El maleficio de Daewoo
El brillo de la instalaci¨®n de la multinacional surcoreana en el Pa¨ªs Vasco se ha apagado en tres a?os
Marzo de 1996. El entonces consejero de Industria del Gobierno vasco, Javier Retegui, hace oficial la decisi¨®n de la multinacional surcoreana Daewoo de instalar una f¨¢brica de frigor¨ªficos en Vitoria. Es la primera vez que Daewoo da el salto desde Corea para producir en Europa. El Ejecutivo de Vitoria no cabe en s¨ª de gozo. Ha tenido que competir muy duramente para atraer esta inversi¨®n, que rompe la imagen de una Euskadi poco atractiva por el problema del terrorismo.Tres a?os y cuatro meses despu¨¦s, el brillo de esa inversi¨®n estelar se ha apagado. La empresa ha ralentizado las inversiones previstas y, v¨ªctima de una profunda crisis, ha vendido la planta a un consorcio estadounidense; los trabajadores est¨¢n en huelga desde el 19 de julio en demanda de mejoras salariales y las instituciones, que en su momento apoyaron de manera entusiasta la implantaci¨®n de la multinacional, lanzan constantes recados a la empresa para que mejore la calidad del empleo. Sus directivos tienen la impresi¨®n de haber pasado en poco tiempo de h¨¦roes a villanos.
Daewoo aterriz¨® con la intenci¨®n de invertir casi 12.000 millones de pesetas en dos fases hasta el a?o 2002. Hasta ahora ha desembolsado en torno a los 6.000 en la puesta en marcha en enero de 1998 de su planta de frigor¨ªficos. Da trabajo a 170 personas y la intenci¨®n es contar con 400 operarios cuando alcance su nivel m¨¢ximo de producci¨®n. Para su implantaci¨®n cont¨® con fuertes subvenciones directas e indirectas del Gobierno vasco y la Diputaci¨®n de ?lava, aunque la direcci¨®n asegura que las razones para instalarse en Vitoria fueron de ¨ªndole geogr¨¢fica y estrat¨¦gica. No obstante, la Comisi¨®n Europea no pens¨® lo mismo y el pasado mes de febrero declar¨® ilegales gran parte de las ayudas recibidas, tras una denuncia de los fabricantes electrodom¨¦sticos espa?oles. Concretamente, parte de los 3.000 millones concedidos por el Gobierno y la totalidad de los incentivos fiscales -la posibilidad de recuperar el 45% de la inversi¨®n v¨ªa impuestos e importantes exenciones en el Impuesto de Sociedades- otorgados por ?lava.
Desde el varapalo de la Comisi¨®n Europea, que adem¨¢s situ¨® el Concierto Econ¨®mico vasco en el punto de mira de Bruselas, todo ha ido de mal en peor para Daewoo. La crisis asi¨¢tica golpe¨® con especial fuerza a la multinacional coreana, que ha tenido que vender parte de sus divisiones para evitar la quiebra. En julio traspas¨® su ¨¢rea de electr¨®nica de Vitoria al consorcio de inversiones Walid Alomar, que en principio asegura su continuidad.
Y casi acto seguido la joven plantilla de Vitoria se declar¨® en huelga contra unos sueldos que califican de "coreanos", con el respaldo de los sindicatos. El comit¨¦ exige la equiparaci¨®n salarial en dos a?os con el sector del metal - 2,5 millones netos al a?o, un 35% de aumento-. Mientras, los directivos de la empresa maniobran a la defensiva y recuerdan con nostalgia los halagos y parabienes oficiales que recibieron a su llegada.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.