Las tres "tes" vuelven a reinar
VIENE DE LA P?GINA 1 La que hasta ayer era la ciudad del Guggenheim se ha convertido desde ahora tambi¨¦n y durante nueve d¨ªas en el reino de las tres tes: txosnas, toros y teatro. I?aki Azkuna no dej¨® ayer pasar la ocasi¨®n para reivindicar a diestro y siniestro un esfuerzo colectivo que desemboquen en unas fiestas "en paz y libertad". Azkuna, como el a?o pasado su predecesor, Josu Ortuondo, no acudi¨® al txupinazo, con lo que se perdi¨® el preg¨®n en directo, unos bertsos cantados en euskera por el bilba¨ªno Irkus Robles, quien aprovech¨® para reclamar el traslado de "los presos" a "sus casas". Fuentes municipales indicaron que el alcalde no ten¨ªa intenci¨®n de ir al acto, sin relaci¨®n con la pol¨¦mica por la txupinera. Como Garbayo est¨¢ encarcelada, la coordinadora de comparsas ha decidido que cada d¨ªa sea una mujer diferente quien ejerza su papel. El Ayuntamiento reconoce s¨®lo a la primera de las elegidas, una joven que ayer no apareci¨® por ningun lado. Los que s¨ª estuvieron en el Ayuntamiento fueron autoridades y comparseros. Cada uno en su turno. EH no acudi¨® a la recepci¨®n de autoridades. S¨ª estuvieron el lehendakari, Juan Jos¨¦ Ibarretxe; y el alcalde de San Sebasti¨¢n, Od¨®n Elorza. El de Vitoria, Alfonso Alonso, se halla de vacaciones. Mientras, en la recepci¨®n a las comparsas, falt¨® el PP. Azkuna calent¨® motores para las fiestas ya anteayer. Estuvo en el estreno del musical Chicago en el Teatro Arriaga, informa Eva Larrauri. Su agenda a partir de ah¨ª est¨¢ llena de compromisos, aunque presume de reservar la ma?ana para cumplir con las obligaciones del despacho. Su consigna a concejales y directores de ¨¢rea ha sido un "firmes en sus puestos" durante las fiestas para poder resolver cualquier problema que se presente. El primer edil se autodefine como incapaz de resistir sin bostezar m¨¢s all¨¢ del l¨ªmite de los fuegos artificiales, as¨ª que ser¨¢ dif¨ªcil verle disfrutar del ambiente nocturno. A¨²n as¨ª, sus jornadas ser¨¢n tan aceleradas como cuando era un mero candidato en campa?a electoral. Ahora, con el pa?uelo azul al cuello, tiene previsto asistir a los toros, al f¨²tbol y al aurresku ante la virgen de Bego?a, entre otras citas cerradas con antelaci¨®n. Su cargo le obliga a cumplir con la tradicional invitaci¨®n a almorzar al Gobierno vasco y la Diputaci¨®n de Vizcaya en Vista Alegre, pero Azkuna ha decidido renovar los compromisos institucionales organizando una comida con el Consejo de Administraci¨®n de Bilbao R¨ªa 2000, en reconocimiento al papel que la sociedad juega en el futuro de la ciudad. Otra comida est¨¢ reservada para agasajar a su ex jefe, Jos¨¦ Antonio Ardanza, a quien sigue llamando lehendakari "por amistad y respeto". No se cansa de repetir que las fiestas deben tener clase, "porque Bilbao siempre la ha tenido", y buen comportamiento con los de fuera y con los inmuebles de dentro, "que cuestan mucho dinero". Pronostica que acabar¨¢ agosto "roto". Se ha reservado un par de semanas de vacaciones en septiembre, "con tel¨¦fono m¨®vil, pero sin decir el destino".
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