"Almer¨ªa puede convertirse en paradigma de ciudad sostenible"

Permaneci¨® 11 a?os con el proyecto de Barcelona 92. desde el primer d¨ªa hasta el ¨²ltimo. Lluis Millet (Barcelona, 1943), arquitecto superior de urbanismo, vivi¨® en s¨®lo una d¨¦cada la evoluci¨®n de una ciudad que cualquier otro profesional habr¨ªa observado a lo largo de toda una vida. Este asesor urban¨ªstico de grandes proyectos de ciudades es el autor del plan estrat¨¦gico, anteproyecto y proyecto de la candidatura almeriense para los Juegos Mediterr¨¢neos del 2005. Pregunta. ?Cu¨¢l es el dise?o ideal de la villa deportiva que Almer¨ªa necesita para los Juegos? Respuesta. Yo lo que har¨ªa ser¨ªa recabar ideas. Esto no surge de una charla de caf¨¦, es fruto del trabajo y deben hacerlo los profesionales. Debe ser objeto de un concurso internacional. P. ?Se corre el riesgo de convertir El Toyo, terreno de la futura villa, en foco especulativo? R. El terreno es p¨²blico y es dif¨ªcil que ocurra. Pero no hay dos Toyos ni en Almer¨ªa ni en Espa?a. La costa est¨¢ muy depredada. Si se hace mal se pierde la ocasi¨®n para siempre. P. ?Qu¨¦ ideas sugiere para esa futura villa ol¨ªmpica? R. Yo apostar¨ªa por el hecho de hacer una ciudad basada en la sustentabilidad del desarrollo. Introducir todos los criterios ambientales que hoy existen (viento, sol y agua) y energ¨ªas alternativas. Almer¨ªa tiene una ocasi¨®n para convertirse en paradigma de ciudad sostenible, visible y apacible. P. ?Seguir¨¢ usted en el proyecto del 2005? R. Yo encantado. Pero primero debe formarse el Comit¨¦ Organizador de los Juegos, que reflejar¨¢ un equilibrio entre todas las administraciones participantes. P. ?Qu¨¦ balance vaticina justo para el d¨ªa despu¨¦s del gran evento? R. Los juegos sirven para que la gente cambie y no s¨®lo van a traer a Almer¨ªa modificaciones urban¨ªsticas y culturales. De sentirse el patito feo de Andaluc¨ªa y Espa?a pasar¨¢ a sentirse orgullosa de un acontecimiento. Eso cambia la forma de ver la vida. El ambiente ser¨¢ m¨¢s deportivo, m¨¢s culto, m¨¢s transigente. Seguro que sucede. Es imposible que los efectos sean nulos. P. ?Siempre crey¨® en Almer¨ªa? R. En 1994 nos dimos cuenta de sus posibilidades. Terminamos el plan estrat¨¦gico y le dijimos al Ayuntamiento: "Si haces esto, tendr¨¢s los juegos". La inversi¨®n ha de ser rentable para el d¨ªa antes y el d¨ªa despu¨¦s. El presupuesto dise?ado fue muy poco y ha ganado. Valencia, con uno mayor, perdi¨®. P. ?Lo de Barcelona ha determinado su labor presente? R. En parte. Ahora nos dedicamos a asesorar a ciudades con acontecimientos en ciernes. Es una cuesti¨®n de operatividad.