Alperi negocia la compra del hotel Gran Sol para reducirlo a la mitad

El hotel Gran Sol, considerado por muchos como la m¨¢s sonada aberraci¨®n urban¨ªstica de la ciudad de Alicante, podr¨ªa desaparecer de la escena si fructifica una operaci¨®n que el alcalde, Luis D¨ªaz Alperi, ha puesto en marcha para reducir a la mitad la altura de este rascacielos de 30 plantas, levantado en pleno centro en la d¨¦cada de los sesenta. El primer edil negocia ya con la familia propietaria la compra del inmueble mediante una f¨®rmula mixta: dinero y suelo p¨²blico para construir.

El Gran Sol, arrendado hoy a la cadena Tryp Hoteles, se levanta en el n¨²mero 3 de la Rambla de M¨¦ndez N¨²?ez, en pleno centro de Alicante. Se trata de un rascacielos sin el menor inter¨¦s arquitect¨®nico construido en plena ¨¦poca del desarrollismo, cuando se impuso la costumbre de medir el poder econ¨®mico de las ciudades por la altura de sus inmuebles de nuevo cu?o. Con sus 30 plantas, es el edificio m¨¢s alto del casco urbano, que afea el conjunto y resta visibilidad y perspectiva al castillo de Santa B¨¢rbara, la construcci¨®n m¨¢s emblem¨¢tica de Alicante. Un "pegote", en palabras del alcalde, Luis D¨ªaz Alperi, que incluso en estructura gener¨® no pocas cr¨ªticas y, en plena era franquista, un debate ciudadano entre los partidarios de bendecir la inauguraci¨®n del primer rascacielos y los que abogaban por dinamitarlo para despejar las alturas. El primer edil ha contactado ya con la familia Alonso, propietaria del inmueble, para negociar una operaci¨®n de compra-venta, a la que se har¨ªa frente mediante una f¨®rmula mixta de financiaci¨®n: dinero y terreno urbanizable hoy de titularidad p¨²blica. "La predisposici¨®n de los propietarios a seguir adelante con la operaci¨®n me consta", se?al¨® ayer D¨ªaz Alperi. Para que fructifique la compra ser¨ªa necesario, primero, que la familia Alonso rescatara el contrato de arrendamiento suscrito con Tryp Hoteles, que expira dentro de siete a?os, negociaci¨®n en la que mediar¨¢ el alcalde ante la direcci¨®n de la cadena. Una vez superado este problema y formalizada la compra, la mitad del edificio ser¨ªa desmantelado, hasta reducirlo a una altura similar a la de los inmuebles colindantes. "Ya hemos consultado con algunos expertos, y es perfectamente viable la demolici¨®n parcial de un edificio de esas caracter¨ªsticas", a?adi¨® el alcalde. La obra requerir¨¢ su tiempo, a raz¨®n de un mes por planta demolida. Es decir, un m¨ªnimo de 15 meses para que esa aberraci¨®n urban¨ªstica sea historia. El patriarca de la familia Alonso empez¨® a construir el Gran Sol tras conseguir licencia en 1957, cuando era alcalde de Alicante Agat¨¢ngelo Soler, t¨ªo del actual mandatario local. No ser¨ªa hasta 1970, sin embargo, cuando se inaugur¨® el hotel. Durante casi una d¨¦cada las obras estuvieron paralizadas, y el edificio se limit¨® a mostrar, desafiante, su esqueleto de hormig¨®n. Cuando el inmueble sea de titularidad p¨²blica, si la operaci¨®n fructifica, podr¨ªa retomar la actividad hotelera o remodelarse para acoger oficinas.