Wall Street invierte en la guerrilla

Si es cierto que el capitalismo es la jungla, ?qu¨¦ mejor sitio que La Machaca -un villorrio del Caquet¨¢, en el sur de Colombia, dentro de la zona controlada por la guerrilla- para hablar de mercados financieros y de inversiones con el representante de una organizaci¨®n que el Gobierno de EEUU considera terrorista? Richard Grasso, presidente de la Bolsa de Nueva York, abandon¨® el frenes¨ª de Wall Street para reunirse el s¨¢bado durante hora y media con Ra¨²l Reyes, comandante de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y hombre de confianza de su dirigente m¨¢ximo, Manuel Marulanda, Tirofijo, y jefe guerrillero que negocia la paz con el Gobierno de Bogot¨¢.

Despu¨¦s del ins¨®lito encuentro, Grasso invit¨® a Reyes y la direcci¨®n de las FARC a visitar Wall Street, el sancta sanctorum del capitalismo. Como todos los visitantes ilustres, Tirofijo -si acude a Nueva York- tendr¨¢ que tocar la campana que abre la sesi¨®n burs¨¢til entre los aplausos de intermediarios y agentes.

Seg¨²n sus declaraciones a la prensa en el aeropuerto de San Vicente del Cagu¨¢n, acompa?ado por el comisionado para las conversaciones de paz, V¨ªctor Ricardo Restrepo, Grasso habr¨ªa llevado el agua a su molino durante los 90 minutos de conversaci¨®n en la selva: "Hablamos sobre las oportunidades econ¨®micas y sobre la democratizaci¨®n del capitalismo, en el sentido de c¨®mo los mercados desarrollados y en desarrollo de todo el mundo est¨¢n ampliando la participaci¨®n de un mayor n¨²mero de propietarios". Para digerir mejor los nuevos conceptos y para tener el contraste con la realidad que exigir¨ªan sus fundamentos ideol¨®gicos, los l¨ªderes de las FARC fueron invitados a Nueva York: "De esa forma podr¨¢n conocer el mercado financiero", dijo Grasso.

En el terreno de lo concreto, el presidente de la Bolsa se?al¨® tambi¨¦n que Reyes y sus acompa?antes hab¨ªan formulado muchas preguntas y "resuelto algunas dudas" en la reuni¨®n, en la que se habl¨® de las posibilidades de las empresas colombianas en los mercados internacionales y de su capacidad para contribuir al desarrollo de Colombia.

Impert¨¦rrito y quiz¨¢ anticipando la bonanza que se puede derivar del contacto entre el sumo sacerdote del templo del capitalismo y la guerrilla marxista, el ministro del Interior de Colombia, Juan Camilo Restrepo, se limit¨® a decir que el objetivo era "mantener un interesante intercambio de ideas".

Restrepo subray¨® que la presencia de Grasso y del vicepresidente de la Bolsa neoyorquina, Alan Murban, se deb¨ªa a una invitaci¨®n del presidente colombiano, Andr¨¦s Pastrana.

Anticip¨¢ndose a las cr¨ªticas que recibir¨¢ en EEUU por establecer contactos con un grupo que figura en la lista de organizaciones terroristas internacionales del Departamento de Estado, Richard Grasso insisti¨® en que el encuentro fue "estrictamente privado", pero expres¨® su confianza en que marque "el comienzo de una nueva relaci¨®n entre las FARC y Estados Unidos".

Hay quienes piensan lo mismo en Washington: hace tres semanas, el propio Reyes se entrevist¨® secretamente en el mismo lugar de Colombia con William Delahunt, representante dem¨®crata de Massachusetts.

La mayor¨ªa republicana en el Congreso se ha opuesto en repetidas ocasiones al establecimiento de contactos con las FARC no s¨®lo porque una columna de la guerrilla mat¨® a tres norteamericanos que ayudaban a grupos ind¨ªgenas en la selva, sino porque acusan al grupo de ingresar millones de d¨®lares procedentes del narcotr¨¢fico.

Para echar m¨¢s le?a a este fuego, The New York Times asegura que el Gobierno colombiano ha empezado a incluir datos de ingresos procedentes del cultivo y tr¨¢fico de drogas en las cifras del PIB del pa¨ªs. El diario cita a altos funcionarios del Gobierno de Bogot¨¢ que justifican la medida como un elemento de realismo: el mercado de la droga puede mover alrededor de 640.000 millones de pesetas, lo que supondr¨ªa entre una tercera y una cuarta parte del volumen de las exportaciones colombianas.

"Es un c¨¢lculo t¨¦cnico, no una medida pol¨ªtica", declara al diario Tom¨¢s Gonz¨¢lez Estrada, asesor de Pastrana, que cree que su inclusi¨®n dar¨¢ una idea cabal del conjunto de la actividad econ¨®mica y que el Gobierno tendr¨¢ as¨ª m¨¢s despejado el panorama para combatir con eficacia la producci¨®n y el tr¨¢fico de drogas.