El Partido Popular se ofrece como baluarte ante el nacionalismo y la "izquierda radical"

El Partido Popular (PP) abri¨® ayer su precampa?a en Catalu?a con una convenci¨®n clausurada por el secretario general del partido, Javier Arenas, quien present¨® al PP como baluarte frente al nacionalismo de Converg¨¨ncia i Uni¨® (CiU) y la "izquierda radical" que a su juicio representa el candidato socialista, Pasqual Maragall. El acto, que reuni¨® a 350 militantes en el Marem¨¤gnum de Barcelona, dej¨® trazadas las l¨ªneas b¨¢sicas que guiar¨¢n la campa?a de los conservadores y otorg¨® un discreto papel a su candidato, Alberto Fern¨¢ndez D¨ªaz.

El PP se ha propuesto el objetivo de romper la previsible bipolarizaci¨®n entre socialistas y nacionalistas en las elecciones auton¨®micas del 17 de octubre con un discurso basado en la acci¨®n de gobierno de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar y en se?alar los presuntos peligros que a su juicio suponen el nacionalismo y la izquierda radical. Pero los comicios no llegan en un buen momento para el PP de Catalu?a, que en las ¨²ltimas elecciones municipales sufri¨® un inesperado retroceso que abri¨® una crisis sobre su liderazgo: sectores significativos del partido consideran que su direcci¨®n es s¨®lo provisional y que, tras los comicios, ser¨¢ el ministro portavoz, Josep Piqu¨¦, quien tomar¨¢ las riendas de la formaci¨®n, ya sea directamente o a trav¨¦s de personas de su confianza. En el acto de ayer, al que no asisti¨® el ex presidente regional Aleix Vidal-Quadras ni ninguno de sus colaboradores en Catalu?a, Piqu¨¦ pronunci¨® un discurso que dur¨® casi el doble que la intervenci¨®n del candidato a la presidencia de la Generalitat. En su alocuci¨®n, de cerca de 40 minutos, el ministro adopt¨® un tono acad¨¦mico y aport¨® un torrente de datos que en su opini¨®n demuestran que el PP ha conseguido corregir en s¨®lo tres a?os la mayor¨ªa de d¨¦ficits estructurales que Espa?a arrastraba desde el siglo XIX. No obstante, el ministro combin¨® su exposici¨®n con dur¨ªsimos reproches hacia los dirigentes socialistas, a los que se refiri¨® continuamente como "mentirosos" y fue tambi¨¦n muy duro con Pujol, a quien acus¨® de comprar votos con su reciente medida de ofrecer una paga extra a los pensionistas. En el ensayo de ayer -que traz¨® el esquema para toda la campa?a-, el ministro se centr¨® en explicar la acci¨®n de gobierno y sus beneficios para Catalu?a. En cambio, Alberto Fern¨¢ndez enarbol¨® en apenas 20 minutos la bandera de la "Catalu?a plural" e hizo una apasionada defensa de la funci¨®n de baluarte del PP ante el nacionalismo y el socialismo. La convenci¨®n la cerr¨® Arenas, quien emplaz¨® al l¨ªder socialista, Joaqu¨ªn Almunia, a definirse sobre la pol¨ªtica de alianzas que los socialistas seguir¨¢n en Catalu?a tras los comicios. "?Est¨¢ de acuerdo en que Maragall pueda gobernar con el apoyo de los independentistas?", pregunt¨® en referencia a una eventual colaboraci¨®n futura entre el PSC y Esquerra Republicana (ERC). El l¨ªder conservador no ahorr¨® tampoco las cr¨ªticas a la alianza que el PSC ha suscrito con los ecosocialistas de Iniciativa per Catalunya-Verds (IC-V) para coligarse en las circunscripciones de Tarragona, Lleida y Girona. A su juicio, la coalici¨®n demuestra que la opci¨®n de Maragall es de "izquierda radical" y record¨® el "origen marxista" de ambos partidos.