Tesoros bajo el asfalto

El Ministerio de Cultura y el Ayuntamiento de Roma han firmado un convenio que prev¨¦ la colaboraci¨®n entre ambas instituciones para llevar a cabo excavaciones arqueol¨®gicas en la Ciudad Eterna entre el a?o 2000 y el 2010. La intenci¨®n del alcalde, Francesco Rutelli, es que la ciudad disponga de una estrategia que le permita afrontar esta tarea de recuperaci¨®n hist¨®rica de manera continuada y no s¨®lo a golpe de presupuestos. Son muchas las canteras arqueol¨®gicas todav¨ªa intocadas. La colina donde se encuentra el hospital Celio, cerca del Coliseo, el Circo Massimo, con sus estructuras escondidas bajo el actual suelo, adem¨¢s de la Via Appia Antigua, son algunos de los objetivos de la nueva campa?a. Pese a ello, los arque¨®logos saben que Roma esconde tesoros tambi¨¦n bajo el asfalto de Piazza Venezia, en torno a la Piazza Navona o al Corso Vittorio Emanuele, zonas demasiado esenciales en la actividad de la ciudad como para que ning¨²n alcalde se atreva a abrirlas en aras de la historia. "Las excavaciones dependen de los fondos de que se dispone", explica Meneghini. "En Roma hemos recibido una fuerte suma en 1981, despu¨¦s en la fase de Roma Capitale", y finalmente ahora gracias al Jubileo. Hemos llegado al nivel del alto medievo en las excavaciones del Foro de Trajano, con importantes hallazgos". Cabe preguntarse si necesita verdaderamente Roma de todo este esfuerzo reconstructor que tergiversa un poco la pureza decadente de sus ruinas. "No lo creo", sentencia Meneghini, "cuando existen los datos para hacerlo y se utilizan fragmentos que han sido encontrados en un radio de distancia peque?o, no hay nada de err¨®neo en colocar una piedra sobre otra. Por otra parte, tanto los templos circulares de Torre Argentina como las viviendas del siglo II despu¨¦s de Cristo que hay junto a la iglesia de Santa Mar¨ªa in Aracoeli, estaban bastante bien conservadas de por s¨ª". Se trata ¨²nicamente de facilitarle el esfuerzo de imaginaci¨®n al turista, la gran estrella de nuestro tiempo.