Emigraciones

Fue foto de portada de su diario el pasado viernes 13 de agosto. Como muy bien recordar¨¢, era la imagen de un bote inflable con siete africanos a bordo, apretujados, abrazados los unos a los otros, con expresiones de terror en sus rostros ante una zozobra que parec¨ªa inminente. Fueron avistados y rescatados a tiempo por agentes de la Guardia Civil frente a la costa de Ceuta, y tras ser cacheados, devueltos sin demora ni miramientos a Marruecos. Cinco proced¨ªan de Nigeria, y los otros dos, de Costa de Marfil. Su arriesgada apuesta por salir de la miseria hab¨ªa fracasado, pero al menos han tenido la suerte de no perecer en el intento. Y esto suced¨ªa mientras buena parte de la poblaci¨®n espa?ola se encuentra disfrutando de sus merecidas vacaciones. Quiz¨¢ por ello la noticia habr¨¢ pasado desapercibida. O tal vez es que casos como ¨¦ste se producen casi a diario y ya no son noticia. Pero cabr¨ªa preguntarse por qu¨¦ un pueblo como el nuestro, que no hace muchos a?os era generador de emigraci¨®n, ha vuelto la espalda tan r¨¢pidamente a los que ahora sufren las mismas necesidades.Esos hombres y mujeres, ni?os y ni?as del Magreb o del ?frica subsahariana, que arriesgan sus vidas para tratar de alcanzar las costas europeas en busca de una supuesta prosperidad, ?no son tan dignos como los albanokosovares de nuestra solidaridad?, ?o es que son menos refugiados que ¨¦stos? No huyen de Milosevic, pero s¨ª de una miseria end¨¦mica, de una injusticia estructural de la que nosotros tenemos no poca responsabilidad. Por eso es un acto de vergonzosa insensibilidad que la ¨²nica soluci¨®n que se les ocurra a nuestros dirigentes para atajar el problema de la inmigraci¨®n sea gastarse verdaderas fortunas en levantar muros cada vez m¨¢s altos, m¨¢s sofisticados y m¨¢s infranqueables, para impedir su paso.

No olvidemos que, a lo largo de la historia, todos los pueblos han emigrado buscando mejores tierras. ?Por qu¨¦ unas emigraciones han de ser consideradas buenas y ¨¦picas, y otras, nocivas y punibles?-