Ruiz de Eguino muestra en San Sebasti¨¢n sus reflexiones sobre el espacio

La trayectoria de I?aki Moreno Ruiz de Eguino (San Sebasti¨¢n, 1953) no casa con la monoton¨ªa. El artista, un te¨®rico de su profesi¨®n, ha compaginado a lo largo de su carrera el comisariado de exposiciones con el ejercicio de todo tipo de disciplinas art¨ªsticas. La galer¨ªa Digitex Arte de San Sebasti¨¢n muestra hasta el pr¨®ximo 25 de septiembre m¨¢s de medio centenar de obras, entre pinturas y esculturas, que dejan al descubierto las reflexiones sobre el espacio que han mantenido ocupado al artista desde hace casi un cuarto de siglo.

Ruiz de Eguino ha seguido una trayectoria variada que le ha llevado por distintos derroteros. En sus comienzos trabaj¨® una pintura expresionista abstracta, pero a partir de 1976 comenz¨® a investigar casi de forma obsesiva la representaci¨®n del espacio en la que, a grandes rasgos, a¨²n persiste. Al artista le cuesta datar sus obras, explicar en qu¨¦ esta trabajando: simultanea las series, eso s¨ª, siempre encaminadas a esa b¨²squeda arm¨®nica del espacio. "Soy creativo y me siento c¨®modo trabajando diferentes v¨ªas". La exposici¨®n que presenta Digitex (Usandizaga, 5) arranca con Suit Sevilla (1988), una serie que prepar¨® para una muestra en una galer¨ªa de la capital andaluza. Ruiz de Eguino representa el ambiente de las noches del sur a partir de formas curvas y esf¨¦ricas con colores puros que remiten a un discurso constructivista. ?l lo define "casi como el fauvismo de la geometr¨ªa; la geometr¨ªa m¨¢s aleatoria que es el puro color". Ruiz de Eguino es un artista polifac¨¦tico que se desenvuelve con comodidad en la labor te¨®rica, en el campo de la escultura, el grabado, la serigraf¨ªa o el mural. De hecho, en la misma sala presenta Di¨¢logo con la esfera, una serie que nace de un proyecto mural que realiz¨® para una exposici¨®n en Madrid. La idea radicaba en homenajear a El Lissitzky y al suprematismo ruso, pero ofreciendo una nueva perspectiva que logra con el aer¨®grafo. Parte de los trabajos est¨¢n realizados sobre madera, otros sobre lienzo. Todos hacen un gui?o a la pintura espacial. Lo mismo puede apreciarse en Mesa del Conocimiento, una escultura homenaje a Fray Bernardino -el primer traductor de la Biblia al azteca-, que sintetiza las ideas de cruz, mundo y la reflexi¨®n sobre el conocimiento. Ruiz de Egino, al que se conoce sobre todo por su trabajo como comisario de exposiciones, pinta sus pensamientos, sus sensaciones, y provoca una respuesta en el espectador. En la serie Intimidad callada, inspirada en Mondrian, asoman los silencios y el artista logra crear una sensaci¨®n de serenidad, como la que el hombre experimenta dentro de su casa. Lo hace a partir de l¨ªneas m¨¢s o menos gruesas y colores que van orden¨¢ndose conforme avanza la serie y que se asientan en la concepci¨®n arquitect¨®nica de las casas rurales. "El artista", dice, "es de los pocos seres que cree en la utop¨ªa. El mundo se mueve con la inercia de lo establecido, de las leyes. Sin embargo, el artista es el que las crea y con el tiempo la sociedad admite y aplica". Esta es la filosof¨ªa que aplica. La prueba est¨¢ en tambi¨¦n en Susurros, dos esculturas que teorizan sobre la penetrabilidad del espacio a trav¨¦s de la transparencia.