Pinochet recibe hoy a sus abogados espa?oles para decidir su estrategia

El general Augusto Pinochet recibir¨¢ hoy en su residencia de Surrey a sus abogados espa?oles Fernando Escard¨® y Jos¨¦ Mar¨ªa Stampa, en el proceso de ajustar su estrategia frente al juicio de extradici¨®n que le aguarda en un tribunal penal de la capital brit¨¢nica el 27 de septiembre. Escard¨® y Stampa llegaron anoche al aeropuerto de Heathrow y fueron recibidos por el general Juan Carlos Salgado. La reuni¨®n, acordada el 12 de agosto pasado en un encuentro de los dos letrados con Salgado en la sede de la Agregadur¨ªa Militar de Chile en Madrid, se celebrar¨¢ hoy por la ma?ana.

El general Salgado, seg¨²n dijeron ayer fuentes pr¨®ximas a los letrados espa?oles, propuso a Escard¨® y a Stampa el 12 de agosto una reuni¨®n con Pinochet a celebrar en lo posible antes del mi¨¦rcoles 20, d¨ªa en que Salgado tiene previsto regresar a Santiago de Chile. Se acord¨® entonces la fecha del 19. La idea es que Pinochet conozca a los dos abogados encargados de llevar el cuestionamiento de la jurisdicci¨®n espa?ola en el caso que instruye el juez Baltasar Garz¨®n.Tanto Escard¨® como Stampa (que interrumpieron sus vacaciones en Biarritz para viajar a Londres) estiman que Espa?a es, de lejos, el terreno donde debe darse la batalla para anular la solicitud de extradici¨®n de Pinochet solicitada, a petici¨®n de Garz¨®n, el pasado noviembre por el Gobierno espa?ol. Seg¨²n Escard¨®, "la resoluci¨®n de la C¨¢mara de los Lores del 24 de marzo, al recortar el caso y dejarlo sin v¨ªctimas espa?olas, supone un golpe contra la pretendida jurisdicci¨®n espa?ola". Seg¨²n fuentes pr¨®ximas a la acusaci¨®n en el caso Pinochet, la inexistencia de v¨ªctimas espa?olas entre los casi 60 casos de tortura posteriores al 8 de diciembre de 1988, fecha a partir de la cual se puede acusar a Pinochet, no elimina la obligaci¨®n de Espa?a de juzgar al ex dictador, asumida al firmar la Convenci¨®n contra la Tortura de Naciones Unidas. "De la misma manera que el Reino Unido reconoce su obligaci¨®n internacional de cooperar en la persecuci¨®n de la tortura, Espa?a tambi¨¦n debe seguir adelante en su persecuci¨®n", dijo un acusador.

Con todo, la reuni¨®n de los letrados espa?oles con Pinochet, en la que participar¨¢ el general Salgado, ser¨¢ uno de los elementos a tener en cuenta para definir la estrategia cara al juicio de extradici¨®n que tendr¨¢ lugar en Londres el 27 de septiembre. Stampa calific¨® a su llegada a Londres la situaci¨®n de "puramente visceral" y "poco correcta desde el punto de vista jur¨ªdico-procesal espa?ol", informa Efe. El penalista se?al¨® que ¨¦l intentar¨¢ "desmontar" las irregularidades procesales, tanto m¨¢s graves cuanto que el afectado est¨¢ privado de libertad, como "el no pedir audiencia al Ministerio Fiscal para iniciar el proceso, el no hacer caso de los distintos escritos del Ministerio P¨²blico espa?ol y demorar indebidamente la resoluci¨®n de la apelaci¨®n", .

La familia de Pinochet sigue insistiendo estos d¨ªas en el empeoramiento del estado de salud del general. No obstante, tanto el Ej¨¦rcito chileno como alguno de sus abogados se?alan que Pinochet no ha sufrido deterioro f¨ªsico de gran magnitud en los 10 meses que ya lleva bajo custodia policial. Un informe de Scotland Yard ya ha establecido que a pesar de su edad (Pinochet cumplir¨¢ 85 a?os el 25 de noviembre), el ex dictador goza de un buen estado de salud.

El tema de fondo es: si el juicio de extradici¨®n da como resultado que Pinochet debe ser enviado a Espa?a, ?hay que apelar o no? Las razones para una apelaci¨®n son obvias: ganar tiempo con la esperanza de que un tribunal superior brit¨¢nico pueda anular la eventual decisi¨®n del magistrado que decidir¨¢ sobre la extradici¨®n. El problema es que en ese caso todos los procedimientos se pueden prolongar durante dos a?os y medio. Y aqu¨ª entra a jugar el factor de la edad y la salud de Pinochet.

En caso de no ser apelada la decisi¨®n del magistrado a cargo de la extradici¨®n, Graham Parkinson, volver¨ªa a la mesa de trabajo del ministro de Interior, Jack Straw, quien debe finalmente tomar la decisi¨®n pol¨ªtica. Y aqu¨ª la defensa de Pinochet baraja la carta de las razones humanitarias. Porque en esta fase de la decisi¨®n s¨ª cabe, te¨®ricamente, la decisi¨®n de rechazar la extradici¨®n de Pinochet a Espa?a y enviarle a Chile por "razones humanitarias". Si esto fallase y Straw resolviese la entrega de Pinochet a Espa?a, se abrir¨ªan dos alternativas: presentar un recurso de revisi¨®n judicial de la decisi¨®n del ministro ante el Alto Tribunal de Justicia, o no recurrir y aceptar el traslado a Espa?a.