Juaristi analiza en un libro los ¨²ltimos a?os del nacionalismo vasco
'Sacra N¨¦mesis' repasa la evoluci¨®n pol¨ªtica y cultural a trav¨¦s de sus protagonistas
El nacionalismo vasco se ha despojado de toda ideolog¨ªa y se ha reducido a su forma m¨¢s pura: el nacionalismo ¨¦tnico, que no deja espacio para la integraci¨®n. Los protagonistas y los procesos de esta evoluci¨®n, ocurrida en los ¨²ltimos 30 a?os, son los pilares de Sacra N¨¦mesis, el ¨²ltimo libro de Jon Juaristi (Bilbao, 1951), en el que combina varios g¨¦neros como la cr¨®nica, la cr¨ªtica y el memorialismo. Sin embargo, culturalmente el Pa¨ªs Vasco no se distingue del resto del mundo. "Se ha optado por la funci¨®n de la cultura como atracci¨®n tur¨ªstica; como ejemplo, el Guggenheim", se?al¨® Juaristi.
Sacra N¨¦mesis (Espasa), subtitulado "Nuevas historias de nacionalistas vascos", no es exactamente la continuaci¨®n de su anterior libro, El bucle melanc¨®lico (Espasa), del que se han vendido m¨¢s de 100.000 ejemplares y fue premio Nacional de Ensayo 1998, seg¨²n explic¨® ayer Juaristi, en la presentaci¨®n del libro en Madrid. "Esta vez me interesaba reflejar las gentes del mundo nacionalista, con nombres y apellidos, responsables de la reconstrucci¨®n del movimiento abertzale entre 1968 y el Acuerdo de Estella. El Pa¨ªs Vasco es un pa¨ªs de irresponsables que no se hacen cargo de las chapuzas y eso es lo que he querido contar", afirm¨® Juaristi.Para el autor, el nacionalismo ¨¦tnico de fin de siglo se explica por el descr¨¦dito de las ideolog¨ªas y la eclosi¨®n de los nacionalismos en Europa oriental, tras la ca¨ªda de los comunismos. "El fin ¨²ltimo de este nacionalismo, que no es revolucionario, es la construcci¨®n de la naci¨®n ¨¦tnica. En el caso vasco, este nacionalismo se opone a la democratizaci¨®n pol¨ªtica de la sociedad espa?ola y seduce por igual a todos los partidos abertzales. Los nacionalismos son religiones sustitutivas que tienen gran fuerza de arrastre, cosa que no tiene la democracia, que es m¨¢s light", explic¨® el catedr¨¢tico de Filolog¨ªa Espa?ola en la Universidad del Pa¨ªs Vasco. En este contexto, la tregua no es m¨¢s que un episodio m¨¢s de la presi¨®n de lo que ETA denomina la "lucha armada", que implica una ruptura por sorpresa, opin¨® Juaristi. "De momento no han dicho nada de la entrega de las armas".
Respecto a la influencia de la Iglesia en el proceso actual, el escritor y ensayista -que se define como "un cronista de la historia del Pa¨ªs Vasco"- cree que la sociedad vasca es hoy m¨¢s secular. "La Iglesia vasca est¨¢ en retroceso y descartar¨ªa la visi¨®n de una sociedad beata. Lo que ha hecho es sustituir el catolicismo por el nacionalismo".
Presi¨®n social
Sin embargo, Juaristi lamenta que, ante la presi¨®n pol¨ªtica nacionalista (que incluye tambi¨¦n la ling¨¹¨ªstica, "aunque es el ciudadano quien elige la lengua que quiere"), la sociedad se encuentre bajo el s¨ªndrome de sumisi¨®n voluntaria. "En principio nadie tiene derecho a exigir hero¨ªsmo de los ciudadanos. El final ser¨¢ gris y como no somos kosovares y no echan a nadie, la sociedad en general se resignar¨¢ a cambio de cierta tranquilidad en lo cotidiano".
Respecto a la evoluci¨®n cultural, el escritor considera que el Pa¨ªs Vasco est¨¢ inmerso "en la cultura mediocre de fin de siglo". "La cultura en castellano es tan saludable o mediocre como en euskera. Y sobre el futuro de la cultura coincido con F¨¦lix de Az¨²a: los jubilados son nuestra ¨²nica esperanza. Creo que los nuevos p¨²blicos son deficitarios en cuanto a la tradici¨®n cultural y hay un exceso de optimismo". Las posibilidades de que el Pa¨ªs Vasco se convierta en un parque tem¨¢tico de s¨ª mismo son muy altas, a juicio del autor. "Con museos como el Guggenheim, de nuevos ricos, se ha optado por la funci¨®n de la cultura como atracci¨®n tur¨ªstica, y en lugar de construir nuestros propios museos y fondos se los compramos a los americanos. Es producto de la globalizaci¨®n".
Juaristi, a menudo criticado y denostado por sus teor¨ªas, no se considera un provocador. "Tengo argumentos para todo lo que digo", concluye.
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