"El hombre est¨¢ extinguiendo muchas especies"

La vida del pasado no es una colecci¨®n de f¨®siles metidos en cajones con etiquetas, sino una construcci¨®n intelectual del hombre que, como tal, est¨¢ en continuo cambio. Con esta tesis, el paleont¨®logo brit¨¢nico Richard Fortey (1946) ha abordado la ambiciosa tarea de rememorar los m¨¢s de 4.000 millones de a?os de existencia de vida en la Tierra, a la luz tanto de los ¨²ltimos descubrimientos como del pensamiento actual en su libro La vida. Una biograf¨ªa no autorizada (Editorial Taurus). No en vano, los paleont¨®logos son famosos por sus continuas revisiones y pol¨¦micas, "la ¨²nica forma de avanzar en ciencia", recuerda Fortey, quien afirma tambi¨¦n que el hombre est¨¢ protagonizando actualmente una extinci¨®n de especies comparable a las grandes extinciones hist¨®ricas.Pregunta. ?Qu¨¦ representa una biograf¨ªa de la vida?

Respuesta. Es una historia totalmente internacional, es la misma para todos nosotros. Al principio hab¨ªa un solo continente y la fase actual de separaci¨®n de los continentes es, desde el punto de vista geol¨®gico, totalmente pasajera.

P. Usted parece abierto a las novedades m¨¢s recientes en paleontolog¨ªa, como el reconocimiento de que las arqueobacterias son, en realidad, un tipo diferente de organismos vivos.

R. Efectivamente. Una de las principales razones para escribir el libro es mostrar que el pasado es una construcci¨®n intelectual en la mente de los cient¨ªficos. La gente quiere creer que el pasado existe en t¨¦rminos absolutos, pero la reconstrucci¨®n del pasado que hacemos los paleont¨®logos a trav¨¦s de los f¨®siles, y los bi¨®logos desde hace poco a trav¨¦s de los genes, cambia a medida que cambian nuestras ideas..

P. C¨ªteme algunos ejemplos.

R. No hace mucho tiempo que la gente pensaba que no hab¨ªa vida antes del periodo C¨¢mbrico, hace unos 540 millones de a?os. Ahora sabemos que la prehistoria es much¨ªsimo m¨¢s larga. Lo sabemos a trav¨¦s de f¨®siles descubiertos en los ¨²ltimos 50 a?os y por el estudio de bacterias primitivas. Es una ¨¦poca muy emocionante en el estudio del pasado. Ha cambiado nuestra visi¨®n de c¨®mo viv¨ªan los animales extintos, como los dinosaurios. Eran criaturas adaptadas extraordinariamente a su entorno y ocupaban una serie de nichos ecol¨®gicos, lo que nos hace pensar que si no se hubieran extinguido probablemente nosotros no existir¨ªamos. Su misma extinci¨®n ha recibido una nueva explicaci¨®n, la del meteorito.

P. Usted es un especialista en trilobites. ?Qu¨¦ sabe sobre los trilobites ahora que no supiera hace 30 a?os?

R. Se han definido como los escarabajos del Paleozoico por su diversidad. En los ¨²ltimos 30 a?os se ha triplicado el n¨²mero de ellos que conocemos, y sabemos mucho m¨¢s sobre sus parientes. Est¨¢n mucho m¨¢s cerca del limulus (cangrejo cacerola), las ara?as y los escorpiones que de los crust¨¢ceos. Ahora conocemos mucho mejor la evoluci¨®n de este important¨ªsimo grupo de organismos, los artr¨®podos.

P. Usted ha refutado algunas de las teor¨ªas de Stephen Jay Gould expuestas en su libro La vida maravillosa sobre la fauna del yacimiento de Burgess Shale, en la explosi¨®n del C¨¢mbrico,

R. S¨ª, y ahora estoy hablando de mi trabajo en el Museo de Historia Natural de Londres. Creo que la ciencia avanza as¨ª, haciendo propuestas que luego son examinadas cr¨ªticamente. Gould dijo que muchos de los curiosos organismos de Burgess Shale pertenec¨ªan a grupos (phyla) desconocidos. Un colega y yo reexaminamos entre 1990 y 1994, por ejemplo, el extra?¨ªsimo Hallucinogenia y descubrimos que se hab¨ªa estudiado al rev¨¦s. Las patas pasaron a ser espinas y el animal result¨® ser un pariente de los actuales gusanos peludos. Muchos de estos fascinantes seres eran en realidad una mezcla de los grupos que han evolucionado despu¨¦s, lo que no quita en absoluto inter¨¦s cient¨ªfico al tema.

