Prodi y la "ouija"

Al soplar las velas de su 60? cumplea?os, el presidente de la Comisi¨®n Europea, Romano Prodi, hizo la semana pasada una promesa solemne: no pensar en la pol¨ªtica italiana en los pr¨®ximos cinco a?os. Lo que no parece tan claro, sin embargo, es que la pol¨ªtica italiana deje de tenerle a ¨¦l presente. En la agenda del flamante presidente de la Comisi¨®n hay, de momento, una cita ineludible que le traer¨¢ en oto?o a Roma. Tendr¨¢ que prestar declaraci¨®n ante la comisi¨®n parlamentaria sobre terrorismo que investiga una pintoresca sesi¨®n de espiritismo en la que particip¨® Prodi hace nada menos que 21 a?os. La prensa italiana se hab¨ªa olvidado del episodio, que resucita ahora con un informe publicado en julio por el presidente de la citada comisi¨®n, Giovanni Pellegrino, al que Prodi ha confirmado que acudir¨¢ a la cita. No es la primera vez que el ex primer ministro declara sobre tan sorprendente sesi¨®n, a la que asistieron varios sesudos intelectuales de la Democracia Cristiana. El encuentro se produjo el 2 de abril de 1978, en la residencia de vacaciones del profesor de la Universidad de Bolonia Alberto Clo, cerca de Bolonia. En aquella jornada, los esp¨ªritus tuvieron a bien ofrecer una pista sobre el paradero del l¨ªder de la DC, Aldo Moro, secuestrado por las Brigadas Rojas. A preguntas de Prodi y sus amigos, el platillo que hac¨ªa las veces de ouija dio varias respuestas: Viterbo, Bolsena y Gradoli. Una vez comprobado que Gradoli era una localidad cercana a Viterbo (en el Lazio), Prodi, convencido de la clarividencia de los esp¨ªritus, transmiti¨® el dato al cuartel general de la DC en Roma. La localidad de Gradoli fue peinada cuatro d¨ªas despu¨¦s por una patrulla de 22 carabineros, sin ning¨²n ¨¦xito. Lo tremendo del caso es que a nadie se le ocurri¨® que el nombre pudiera corresponder a una calle de Roma, pese a que el 18 de marzo -es decir, dos d¨ªas despu¨¦s del secuestro de Moro- la polic¨ªa hab¨ªa registrado de arriba abajo el n¨²mero 96 de Via Gradoli, con la ¨²nica y fatal excepci¨®n del apartamento n¨²mero 11, donde viv¨ªa el l¨ªder de las BR Mario Moretti. El hallazgo de este piso franco no se produjo hasta el 18 de abril. Para entonces, la casa estaba ya vac¨ªa y la suerte de Moro estaba echada. Su cad¨¢ver ser¨ªa localizado por la polic¨ªa el 9 de mayo.Con la perspectiva que dan los a?os, Pellegrino y otros senadores creen que Prodi pueda dar una versi¨®n m¨¢s convincente sobre su cita con los esp¨ªritus. Para el senador, aquel relato es incre¨ªble. Se trat¨® de una invenci¨®n para proteger la verdadera fuente de la informaci¨®n.