Una tromba de agua inunda un barrio y deja a Alicante sin luz ni sem¨¢foros.Los vecinos exigen al Ayuntamiento obras urgentes contra las inundaciones

La historia se repite. El centenar de vecinos del barrio alicantino de Sangueta, frente a la estaci¨®n de Ferrocarriles de la Generalitat en la playa de El Coc¨®, se vieron ayer sorprendidos por una fuerte tromba de agua que aneg¨® los bajos comerciales y casas bajas y se llev¨® algunos coches por delante. La inundaci¨®n se produjo porque las obras inacabadas del colector de aguas pluviales han generado la obstrucci¨®n con escombros del encauzamiento del barranco de La Goteta, con lo que el agua se abri¨® paso hasta el mar por el barrio. El segundo s¨®tano del aparcamiento de la avenida Alfonso el Sabio, en pleno centro de la ciudad, tambi¨¦n se inund¨®. Los m¨¢s de 30 litros de agua por metro cuadrado que se registraron a partir de las dos y media de la madrugada en apenas 90 minutos, aunque con mayor intensidad en los primeros 30, consiguieron que el nivel del agua en Sangueta llegara a medio metro, mientras en el resto de la ciudad se suced¨ªan cortes de energ¨ªa el¨¦ctrica y aver¨ªas en la red semaf¨®rica, que no se solucionaron definitivamente hasta el mediod¨ªa. Los vecinos de Sangueta, indignados ante lo que consideran "una muestra de dejadez" por parte de las autoridades municipales por el estado de las obras, se movilizaron de forma espont¨¢nea y cortaron la carretera que une la ciudad con las playas durante media hora, en se?al de protesta, informa J. J. M. Galiana. El alcalde de la ciudad, Luis D¨ªaz Alperi, acus¨® a vecinos y periodistas de dramatizar la situaci¨®n, y asegur¨® que los primeros actuaban manipulados por intereses electorales. "Estamos en la calle. Lo hemos vuelto a perder todo", lamentaba ayer una de las vecinas afectadas por las inundaciones registradas en el barrio Sangueta de Alicante. Los vecinos, para protestar por el estado de las obras de canalizaci¨®n de aguas pluviales, se movilizaron y, sentados en la calzada para impedir el paso de veh¨ªculos, s¨®lo se levantaron cuando comprobaron que una pala excavadora comenz¨® a desatascar el barranco. En plena protesta se?alaron que tras las inundaciones del 30 de septiembre de 1997, el alcalde Luis D¨ªaz Alperi, del PP, les prometi¨® que tomar¨ªa medidas para que el barrio no se volviera a inundar. "Mientras que en San Juan ya se ha solucionado el problema, es la tercera inundaci¨®n que sufrimos nosotros", denunci¨® el presidente de la Comunidad de Propietarios, Jes¨²s Dur¨¢n. Los locales comerciales y los coches fueron los principales afectados por la avenida. La capilla del barrio, inaugurada durante la pasada Semana Santa, qued¨® arrasada. Los vecinos pasaron la ma?ana achicando el agua y limpiando de barro los locales comerciales de las fincas. Uno de ellos result¨® herido con fractura de clav¨ªcula cuando resbal¨® en el barro que hab¨ªa cubierto el patio de su casa. Hasta 15 salidas de emergencia tuvieron que cubrir los bomberos de la ciudad, la mitad de ellas para rescatar a gente del interior de sus veh¨ªculos, en esta misma barriada. Las llamadas de emergencia se etendieron a trav¨¦s del tel¨¦fono m¨®vil del jefe del parque, ya que un rayo destroz¨® la antena de comunicaciones de los bomberos instalada en el castillo de Santa B¨¢rbara. Corte del tr¨¢fico En el resto de Alicante la tormenta, acompa?ada de un fuerte aparato el¨¦ctrico, dej¨® a la mayor¨ªa de los barrios sin suministro el¨¦ctrico por unas horas. Las lluvias obligaron tambi¨¦n a cortar el tr¨¢fico hasta las cinco de la madrugada en los accesos a Alicante por las carreteras de Elche y la Vila Joiosa. La Polic¨ªa Local oblig¨® a algunas autocaravanas acampadas en cauces de barrancos a trasladarse a otro lugar como medida preventiva. Al mediod¨ªa, el alcalde de Alicante, Luis D¨ªaz Alperi, compareci¨® acompa?ado de su jefe de polic¨ªa y varios concejales en rueda de prensa para explicar la situaci¨®n y, de paso, echar una reprimenda a periodistas y los vecinos de Sangueta, que a su entender hab¨ªan magnificado el efecto de la tromba de agua. "Los vecinos tienen todo el derecho del mundo a estar disgustados, pero no tienen raz¨®n", se?al¨® el primer edil. Para el equipo de gobierno, las obras que provocaron la acumulaci¨®n de agua y barro son "absolutamente imprescindibles para evitar inundaciones graves, y estar¨¢n finalizadas antes de septiembre". Lo de ayer fue una prueba, porque las grandes riadas se producen en Alicante en el oto?o, cuando el riesgo de la temida gota fr¨ªa es mayor. "No tienen motivo para reaccionar as¨ª", continu¨® D¨ªaz Alperi, que en tono ir¨®nico record¨® que hace diez a?os nadie se manifestaba cuando se registraban inundaciones. "?No ser¨¢ que estamos en elecciones y hay ciertas personas que manipulan a los vecinos?", pregunt¨® para defenderse de las cr¨ªticas.