Fidel Castro estrecha relaciones con Aznar, al que califica de "valiente", "sabio" y "afectuoso"

ENVIADO ESPECIALEl presidente de Cuba, Fidel Castro, volvi¨® ayer a tomar la iniciativa en las relaciones hispano-cubanas al calificar en R¨ªo de Janeiro al presidente espa?ol, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, como "el m¨¢s leal colaborador de la cumbre [Iberoamericana] de La Habana", seg¨²n la versi¨®n de un portavoz del Gobierno espa?ol. Con este t¨ªtulo honor¨ªfico, Castro agradec¨ªa a Aznar "sus esfuerzos" diplom¨¢ticos por asegurar el ¨¦xito de esa reuni¨®n, con el objetivo de que todos los jefes de Estado y de Gobierno iberoamericanos est¨¦n presentes en la capital cubana el pr¨®ximo mes de noviembre.

Castro, con enorme habilidad, situ¨® en primer plano el mutuo inter¨¦s -el ¨¦xito de la Cumbre Iberoamericana- e ignor¨® las reticencias expresadas por Aznar el s¨¢bado, en Asunci¨®n (la capital de Paraguay), sobre la situaci¨®n interna cubana. Adem¨¢s, se deshizo en palabras amables para Aznar, con quien dijo mantener unas relaciones que "cada vez son mejores". El presidente cubano tuvo especial inter¨¦s en subrayar el buen estado de las relaciones de Cuba con Espa?a, y sus relaciones personales con Aznar, al que calific¨® de "valiente". Puso como ejemplo su reacci¨®n ante el atentado de ETA, que fue "hidalga" y "espa?ola". Dijo compartir, pese a ser "adversarios ideol¨®gicos", un mismo car¨¢cter: los dos hablamos, dijo, de una forma franca y sincera. En un derroche de adjetivos, lleg¨® a calificar a Aznar de "sabio, talentoso y afectuoso".

Aznar acudi¨® a primera hora de la ma?ana al hotel donde se alojaba el presidente cubano, situado frente a la playa de Copacabana, antes de que se abriera oficialmente la Cumbre de la Uni¨®n Europea (UE) con Latinoam¨¦rica y el Caribe. Vestido con un traje gris azulado, Castro recibi¨® a Aznar acompa?ado del nuevo ministro cubano de Exteriores, Felipe P¨¦rez Roque. La agenda de la reuni¨®n, seg¨²n fuentes espa?olas, se limit¨® a tratar de la cumbre de R¨ªo, de la pr¨®xima de La Habana y de la situaci¨®n de Cuba. Ninguno de los asuntos delicados -el aumento en Cuba de las ejecuciones de delincuentes comunes, o la condena a muerte de dos salvadore?os por delitos de terrorismo-, cuestiones suscitadas por Aznar el s¨¢bado en una conferencia de prensa en Asunci¨®n, salieron a relucir en la conversaci¨®n con Castro.

Crecimiento cubano

El presidente cubano aprovech¨® la ocasi¨®n para explicar que espera un crecimiento econ¨®mico entre el 4% y el 6%, provocado por una industria tur¨ªstica en expansi¨®n. Del anunciado viaje de los Reyes a Cuba -al margen de su asistencia a la Cumbre de noviembre- tampoco se trat¨®. Ambas partes declaran oficialmente que no existe problema alguno para que la visita se realice alg¨²n d¨ªa, y apuntan a problemas de calendario para que tampoco se realice este a?o. En Asunci¨®n, Aznar dijo que no se daban "las circunstancias" precisas para la visita. Ayer, los portavoces de La Moncloa afirmaban que habr¨¢ que buscar el momento para que el viaje real pueda servir para dar un nuevo impulso a las relaciones.

Qued¨® claro que el inter¨¦s de ambos pol¨ªticos era concertar esfuerzos para que la Cumbre Iberoamericana de La Habana sea un ¨¦xito, conscientes, tal vez, de que habr¨¢ fuerzas que intentar¨¢n empa?ar su celebraci¨®n. Y en ese contexto, fuentes diplom¨¢ticas espa?olas se?alaron que Castro destac¨® los esfuerzos de Aznar para que todos los Jefes de Estado latinoamericanos est¨¦n en La Habana. La diplomacia espa?ola media ante el presidente de Nicaragua, Arnoldo Alem¨¢n, y el chileno, Eduardo Frei, que, por motivos distintos, barajan no acudir a La Habana.

El primero es un furibundo anticastrista, mientras que la posici¨®n chilena tiene que ver con la crisis diplom¨¢tica que se ha abierto con el caso Pinochet.

Desde el punto de vista de la comunicaci¨®n, Castro tambi¨¦n volvi¨® a ganarle a Aznar. Mientras el presidente del Gobierno espa?ol cruz¨® raudo ante la prensa que aguardaba al final de la reuni¨®n - le esperaba el presidente de Argentina, Carlos Menem-, Castro se demor¨® m¨¢s de una hora para dar despu¨¦s una larga conferencia de prensa en la que elogi¨® reiteradamente a Aznar y se permiti¨® alguna iron¨ªa sobre la OTAN, el nacionalismo y la situaci¨®n en el Pa¨ªs Vasco.

Preguntado por las negociaciones con ETA, Castro aprovech¨® la ocasi¨®n para lanzar su peque?a carga de iron¨ªa. "Me alegro mucho de que se busque una soluci¨®n pol¨ªtica, sabia, inteligente, no sea que un d¨ªa se le ocurra a la OTAN entrarle a bombardear a Espa?a, por un problema ¨¦tnico, nacionalista, que a m¨ª no me parece correcto".

La entrevista con Castro eclips¨® totalmente la reuni¨®n que Aznar mantuvo con Menem, otro de los presidentes que muestra reticencias para ir a La Habana. Espa?a se ha convertido en uno de los inversores m¨¢s importantes de Argentina, con presencia en todos los sectores estrat¨¦gicos de la econom¨ªa de ese pa¨ªs, lo que no ha dejado de suscitar algunas reacciones contrarias.