El responsable pol¨ªtico y dos t¨¦cnicos reiteran ante el juez la validez del informe que achaca el brote a Maeso

El director general de Salud P¨²blica de la Consejer¨ªa de Sanidad, Francisco Bueno; la responsable del servicio de epidemiolog¨ªa de ese departamento, Hermelinda Vanaclocha y el jefe del ¨¢rea de vigilancia de la salud p¨²blica del Instituto Carlos III, Ferran Mart¨ªnez, defendieron ayer en el Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 5 de Valencia tanto la validez cient¨ªfica del informe epidemiol¨®gico sobre el brote de hepatitis C como la independencia de los t¨¦cnicos que elaboraron el estudio. Los tres testigos fueron citados por el juez encargado de investigar el masivo contagio a petici¨®n de Francisco Dav¨®, el abogado del ¨²nico imputado por el caso, Juan MaesoTodos ellos explicaron las directrices seguidas para elaborar el informe, defendieron sin fisuras su correci¨®n cient¨ªfica y negaron, ante las preguntas de Dav¨® en ese sentido, que el estudio se hubiera centrado en el anestesista imputado. El informe epidemiol¨®gico, finalizado y presentado al juez el pasado octubre, vincula a Juan Maeso con 171 casos de contagio, concluye que Maeso es la ¨²nica fuente de contagio y subraya que el facultativo, jefe de anestesiolog¨ªa del hospital Maternal de la ciudad sanitaria La Fe, utilizaba dosis de opi¨¢ceos superiores a las normales. El ADN de las muestras utilizadas revel¨® una coincidencia absoluta entre el virus del anestesista y el de las personas infectadas. Vanaclocha y Mart¨ªnez Navarro insistieron en la total validez de esas conclusiones. Bueno, por su parte, explic¨® una vez m¨¢s c¨®mo la consejer¨ªa, tras tener conocimiento el 20 de marzo de 1998 de la posible existencia del brote, articul¨® los mecanismos necesarios para identificar el foco o focos de contagio y ponerle o ponerles coto con la m¨¢xima urgencia. El director general de Salud P¨²blica neg¨® que las autoridades sanitarias hubieran dirigido el estudio. Fue realizado por cient¨ªficos "independientes", dijo. "Por los mejores", a?adi¨®. Los testimonios de Vanaclocha y Mart¨ªnez tampoco aportaron novedades. La primera, como en todas las comparecencias, a preguntas, b¨¢sicamente, de Dav¨® y del fiscal, reiter¨® los resultados del estudio, neg¨® que ¨¦ste se hubiera centrado en la actividad del anestesista imputado con ¨¢nimo de responsabilizarle del brote y justific¨® el lugar de realizaci¨®n del informe: el servicio de la consejer¨ªa y no el del ¨¢rea territorial, en principio, su lugar natural. Para Vanaclocha, la gravedad del caso y la alarma social que despert¨® explican la creaci¨®n de un equipo espec¨ªfico. La jefa de servicio de Sanidad no eludi¨® cr¨ªticas hacia la Casa de Salud, la cl¨ªnica privada en la que se detect¨® el brote, por la falta informaci¨®n registrada en el centro. Mart¨ªnez no insisti¨® en este extremo, pero descart¨® que el objeto del estudio fuera analizar la actividad profesional de Maeso. Al contrario, el estudio epidemiol¨®gico lleg¨® a esa conclusi¨®n tras descartar cualquier otro foco de contagio. Sin embargo, Dav¨®, a la salida del juzgado, asegur¨® que su cliente no es "el foco de contagio, sino un afectado m¨¢s".