La cruzada colombiana del general McCaffrey

Estados Unidos no puede permanecer impasible ante el crecimiento de la producci¨®n de drogas en Colombia, el recrudecimiento del enfrentamiento entre las fuerzas gubernamentales y las guerrillas y la posibilidad de que la crisis se extienda a Brasil, Venezuela, Per¨², Ecuador y Panam¨¢. ?ste es el mensaje que machaca en las ¨²ltimas semanas, tanto en Washington como en las capitales latinoamericanas, el general Barry McCaffrey, principal responsable estadounidense de la lucha contra el narcotr¨¢fico. Su insistencia est¨¢ consiguiendo crear un clima intervencionista en EEUU."La situaci¨®n en Colombia se est¨¢ empeorando a marchas forzadas", dijo McCaffrey en Lima el viernes. El veterano de Vietnam e Irak insisti¨® en que Colombia ha incrementado de "modo explosivo" su producci¨®n de coca¨ªna en los dos ¨²ltimos a?os y a?adi¨® que el viejo pulso entre Bogot¨¢ y las guerrillas se est¨¢ exacerbando de un modo que pone en peligro la seguridad de los cinco pa¨ªses vecinos.

D¨ªas antes, el director de la Oficina de Pol¨ªtica Nacional de Control de Drogas de la Casa Blanca hab¨ªa declarado en Brasilia: "EE UU debe estar preparado para aportar a Colombia m¨¢s dinero, equipos, entrenamiento, informaci¨®n y apoyo pol¨ªtico". Y a mediados de mes, McCaffrey hab¨ªa sentenciado en Houston (Tejas): "El problema de Colombia tiene una dimensi¨®n regional y requiere la implicaci¨®n pol¨ªtica de todo el hemisferio". Tal es el vigor con el que el llamado zar antidrogas est¨¢ tocando la alarma, que EEUU se ha visto obligado a decir oficialmente que no planea una intervenci¨®n militar en Colombia. Ayer fue el propio general, que cerr¨® en Argentina su gira por cinco pa¨ªses latinomaericanos, quien volvi¨® a negar ese supuesto. "Algo que no debe decirse lo voy a decir de todas maneras. Hay cero conversaci¨®n sobre una intervenci¨®n de EE UU en Colombia y hay cero conversaci¨®n sobre una intervenci¨®n reguonal", afirm¨®.

Por si acaso, Fidel Castro ya ha advertido que una acci¨®n semejante ser¨ªa "un error colosal". McCaffrey est¨¢ haciendo campa?a para que la cumbre sobre el narcotr¨¢fico de pa¨ªses americanos de noviembre apruebe una pol¨ªtica de apoyo al presidente Andr¨¦s Pastrana en su lucha contra los productores de coca¨ªna y hero¨ªna y las guerrillas, presuntamente financiadas por el narcotr¨¢fico. Entretanto, el general propone que EE UU suba su ayuda a la lucha colombiana contra las drogas a 1.000 millones de d¨®lares anuales desde los 289 millones actuales, que ya suponen su tercera aportaci¨®n a un pa¨ªs extranjero, tras Israel y Egipto. McCaffrey tambi¨¦n recomienda que la superpotencia ensaye en el pa¨ªs andino unos "microherbicidas" que destruyen las cosechas de drogas manteniendo las de productos legales.

Coordinador nacional de la lucha contra los estupefacientes desde 1996, McCaffrey est¨¢ aportando a su cruzada colombiana una disciplina y vigor t¨ªpicamente militares. Es un general reiteradamente condecorado con la Medalla Coraz¨®n P¨²rpura por las heridas sufridas en combate en los cuatro conflictos armados en los que ha participado: Rep¨²blica Dominica, dos veces en Vietnam y la Operaci¨®n Tempestad del Desierto.

El zar antidrogas ha conseguido que Clinton sit¨²e a Colombia en el primer plano de su agenda internacional. Este mes ha celebrado, por primera vez, una reuni¨®n de su equipo de seguridad nacional enteramente consagrada al pa¨ªs andino. A Sandy Berger, el consejero nacional de Seguridad de m¨¢s peso en la Casa Blanca desde Henry Kissinger, y Thomas Pickering, subsecretario de Estado, les encarg¨® dise?ar, junto al general, una ambiciosa pol¨ªtica colombiana. Pickering se entrevist¨® con Pastrana en Bogot¨¢ el pasado d¨ªa 10, en la primera visita de un alto diplom¨¢tico de EE UU a esa ciudad en esta d¨¦cada, y calific¨® de "enloquecidas" las especulaciones de la prensa colombiana sobre una intervenci¨®n militar estadounidense. Tambi¨¦n neg¨® que Washington planee crear una fuerza multinacional para combatir a los narcotraficantes y guerrilleros colombianos.