Los restos de la RDA y de Europa del Este a¨²n son los m¨¢s fuertes

Alemania, junto a Estados Unidos y Espa?a, ser¨¢n los tres pa¨ªses con mayor n¨²mero de participantes en los Mundiales. Y si los norteamericanos esperan sacar mayor partido, seg¨²n su costumbre, a las pruebas de agilidad y rapidez, los germanos seguir¨¢n apostando por las de potencia y fuerza.Dos ejemplos emblem¨¢ticos ser¨¢n los de los lanzadores de disco, Lars Riedel y J¨¹rgen Schult, y la de peso Astrid Kumbernuss. Riedel intentar¨¢ ganar su quinto t¨ªtulo mundial consecutivo y Kumbernuss el tercero, despu¨¦s de una larga ausencia de 20 meses de baja por maternidad (casi inmediatamente despu¨¦s de la anterior edici¨®n de Atenas 97). Schult, sin embargo, parece en mejor forma ?13 a?os! despu¨¦s de su r¨¦cord mundial de 74,08 metros en Neubrandenburg, cuando a¨²n la RDA estaba en pleno apogeo. Pasar de los 70 metros ahora es ya una haza?a. Los m¨¦todos de entonces permitieron hacerlo, con todo tipo de sorpechas inclu¨ªdas. Por muy t¨¦cnicos que fueran, no parece de recibo que s¨®lo fueran sistemas de entrenamiento naturales los empleados para imponer r¨¦cords a los que ni siquiera sus autores se han podido volver a acercar cuando se han aireado tambi¨¦n las cloacas del dopaje. Conviene recordar que a¨²n quedan vigentes, y con las mejores atletas actuales quedando a varios segundos y metros, los r¨¦cords de Marita Koch (400), Jarmila Kratochvilova (800), Gabriele Reinsch (disco) o Petra Felke (jabalina), e incluso el del sovi¨¦tico Yuri Sedhyk (martillo). Aunque para verg¨¹enza tambi¨¦n sigue el m¨¢s moderno de Randy Barnes (peso), el estadounidense al que se pill¨® despu¨¦s en un control por sorpresa y, al menos, no us¨® la coartada que no le ha servido al velocista Dennis Mitchell, de que hab¨ªa hecho varias veces el amor y que se hab¨ªa tomado unas cervezas. Con ello sube la testosterona, pero tambi¨¦n la epitestosterona. Y a ellos s¨®lo les subi¨® la primera...y los m¨²sculos.

El checo Jan Zelezny, que ha vuelto en jabalina a su nivel de plusmarquista mundial tras una operaci¨®n de hombro, ser¨¢ la variante de los alemanes, que tambi¨¦n amenazan con ganar el martillo, gracias a Kobs (en el deb¨² de las mujeres la reina es la rumana Melinte, de ilustre apellido), y el peso, con Buder, si da su permiso el estadounidense Godina