La venta fallida de misiles S-300

El primer esc¨¢ndalo conocido relacionado con Felipe data de 1989, cuando hubo un intento de acusarlo de haber malversado 400.000 d¨®lares (unos 60 millones de pesetas) durante una venta de ordenadores. Otro esc¨¢ndalo m¨¢s serio ocurri¨®, seg¨²n N¨®viye Izvestia, en Mari El, rep¨²blica rusa del Volga conocida por su industria militar. All¨ª trat¨® de organizar la venta de misiles S-300. Sus primeros contactos con Ioshkar Ol¨¢, la capital de esa rep¨²blica de la Federaci¨®n Rusa, datan de 1997, cuando la visit¨® como miembro de una delegaci¨®n de empresarios suizos, israel¨ªes y rusos. Por supuesto, los empresarios visitaron la F¨¢brica de Construcci¨®n de Maquinaria de Ioshkar Ol¨¢, donde producen los famosos misiles y Felipe logr¨® hacer amistad con el presidente de Mari El, Viacheslav Kislitsin.Felipe es una persona encantadora, seg¨²n aseguran quienes le conocen. Culto, domina cinco idiomas, elegante y, por supuesto, guapo. Las mujeres lo hallan irresistible y consideran que tiene cierto parecido con Antonio Banderas. Felipe sabe c¨®mo hacer amistades, pero la que tuvo con Kislitsin fue ef¨ªmera y no logr¨® nada. Por eso, dicen las malas lenguas, Felipe, que adem¨¢s es vengativo, divulg¨® rumores en Occidente de que Mari El se prepararaba para vender clandestinamente a pa¨ªses del Tercer Mundo los S-300, y como prueba envi¨® copias de cartas que presuntamente estaban relacionadas con ese negocio. Como resultado, no s¨®lo Kislitsin tuvo fuertes dolores de cabeza, sino tambi¨¦n el Kremlin, ya que esta informaci¨®n fue usada incluso en algunos discursos por Madeleine Albright, la secretaria de Estado norteamericana.