Defender con tres o con cuatro

Desde la abundancia, el Bar?a ha abierto un debate en vigilias del arranque liguero. Consensuada la alineaci¨®n incondicional de tres delanteros, la duda est¨¢ en cuantos jugadores conviene poner detr¨¢s de la pelota. Van Gaal hab¨ªa trabajado con un 4-3-3 (o 2-3-2-3). Pero la disputa de la Supercopa, y la necesitad de encontrar un ant¨ªdoto para el Piojo, provoc¨® una cierta novedad como es la de jugar con tres defensas: dos marcadores para los dos puntas contrarios y un libre, dispositivo que permit¨ªa ganar un centrocampista y plantarse en la cancha con un 3-4-3, el dibujo del Ajax, referencia del Bar?a.Puestos a simplificar, el asunto es: Juega Abelardo (o D¨¦hu) o Litmanen (o Luis Enrique o Cocu).Al efecto de llegar a la confrontaci¨®n con el Valencia con el sistema rodado, Van Gaal practic¨® con el 3-4-3 en los partidos contra el Herta Berl¨ªn y Boca Juniors, y en ambos el resultado fue negativo, anticipo de la p¨¦rdida de la Supercopa. El marcador contrast¨® con los registros de los otros cinco encuentros de pretemporada, en los que el Bar?a marc¨® 34 goles y encaj¨® 3, actuando con el 4-3-3.

Van Gaal entiende que el equipo se encuentra m¨¢s c¨®modo con el dispositivo automatizado por los jugadores y solvente por las dos Ligas que ha dado. La apuesta ser¨ªa: Hesp; Reiziger, Abelardo, Frank de Boer, Sergi; Guardiola; Luis Enrique o Litmanen, Cocu o Litmanen; Figo, Kluivert y Rivaldo. El dibujo, sin embargo, mereci¨® la reprobaci¨®n de la cr¨ªtica, entregada a Rivaldo, un media punta que juega de 11, e implacablecon el juego del Barcelona.

El fichaje de Litmanen,un pivote y no un volante, jugador opuesto a Luis Enrique y Cocu, pareci¨® el anuncio de que Van Gaal pod¨ªa plantearse cambios en la pizarra para este curso, y disponer un 3-4-3. Las pruebas han agrandado el debate desde el 3-3 con el Valencia. El Bar?a estuvo tan generoso en ataque como en defensa. A cambio de aumentar la intervenci¨®n de la delantera y del pivote, los dos volantes perdieron llegada y gol, y los defensas quedaron retratados en cada p¨¦rdida de pelota, contraataque o falta de atenci¨®n. Hesp pareci¨® m¨¢s vulnerable que nunca, Frank de Boer era superable y los dos volantes, antes goleadores, se vieron relegados a carrileros sin llegada y con problemas para tapar las bandas.

Pero el plantemaniento tambi¨¦n tiene defensores, futbolistas que recuerdan la etapa de Cruyff, que entienden que no todos los equipos juegan como el Valencia y coinciden en que defensivamente es m¨¢s solvente que el 4-3-3 (o 2-3-2-3) cuando se trata de tapar a dos delanteros r¨¢pidos puesto que Van Gaal act¨²a sin libre. Son los que apuestan por Hesp; Reiziger, Frank de Boer, Sergi; Luis Enrique, Guardiola, Litmanen, Cocu; Figo, Kluivert y Rivaldo.

A Van Gaal le toca encontrar el equilibrio: o decide a qu¨¦ juega de acuerdo a lo que tiene o hace jugar a lo que tiene seg¨²n lo que quiere.