MAR?A ROSA BOLADERAS EXPERTA EN SECTAS "Las sectas ponen en la calle a cualquiera que haga preguntas"

A las sectas se les menciona para dar cuenta de hechos de gravedad: suicidios colectivos, cr¨ªmenes genocidas, estafas, negocios turbios, proselitismo agresivo, l¨ªderes carism¨¢ticos enloquecidos, fanatismo, etc¨¦tera. Aunque parezca que ¨¦stas sean ajenas a nuestra vida diaria, m¨¢s de 8.000 vascos podr¨ªan estar involucrados en sectas consideradas peligrosas, seg¨²n un estudio elaborado por la agrupaci¨®n Largantza, que acaba de nacer en Euskadi para asesorar y prevenir a las personas ante tal peligro. Con tal motivo, acudi¨® a San Sebasti¨¢n Mar¨ªa Rosa Boladeras (Barcelona, 1931), presidenta de AIS (Asesoramiento e Informaci¨®n sobre Sectas) de Catalu?a y miembro de la Red Internacional contra Movimientos sectarios y de control mental. Pregunta. Cuando o¨ªmos hablar de sectas parece que ¨¦stas act¨²an en lugares muy lejanos. Respuesta. S¨ª, como si sucediera en Estados Unidos o en grandes ciudades. Pues no, las tenemos a la vuelta de la esquina. P. ?C¨®mo cae una persona en las redes de una secta? R. Que pase por una crisis: de crecimiento, de enfermedad, de trabajo, de integraci¨®n de soledad, de lo que sea. Entonces encuentra al grupo que le va a su car¨¢cter, su forma de ser. Esta persona se inscribe. Un hecho muy peculiar es que, por ejemplo, una persona cient¨ªfica no entrar¨¢ en un grupo que le hablen de otra cosa que no sea ciencia. Cada grupo tiene su car¨¢cter y su parcela de poblaci¨®n. Al entrar, la persona tiene el problema y le prometen solventarlo. Empiezan las charles, asistes a sesiones. La persona va perdiendo cr¨ªtica y razonamiento. Cuando llega el momento de preguntar ya no lo hace porque el l¨ªder tiene la verdad absoluta. Siempre obedece y nunca exige. P. ?El l¨ªder es una persona consciente e interesada o tambi¨¦n llega a perder el juicio? R. Nunca se ha hecho un estudio sobre los l¨ªderes pero se dice que son gente paranoica, que a medida que ellos enferman, enferman al grupo. Por lo tanto se llegan a creer lo que est¨¢n vendiendo. P. ?Siempre hay un m¨®vil econ¨®mico? R. Cuando una persona est¨¢ en un poder, ejerce el poder por el poder. Esto le lleva a tener necesidad del dinero. P. Ser¨¢ dif¨ªcil diferenciar entre lo que es una estafa a secas y una secta. R. Evidentemente es una estafa, pero psicol¨®gica. La gente que entra es mayor de edad. Nunca te dicen que ha entrado porque ha sido enga?ada. Siempre me ponen la similitud con un convento. Un convento ser¨¢ m¨¢s abierto o m¨¢s cerrado pero te dan unos estatutos antes de entrar. La persona que entra sabe a qu¨¦ va. La persona que entra a un grupo sectario nunca sabe a qu¨¦ va. Cada d¨ªa se encuentra que para llegar a ma?ana tendr¨¢ que hacer algo. En un grupo sectario entras por emotividad, jam¨¢s por razonamiento. P. Existen pocos casos de discrepancia, ?qu¨¦ riesgo conlleva? R. F¨ªsicos y psicol¨®gicos. Le han vendido la pel¨ªcula de que el mundo exterior es malo. Si tienen un poco de soporte externo es lo que les hace dar el paso. Son casos contados. Ojal¨¢ hubiera m¨¢s. Los que logran salir est¨¢n poco integrados en la sociedad. Cuesta mucho que tengan un proceso laboral normal. Habr¨ªa que hacer una reeducaci¨®n, de la que carecemos absolutamente en Europa porque de momento no hay rehabilitadores. P. Desde su asociaci¨®n investigan sectas, ?es peligroso? R. Intentamos hacer lo que podemos. Descubres muchas cosas que prefirir¨ªas no saber. P. ?Hay zonas en Espa?a con mayor incidencia que otras? R. No. Tenemos todas las sectas, en todas partes, y cada vez m¨¢s aut¨®ctonas. All¨ª donde no hay un duro no estar¨¢n. Pero en los n¨²cleos urbanos, all¨ª donde hay un m¨ªnimo de dinero, las encontrar¨¦is. En Madrid por ejemplo est¨¢n todas porque es donde est¨¢ el gobierno, las subvenciones. P. ?Podr¨ªa dar un par de consejos para que una persona que atraviesa un crisis no caiga en una secta? R. Que acuda a un profesional, a su familia, que no vaya nunca a un sitio desconocido, que pregunte qui¨¦n es el l¨ªder, su finalidad, los estatutos, que le pregunte y le pregunte. La persona que pregunta inmediatamente la ponen de patitas en la calle. Y sobre todo que no rompan jam¨¢s los lazos de afectividad. P. ?C¨®mo s¨¦ yo que su asociaci¨®n no es una secta? R. Porque le permito que me haga preguntas y ponga en duda lo que le estoy contando.