La Alianza cree que Mosc¨² admite ya la necesidad de una fuerza internacional en Kosovo
Novedad trascendental. Rusia "ha asumido ya la necesidad de desplegar una fuerza militar internacional en Kosovo", aunque discrepa de la Alianza Atl¨¢ntica sobre su composici¨®n y bandera, indicaron a este diario fuentes atl¨¢nticas. Este es el resultado fundamental del viaje del subsecretario de Estado norteamericano, Strobe Talbott, a Mosc¨². Talbott evit¨® ayer en Bruselas detallar en p¨²blico el viraje de Rusia, para preservar as¨ª su "margen de maniobra". Pero lo confes¨® en privado a los otros dieciocho aliados.
Ante los periodistas y en la sede de la OTAN, Talbott, sorte¨® una respuesta directa a la pregunta de si Rusia aceptaba el despliegue militar internacional, el punto esencial que a¨²n separa a Mosc¨² de los aliados. "No soy el portavoz de la posici¨®n rusa", se escud¨® el segundo de a bordo de Madeleine Albright, pero reconoci¨® que se trata de "una cuesti¨®n crucial" que ya fue discutida por su jefa y el ministro ruso de Exteriores, ?gor Ivanov, hace quince d¨ªas, en Oslo. "Es importante y potencialmente positivo que los rusos est¨¦n de acuerdo en el despliegue", a?adi¨®, en tono de circunloquio. Y pas¨® a insistir en que Mosc¨² s¨ª est¨¢ de acuerdo en el retorno de los deportados albanokosovares a sus hogares, rodeados de condiciones de seguridad completas. Para ello se necesita la retirada de militares, polic¨ªas y paramilitares serbios -otro punto de acuerdo con Mosc¨²-, de manera que si se retiran "?qui¨¦n entra, para evitar que Kosovo sea la jungla?", se pregunt¨®. "Es indispensable una presencia internacional para garantizar la seguridad", prosigui¨®. Y conseguir que sea eficaz "significa la OTAN; no s¨®lo la OTAN, pero desde luego la OTAN", afirm¨® refiri¨¦ndose a que el n¨²cleo duro del despliegue debe constituirlo quien dispone de la fuerza y de una estructura militar integrada, a la que por supuesto se pueden a?adir otros, como en la SFOR desplegada en Bosnia.
El diplom¨¢tico norteamericano insinu¨® luego, aunque en tono algo m¨¢s misterioso, que sus actividades exigen "cierto grado de discreci¨®n diplom¨¢tica" y que Rusia "comprende plenamente el papel que puede desempe?ar" en la resoluci¨®n pac¨ªfica de la crisis.
Todo eso -aderezado de la doctrina habitual, la de que Milosevic debe cumplir los cinco puntos, y que los aliados mantendr¨¢n hasta el final su actitud de firmeza- es lo que dijo Talbott en p¨²blico.
Pero en privado fue m¨¢s expl¨ªcito. Talbott certific¨® en el sanedr¨ªn de los aliados que, en su opini¨®n y tras lo que ha contrastado en su misi¨®n a Mosc¨², "Rusia ha asumido ya la necesidad del despliegue de una fuerza militar internacional en Kosovo", relat¨® una fuente atl¨¢ntica. Algo que supone un paso m¨¢s, y muy importante, en el forcejeo entre los Diecinueve y Mosc¨² por reconstruir un frente unido ante el dictador de Belgrado. Hace quince d¨ªas, Albright e Ivanov ya abordaron la cuesti¨®n. Abrieron v¨ªas, ahora se encauzan. El paso adelante, sin embargo, es s¨®lo un paso, no dos. Mosc¨² todav¨ªa "discrepa" de los aliados sobre c¨®mo debe ser "la estructura de la tropa" y la bandera (ONU, OSCE, OTAN) que la encabece, a?adieron las mismas fuentes. Para ellas, "todo es cuesti¨®n de tiempo, discusi¨®n y perseverancia".
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