El enga?o en la vida diaria
Afortunadamente para los maridos y mujeres, la investigaci¨®n de DePaulo sobre la mentira en la vida diaria indica que tienen muchas oportunidades de que su pareja no descubra su mentira. Podr¨ªa parecer que la gente tendr¨ªa m¨¢s facilidades a la hora de reconocer el enga?o de los que conocen bien, "pero no siempre es as¨ª", dice De Paulo. "Cuando tienes una relaci¨®n tienes motivaciones para ver a tu compa?ero de una forma determinada, y sobre todo, no quieres pensar que te miente".En otro estudio, DePaulo y sus colegas estudiaron a parejas de estudiantes del mismo sexo que se conoc¨ªan desde hac¨ªa un mes. A cada amigo se le ped¨ªa que contara al otro una serie de historias de su vida, algunas de las cuales eran ciertas y otras mentira. Cinco meses despu¨¦s se repiti¨® el ejercicio. Los investigadores descubrieron que despu¨¦s de conocerse durante seis meses, los hombres del estudio segu¨ªan siendo incapaces de descubrir cu¨¢ndo ment¨ªa la otra persona. Sin embargo, las mujeres lo hicieron algo mejor, y detectaron las mentiras con un nivel de exactitud en torno al 60%.
DePaulo ha pasado a investigar mentiras graves, que conlleven traiciones devastadoras de confianza. En un estudio de 66 estudiantes y 107 vecinos se les pidi¨® que contaran la mentira m¨¢s grave que hab¨ªan contado jam¨¢s y que les hubieran contado.
No fue sorprendente descubrir que la m¨¢s com¨²n de esas mentiras ten¨ªa que ver con las relaciones extraconyugales. Pero los sujetos tambi¨¦n confesaron haber mentido sobre dinero, sobre la muerte de alguna persona cercana, y admitieron haber mentido al jefe cuando sent¨ªan que merec¨ªan algo, como dinero o tiempo de descanso. Algunos sujetos del estudio recordaban las mentiras que hab¨ªan contado 50 a?os antes.
Pero quiz¨¢ las falsedades m¨¢s impresionantes, a?ade DePaulo, eran las contadas por personas que "viv¨ªan una mentira". Una mujer del estudio se divorci¨®, se fue a vivir a otra ciudad, y durante 20 a?os estuvo diciendo a sus compa?eros de trabajo que "ten¨ªa que irse a casa para hacerle la cena a su marido".
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