mitificadores. Es un libro muy interesante, pero que presenta ya la imagen del poeta del piano, del gran rom¨¢ntico. Y esa imagen no se corresponde con la realidad, ya que Chopin se interes¨® mucho m¨¢s por la tradici¨®n cl¨¢sica, por Bach o Mozart", que por la m¨²sica de sus contempor¨¢neos, con excepci¨®n de la ¨®pera italiana, que adoraba".

Un cl¨¢sico

Tras su muerte, en Francia tuvo lugar un "claro proceso de apropiaci¨®n nacional del m¨²sico", y cuando Breitkopf & H?rtel, la famosa editorial de Leipzig, decidi¨® incluirlo en su colecci¨®n de obras completas de los grandes compositores, "Alemania abandon¨® la imagen de un autor de m¨²sica trivial, de m¨²sica de sal¨®n y Chopin pas¨® a convertirse en un cl¨¢sico. Su m¨²sica se difundi¨® por todo el mundo: Chopin hab¨ªa entrado a formar parte del canon", afirma Samson, que ha citado las teor¨ªas del cr¨ªtico literario Harold Bloom en varios de sus escritos. Los compositores rusos adoptaron otro punto de vista -"por razones obvias", cree Samson-, ya que "para ellos fue sobre todo un nacionalista eslavo, que acabar¨ªa dejando una huella muy importante en la m¨²sica rusa, como puede comprobarse en las obras de Scriabin o Liadov". Samson admite que la recepci¨®n "menos feliz" tuvo lugar en su propio pa¨ªs, el Reino Unido, donde Charles Hall¨¦ lleg¨® a afirmar que "la m¨²sica de Chopin se hab¨ªa convertido en el patrimonio de todas las colegialas". Para Samson, en Chopin conviven "un gran conservador, porque no particip¨® de la corriente que asociaba a la m¨²sica con el mundo exterior, ya fuera la literatura, la naturaleza, la pintura... Y, a un nivel m¨¢s profundo, un radical: en la armon¨ªa, en la escritura mel¨®dica y en la textura pian¨ªstica". Muchas de las obras de Chopin son como un laboratorio, con constantes experimentos que no se asimilar¨ªan plenamente hasta 50 a?os despu¨¦s", afirma convencido. Y concluye: "Toda la m¨²sica de Chopin se halla ¨ªntimamente ligada a las propiedades del piano y est¨¢ dominada por una identidad entre realizaci¨®n f¨ªsica y contenido emocional. Por eso tantos oyentes quedan desilusionados con las versiones que escuchan".