La tarea de Obuchi

A pesar de las estimulantes cifras sobre la producci¨®n en el ¨²ltimo trimestre y del repentino entusiasmo por el yen en los mercados de divisas, el primer ministro de Jap¨®n, Keizo Obuchi, a¨²n duda de las perspectivas de recuperaci¨®n econ¨®mica de su pa¨ªs.

Los datos recientes pueden haberle dado algunos motivos de optimismo. Aunque se esperaba que gracias al gasto p¨²blico mejoraran los datos de producci¨®n en el primer trimestre, el 7,9% de crecimiento anual proyectado supera todas las expectativas. El incremento del consumo privado y la inversi¨®n es alentador.

Sin embargo, cabe hacer varias reservas. Las cifras de crecimiento pueden ocultar errores estad¨ªsticos, y quiz¨¢ otros datos econ¨®micos no indiquen tanta solidez. (...) Pero lo m¨¢s importante es que el ¨ªmpetu fiscal pueda desvanecerse a medida que transcurra el a?o. La reestructuraci¨®n empresarial seguir¨¢ teniendo una influencia deflacionista. Y cualquier esperanza de que la recuperaci¨®n asi¨¢tica pueda apoyar la producci¨®n mediante el incremento de las exportaciones qued¨® en entredicho ayer, cuando se conocieron las estad¨ªsticas que indican una ca¨ªda interanual del 4,8% del volumen de exportaci¨®n. (...) Una recuperaci¨®n sostenible en Jap¨®n requerir¨¢ reformas estructurales. El paquete de medidas gubernamentales referentes al desempleo y la reestructuraci¨®n empresarial supone un avance, pero a¨²n queda mucho por hacer. La funci¨®n vital de la pol¨ªtica macroecon¨®mica es evitar que la econom¨ªa entre otra vez en recesi¨®n mientras Jap¨®n se reorganiza.

22 de junio