En Europa como en Espa?a

, Las cinco grandes candidaturas que se presentan a las elecciones para el Parlamento europeo se muestran claramente europe¨ªstas en sus programas y b¨¢sicamente satisfechas con el proceso de integraci¨®n. Salvo IU, muy cr¨ªtica con el dise?o actual de la UE no s¨®lo en lo pol¨ªtico e institucional, sino especialmente en lo econ¨®mico.

> PP.

El programa electoral del PP puede parecer m¨¢s bien un glosario de los logros del Gobierno popular. Despu¨¦s de una fuerte cr¨ªtica a la forma en que los socialistas negociaron la entrada en la Comunidad Europea en 1986, sobre todo en el tema agr¨ªcola, que es el que ata?e a su candidata, Loyola de Palacio, su texto se centra en demostrar c¨®mo el PP "ha puesto fin a aquella inaceptable situaci¨®n". El momento clave, que domina sus 53 p¨¢ginas, es marzo de 1999. Fue entonces cuando, en la cumbre de Berl¨ªn, Espa?a logr¨® que se mantuvieran los fondos de cohesi¨®n, aunque reducidos, y cuando "la brillante gesti¨®n" de De Palacio obtuvo, seg¨²n el PP, beneficios en materia agraria para Espa?a. Sigue el glosario: en 1996 Espa?a no cumpl¨ªa ninguno de los criterios de convergencia. Gracias a la pol¨ªtica "firme y rigurosa" de Aznar, se han podido cumplir. La inclusi¨®n entre los 11 pa¨ªses de la zona euro se considera un logro del Ejecutivo y por ello el PP lo utiliza para comparar su importancia con el Plan de Estabilizaci¨®n de 1959 o la entrada en la Comunidad de 1986. En el cap¨ªtulo que se acerca m¨¢s a las propuestas para el futuro, el PP ofrece defender en Europa los intereses de Espa?a manteniendo "posturas firmes en las negociaciones". En el terreno econ¨®mico, defensa de la liberalizaci¨®n de los mercados y de la privatizaci¨®n de servicios como aeropuertos o carreteras.

> PSOE-Progresistas.

Los socialistas han elaborado para estas elecciones no un programa, sino un manifiesto de 21 puntos, acordados con todos los miembros del Grupo Socialista Europeo. El PP ha criticado el escaso volumen de este documento, comparado con las 53 p¨¢ginas del suyo. Los socialistas critican sobre todo la concepci¨®n "desideologizada" que, seg¨²n dice, la derecha tiene de Europa. Y todo el manifiesto es una especie de oda al orgullo de ser ciudadano europeo, de las bondades de pertenecer a Europa, y una llamada al compromiso para lograr una UE m¨¢s solidaria y m¨¢s cercana al ciudadano. "Europa es algo m¨¢s que una moneda", se dice en referencia al euro para resumir ese sentimiento. El manifiesto tiene llamadas casi m¨¢s propias de un mitin: "No aceptamos la resignaci¨®n. Creemos en nuestras posibilidades creativas como europeos". Pero tambi¨¦n se recuerdan los logros. En la parte dedicada a la historia, all¨ª donde el PP criticaba la negociaci¨®n de entrada en la UE, los socialistas hablan de las "aportaciones esenciales" de Espa?a al proceso de construcci¨®n europea: la cohesi¨®n, la ciudadan¨ªa europea, las relaciones con Am¨¦rica latina. Y un espacio, tras recordar que les llamaron "pedig¨¹e?os", para la cr¨ªtica al PP: "El Gobierno de Aznar ha hecho que Espa?a pierda peso pol¨ªtico en la UE".

> Izquierda Unida.

Es la fuerza que m¨¢s gravemente critica el sistema institucional y econ¨®mico de la UE . Especialmente, en lo que se refiere a las conclusiones surgidas del Tratado de Amsterdam, que considera un aut¨¦ntico fracaso al no haber logrado crear una verdadera Constituci¨®n europea, a la que aspira IU. El d¨¦ficit democr¨¢tico de la UE recibe fuertes cr¨ªticas y condiciona casi todas las propuestas: igualdad de la Comisi¨®n y del Consejo de Ministros a la hora de ejercer el poder legislativo; control por el Parlamento Europeo de todos los organismos de la UE; cr¨ªticas a la cesi¨®n de las pol¨ªticas monetarias al Banco Central Europeo por su nula representatividad democr¨¢tica... Pero las cr¨ªticas m¨¢s fuertes son para el modelo econ¨®mico defendido por la UE: "La presente crisis econ¨®mica y financiera muestra la falsedad de los postulados de la ortodoxia liberal" sobre los que se funda la econom¨ªa europea. La guerra en Yugoslavia, que ha centrado la campa?a de IU, tambi¨¦n tiene cabida: "En esta guerra, la UE deja de existir como proyecto propio al haber sucumbido al designio estadounidense".

> PNV-EA-ERC-UM.

Europa es la clave del desarrollo de la soberan¨ªa vasca. ?sta es la idea central del programa de los nacionalistas vascos, que concurren a las elecciones en coalici¨®n con Esquerra Republicana de Catalunya y Uni¨®n Mallorquina. Los nacionalistas parecen estar mucho m¨¢s dispuestos a tener a Bruselas que a Madrid como interlocutor para negociar competencias. Es la vieja concepci¨®n de la Europa de los Pueblos. Por ello proponen que cambie la idea "estatalista" de la integraci¨®n europea para que queden representadas las diversas "naciones y regiones" de los 15. Tras alguna ret¨®rica como definirse "pueblo milenario", medidas concretas: la creaci¨®n de una segunda C¨¢mara al margen del Parlamento Europeo, una especie de Senado en el que estar¨ªan representados todos los pueblos. Y una opci¨®n inteligente: apoyar con firmeza la entrada de los pa¨ªses del Este. S¨®lo varias p¨¢ginas despu¨¦s se entiende por qu¨¦: "La dimensi¨®n y poblaci¨®n de algunas de esas naciones son menores que las de Euskadi por lo que no se podr¨¢ invocar jam¨¢s la escasa dimensi¨®n de nuestro pueblo para impedirle el ejercicio de sus derechos colectivos".

> CiU.

Los programas de los nacionalistas vascos y catalanes son muy similares. Tanto que consta como anexo las conclusiones de la Declaraci¨®n de Barcelona que firmaron CiU, PNV y BNG. La clave es el reconocimiento de la Generalitat como interlocutor v¨¢lido de la UE para todos los temas en los que tengan competencias. Y uno de los asuntos que m¨¢s preocupan es el de poder reclamar ante el Tribunal de Justicia Europeo cuando haya conflictos de competencias con el Gobierno central. Evitar¨ªan as¨ª pasar por el Tribunal Constitucional. Medidas para que Catalu?a est¨¦ m¨¢s representada en Europa: tener subcomisarios enviados por la Generalitat y participaci¨®n en el Consejo de Ministros de la UE. Y un tema clave: que el catal¨¢n sea lengua oficial en los organismos europeos ya que, por el n¨²mero de personas que lo tienen como idioma oficial, es el s¨¦ptimo de Europa, por delante del sueco o el dan¨¦s.