P. ?Eso quiere decir que esa batalla en concreto ha terminado?

R. Creo que s¨ª, pero surgen continuamente nuevas pol¨¦micas, especialmente en el campo de los antepasados del hombre. Hay menos f¨®siles y m¨¢s paleont¨®logos peg¨¢ndose por ellos. Las discusiones suelen ser bastante violentas.

P. ?Se llevan bien los paleont¨®logos y los bi¨®logos moleculares.?

R. En el pasado ha habido roces, pero ahora creo que la colaboraci¨®n entre ambos es una de las cosas m¨¢s excitantes de la paleontolog¨ªa moderna. Los f¨®siles s¨®lo se representan a s¨ª mismos, no indican el principio de su estirpe. Los relojes moleculares, aunque se puedan todav¨ªa perfeccionar, indican,por ejemplo, que los dinosaurios y las aves fueron contempor¨¢neos. Divergieron mucho antes de lo que se supon¨ªa. Ahora tenemos que buscar f¨®siles de aves m¨¢s antiguas.

P. Pero las fechas en paleontolog¨ªa suelen estar tambi¨¦n sometidas a discusi¨®n.

R. La secuencia de hechos s¨ª es bien conocida. Las fechas absolutas a menudo cambian a medida que se perfeccionan los m¨¦todos de dataci¨®n. Durante mi vida, el inicio del C¨¢mbrico, por ejemplo, ha pasado de hace 580 millones de a?os a hace 540 millones de a?os. La aparici¨®n de la primera c¨¦lula eucariota

[con n¨²cleo] no tiene una fecha definida, porque pas¨® hace tanto tiempo que ni la biolog¨ªa ni la geolog¨ªa pueden llegar con suficiente precisi¨®n hasta entonces. La historia de la vida siempre ser¨¢ incompleta.

P. ?Qu¨¦ se puede decir de la evoluci¨®n?

R. Lo m¨¢s llamativo no es el cambio, sino la continuidad. Se tiende a ver la vida como un continuo reemplazamiento de unos organismos por otros m¨¢s evolucionados. Ahora sabemos que muchos de los organismos m¨¢s primitivos y/o m¨¢s antiguos est¨¢n todav¨ªa con nosotros, como las arqueobacterias de las fuentes sulfurosas termales. La vida en la Tierra ha sido durante la mayor parte del tiempo, con mucho, s¨®lo bacterias.

P. ?Cu¨¢l es la mejor imagen de la evoluci¨®n de la vida?

R. Es la de un ¨¢rbol con ramas amputadas en el que salen nuevas ramas. La vida tiene una enorme capacidad de recuperaci¨®n. Los ecosistemas se han reinventado a s¨ª mismos muchas veces. Los genes y los acontecimientos externos, como el clima, han empujado la vida en una o en otra direcci¨®n. No se puede decir tampoco que no haya habido progreso, porque se han abierto nuevas posibilidades para la vida, como el paso del mar a la tierra firme. Siendo antropoc¨¦ntricos, podemos decir que el ¨²ltimo umbral que hemos cruzado ha sido el de la conciencia en el ser humano.

P. ?Qu¨¦ piensa de la posible existencia de f¨®siles de bacterias diminutas en un meteorito procedente de Marte?

R. No me convence. Son demasiado peque?as y es m¨¢s probable que sean formaciones de origen no biol¨®gico. Para demostrarlo habr¨ªa que hallar bacterias tan peque?as aqu¨ª, en la Tierra.

P.?C¨®mo ve el futuro de la vida?

R. El hombre est¨¢ introduciendo m¨¢s cambios que los que se han dado probablemente desde la extinci¨®n de los dinosaurios. Est¨¢ produciendo una gran extinci¨®n de especies. Estamos cambiando tantos par¨¢metros que no se puede saber lo que va a pasar. No vale estudiar las extinciones anteriores, ya que todas han sido diferentes entre s¨ª. Y no se puede salir del paso diciendo que el sistema se restablecer¨¢ por s¨ª solo. Eso es verdad a muy largo plazo, pero no creo que queramos volver a un universo poblado s¨®lo por bacterias. Ser¨ªa necesario que los seres humanos miraran m¨¢s all¨¢, que no ignoraran que la historia de la vida en estos 4.000 millones de a?os ha producido una complejidad que es una riqueza, una virtud, que no debemos perder.