La "armada" quiere graduarse en Par¨ªs
Moy¨¤ y Arantxa defienden a partir de hoy sus t¨ªtulos en un Roland Garros muy abierto
El Roland Garros es otra historia. El torneo parisiense, el ¨²nico Grand Slam que se disputa en tierra batida, es distinto y exige un nivel de sufrimiento mucho mayor que cualquier otro torneo de los cuatro grandes. En la primavera de Par¨ªs la calidad no basta. Debe ir acompa?ada de una gran predisposici¨®n al sacrificio. Es la primera lecci¨®n que deben aprender quienes pretenden ganar el torneo de Roland Garros, que hoy se inicia en la capital de Francia.Y es una lecci¨®n que no todos est¨¢n dispuestos a asumir. Para los jugadores procedentes de superficies r¨¢pidas -norteamericanos, australianos y asi¨¢ticos-, la adaptaci¨®n resulta m¨¢s dif¨ªcil. Ellos est¨¢n acostumbrados a ganar bas¨¢ndose en el servicio y en la volea. Y en Par¨ªs los puntos se ganan utilizando la estrategia, tras largos peloteos. Ah¨ª los espa?oles, algunos europeos y los suramericanos son los hombres a los que batir.
La armada ha convertido el Roland Garros en el objetivo prioritario de cada a?o. Y su poder¨ªo ha quedado demostrado desde 1989, cuando Arantxa abri¨® la veda convirti¨¦ndose en la ganadora m¨¢s joven de la historia. Desde entonces Arantxa ha ganado tres veces (1989, 1994 y 1998), Sergi Bruguera dos (1983 y 1984) y Carles Moy¨¤ una (1998). La culminaci¨®n fue en 1994, cuando se impusieron Arantxa, Bruguera y Jacobo D¨ªaz (junior), y Alberto Berasategui, finalista; y el a?o pasado, en el que la historia pr¨¢cticamente se repiti¨® con Arantxa y Moy¨¤ como campeones y ?lex Corretja finalista.
La cuesti¨®n que se le plantea ahora a la armada es c¨®mo va a lograr emular el ¨¦xito del a?o pasado. Y la respuesta es especialmente complicada. Ni Moy¨¤, ni Corretja, ni Arantxa, ni Conchita, los estandartes del grupo de 22 espa?oles participantes en Roland Garros, parecen estar en su mejor momento. El mallorqu¨ªn lo reconoci¨® ayer. "El a?o pasado llegu¨¦ con m¨¢s confianza porque hab¨ªa ganado en Montecarlo", dijo. Corretja llega muy fresco, tras un problema en el h¨ªgado que le alej¨® del circuito durante tres semanas, pero corto de partidos. Y F¨¦lix Mantilla parece el m¨¢s fuerte.
El torneo se presenta absolutamente abierto. Los t¨ªtulos de tierra han abierto el abanico de posibilidades y han dado alas a tenistas de segunda fila, como el argentino Franco Squillari, el austriaco Stefan Koubek y el eslovaco Dominik Hrbaty. Sin embargo, Moy¨¤ y la armada saben que sus principales rivales ser¨¢n Kuerten (campe¨®n en 1997) y R¨ªos, los mejores de la temporada. Y que si las pistas est¨¢n r¨¢pidas, Rafter y Kafelnikov (campe¨®n en 1996) tendr¨¢n m¨¢s opciones.
En el cuadro femenino, la lucha se plantea entre Martina Hingis y la dictadura de las hermanas Williams, Serena y Venus. A la espera de sorpresas.
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