El veterano cantante' 'folk' Pete Seeger pide en Cuba el fin del embargo
El m¨²sico populariz¨® el tema 'Guantanamera'
El m¨²sico norteamericano Pete Seeger sigue al pie del ca?¨®n revolucionario a sus 80 a?os. Seeger lleg¨® a La Habana el pasado mi¨¦rcoles y trajo al hombro su famoso banjo, con el que popularizo en todo el mundo la Guantanamera, con los versos sencillos de Jos¨¦ Mart¨ª como letra. "Si el mundo supiera algo m¨¢s de Mart¨ª, ser¨ªa mejor", afirma Seeger. Hace dos a?os 'fue condecorado por Bill Clinton por sus m¨¦ritos art¨ªsticos, pero ¨¦l sigue siendo un cr¨ªtico incansable: "El bloqueo es inmoral, est¨²pido, rid¨ªculo, y debe acabar ya", asegura.
Hac¨ªa m¨¢s de 15 a?os que no viajaba a cuba. Su primera visita fue en 1961 y desde entonces ha viajado y cantado en la isla en cuatro ocasiones. Esta vez fue invitado por la instituci¨®n cultural Casa de las Am¨¦ricas, que este a?o celebra el cuarenta aniversario de su fundaci¨®n, y Seeger hizo un hueco en su cargada agenda revolucionaria.
"El viernes salimos hacia Washington, donde mi nieto y yo cantaremos en un acto de protesta ante miles de personas para pedir el cierre de esa escuela de asesinos que es la Escuela de las Am¨¦ricas", dice Seeger con voz firme. E insiste en explicar: "En teor¨ªa, la Escuela de las Am¨¦ricas es una academia militar donde EEUU entrena a los militares latinoamericanos, pero en la pr¨¢ctica lo que se ense?a es a secuestrar, torturar y asesinar. De aqu¨ª salieron, por ejemplo, los asesinos que mataron al arzobispo de San Salvador, monse?or Arnulfo Romero".
La iniciativa tiene entusiasmado a Seeger, quien recuerda que el promotor de la idea fue un sacerdote cat¨®lico norteamericano, quien fue condenado a seis meses de c¨¢rcel hace dos a?os por encadenarse a la entrada de la Escuela, en su sede de Georgia. "Al a?o siguiente, cientos de personas acudieron all¨ª y se encadenaron de nuevo a la puerta".
Nada m¨¢s llegar a la isla, Seeger sostuvo un encuentro con j¨®venes m¨²sicos cubanos en la sede de Casa de las Am¨¦ricas. La reuni¨®n acab¨® con Seeger al banjo interpretando canciones como We shall overcome y la ineludible Guantanamera.
Por la noche recibi¨®, de manos del vicepresidente cubano, Juan Almeida, la Orden F¨¦lix Varela de Primer Grado, la m¨¢s importante distinci¨®n cultural que concede el Consejo de Estado de Cuba, organismo que preside Fidel Castro. La orden fue otorgada "en virtud de los extraordinarios aportes del trovador al rescate de los mayores valores musicales de su pueblo y las causas por la paz, la lucha contra la discriminaci¨®n racial y por la defensa del medio ambiente".
La trayectoria art¨ªstica de Pete Seeger (Nueva York, 1919) comenz¨® en los a?os treinta, cuando se interes¨® por la m¨²sica folk y el banjo, a trav¨¦s de sus padres. Recibi¨® influencias de Aunt Molly Jackson y de Woody Guthrie, con quien realiz¨® varias giras por Estados Unidos cantando para los sindicatos, escuelas, universidades y demostraciones por la paz. En 1950 se uni¨® al cuarteto Weavers, con el que populariz¨® algunas de sus canciones m¨¢s conocidas como Where have all the flowers gone.
Seeger record¨® que unos a?os despu¨¦s de su viaje a Cuba en 1961 conoci¨® en Nueva York al m¨²sico cubano H¨¦ctor Angulo. Fue por aquel tiempo cuando escuch¨® por primera vez la conocida versi¨®n de la Guantanamera con los versos de Mart¨ª en un campamento infantil de verano. Al principio, Seeger pens¨® que se trataba de una canci¨®n popular cubana —con arreglos musicales de Jose¨ªto Fern¨¢ndez—, pero desconoc¨ªa que la idea de cantar la melod¨ªa con letras de Mart¨ª fue idea del pianista y compositor espa?ol Juli¨¢n Orb¨®n. Durante a?os, Seeger fue el principal promotor de que se pagasen a Jose¨ªto Fern¨¢ndez, ya fallecido, y a Juli¨¢n Orb¨®n, quien reside en Estados Unidos, los millonarios derechos de autor que ha generado la Guantanamera y que, debido al embargo, se encontraban retenidos en un banco norteamericano.
Seeger no quiso nada para ¨¦l. "Lo ¨²nico que quisiera, cuarenta a?os despu¨¦s, es que esta canci¨®n sirviera para introducir a los j¨®venes de todo el mundo en la obra y en los versos de Jos¨¦ Mart¨ª. As¨ª el mundo ser¨ªa un poco mejor".
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