El d¨¦ficit de I+D frena a la empresa valenciana, seg¨²n un estudio

"La econom¨ªa valenciana importa mucha tecnolog¨ªa, crea poca y casi no exporta nada. El d¨¦ficit tecnol¨®gico resultante es uno de los principales talones de Aquiles de nuestro sistema productivo". ?sta es una de las conclusiones del estudio Sistema productivo, nuevas formas de trabajo y Universidad, elaborado por el equipo valenciano Moriana, que dirigen Vicente P¨¦rez Plaza y Aldo Bononi, que ser¨¢ presentado hoy en la Polit¨¦cnica de Valencia durante la inauguraci¨®n del primer encuentro oficial de los expertos de siete capitales europeas que conforman el Proyecto Moriana. La consecuencia de contar con "un sistema de I+D d¨¦bil, que adem¨¢s, no se orienta al ciclo de la innovaci¨®n, se corresponde con un modelo econ¨®mico d¨ªficil de sostener a largo plazo", precisa el informe en manos del consejero de Empleo, Rafael Blasco, y al que ha tenido acceso EL PA?S. Seg¨²n las claves de los investigadores del equipo Moriana valenciano, "lo cierto es que la econom¨ªa valenciana no puede plantearse, en este final de siglo, el reto de vencer en la competici¨®n a las regiones m¨¢s avanzadas de Europa". El optimismo empresarial y pol¨ªtico generalizado que vende a la Comunidad Valenciana como un escenario productivo feliz se antoja m¨¢s bien un mito que una realidad tangible. En contrapartida, el estudio afirma que "la econom¨ªa valenciana lo que debe proponerse es sobrevivir, acortar distancias y aspirar a situarse en la media europea de productividad, renta y bienestar social". La ecuaci¨®n para acortar estas distancias con la UE pasa por "aumentar la actividad macroecon¨®mica, es decir, la cifra total de ventas", para lo que se requiere incrementar el valor a?adido de cada actividad productiva. Y esto s¨®lo es posible "con innovaci¨®n tecnol¨®gica". Precariedad laboral Cambiar la estrategia empresarial valenciana -integrada por 260.500 empresas, de las cuales un 66% son aut¨®nomos, un 23,6% tienen menos de seis trabajadores y el 10,3% se consideran pymes- es poco m¨¢s que una tarea de titanes. Todav¨ªa m¨¢s si, como las cifras oficiales revelan, "lo que crece con fuerza es el trabajo aut¨®nomo, el autoempleo, la microempresa y el trabajo precario: temporal, a tiempo parcial, a la tarea o por horas". M¨¢s a¨²n, en el nuevo contexto de Empresas de Trabajo Temporal (ETT), que apenas fueron legalizadas en 1994, la Comunidad Valenciana es un exponente en este tipo de empleabilidad temporal y, por tanto, precaria. El estudio recuerda que en 1998 las ETT valencianas gestionaron 111.160 contratos, un 55% m¨¢s que en 1997. Esto hace que "la tasa de temporalidad de la Comunidad sea ocho puntos m¨¢s alta que la media valenciana, y bastante m¨¢s alta que la de la UE". Revisar el papel de las universidades es, pues, clave para adecuar la formaci¨®n a la realidad concreta del tejido valenciano productivo. ?ste diagn¨®stico y las formas de trabajo emergentes son los ejes que hoy discutir¨¢n un centenar de gestores, economistas, sindicalistas y empresarios en el encuentro Moriana.