Agust¨ªn Conde decide no incluir en su ejecutiva a los "hist¨®ricos" del PP de Castilla-La Mancha

El PP se enfrenta desde hoy a los congresos regionales m¨¢s cr¨ªticos y pol¨¦micos de los 16 programados este oto?o. A la enconada divisi¨®n en Canarias se une la confirmaci¨®n de las dos listas en Baleares, la ratificaci¨®n de una nueva l¨ªnea pol¨ªtica en el Pa¨ªs Vasco y el aplazamiento sin fecha ni delf¨ªn de la sucesi¨®n de Manuel Fraga en Galicia. Y a¨²n colea la resaca de las convenciones ya celebradas. En Castilla-La Mancha, el refrendado presidente, Agust¨ªn Conde, eludi¨® ayer una propuesta para incluir a dedo en su ejecutiva a los dirigentes hist¨®ricos y de la vieja guardia depurados en la asamblea.

LOS CONGRESOS DEL PPEl Comit¨¦ Ejecutivo del PP en Castilla-La Mancha se reuni¨® ayer por primera vez tras su reciente congreso y ratific¨® los nombramientos de los cargos ejecutivos planteados por Agust¨ªn Conde. En el nuevo aparato del partido no tienen cabida, por el momento, ni algunos de los m¨¢s relevantes dirigentes hist¨®ricos, como la ministra Isabel Tocino; el diputado Javier Rup¨¦rez, presidente de la Internacional Dem¨®crata Cristiana; Carlos Moro, delegado del Gobierno, o Enrique Fern¨¢ndez Miranda, vicepresidente del Congreso de los Diputados; ni los clasificados como barones de la vieja guardia: Francisco Tomey y Jos¨¦ Mar¨ªa Bris, en Guadalajara; Emigdio de Moya, en Albacete; Marina Moya, en Cuenca, o Jos¨¦ Manuel Molina, en Toledo.Los estatutos votados en el congreso permiten la posibilidad de que Conde designe directamente para su inclusi¨®n en la Ejecutiva a 25 personas: cinco por su relevancia y 20 por ser diputados nacionales y auton¨®micos. Varios dirigentes del PP le plantearon a Conde que ejerciese esa potestad con los marginados en el c¨®nclave y ¨¦ste se la reserv¨® para el futuro. Conde introdujo en los estatutos otra reforma espec¨ªfica por la que prev¨¦ la expulsi¨®n de la ejecutiva de cualquiera de sus componentes que no asista cuatro veces a sus reuniones sin justificaci¨®n y ocho veces incluso con alguna excusa.

Fuentes de la direcci¨®n del PP han admitido que algunos de los depurados, como Tocino, Rup¨¦rez o Fern¨¢ndez Miranda apenas acud¨ªan a esas citas. Y sobre la marginaci¨®n de los barones provinciales se indica que ahora se busca construir casi desde cero un partido regional derrotado en las urnas y no una suma de agrupaciones provinciales. Eso s¨ª, se reprocha a Conde el m¨¦todo expeditivo y sin di¨¢logo alguno con que ha llevado esta renovaci¨®n.

La sombra de Ca?ellas en Baleares. Al margen del congreso canario del PP, en Baleares tambi¨¦n habr¨¢ dos listas alternativas. El candidato oficial, Jaume Matas, ex presidente auton¨®mico, logr¨® el mi¨¦rcoles aglutinar en su candidatura al sector cr¨ªtico tradicionalista de Alberto Ram¨®n Herran y Ram¨®n Pita da Veiga, que hab¨ªa amenazado con organizar su alternativa, pero no a los partidarios de Gabriel Ca?ellas.

El hist¨®rico ex presidente balear, dimitido tras el esc¨¢ndalo del t¨²nel de Soller, no participa en primera l¨ªnea tras la candidatura conservadora de Juan Forcades, pero ¨¦ste se presenta como su amigo ¨ªntimo y no ha sido desmentido. Podr¨ªan sumar hasta el 30% de los casi 1.200 compromisarios.

Un proceso en manos de Fraga. La direcci¨®n nacional del PP renuncia por ahora a encarar el problema de la sucesi¨®n de Manuel Fraga en Galicia y tampoco se abordar¨¢ en el congreso que comienza hoy. No es algo nuevo. Y no se vislumbra cu¨¢ndo podr¨ªa discutirse esa cuesti¨®n, entre otras razones porque Fraga ser¨¢ el futuro candidato auton¨®mico. Aunque el secretario general del partido, Javier Arenas, ha participado en algunas reuniones sobre la aparente renovaci¨®n de algunos cargos del PP gallego, el proceso ha quedado en manos de Fraga. El PP se ha contentado por ahora con exigir s¨®lo a Xos¨¦ Cui?a, Jos¨¦ Manuel Romay y los barones provinciales Jos¨¦ Luis Baltar y Francisco Cacharro que eligiesen entre los m¨²ltiples cargos que compatibilizaban.

Nueva orientaci¨®n en Euskadi. No habr¨¢ conflictos ni pol¨¦micas p¨²blicas en el congreso del PP en el Pa¨ªs Vasco, que reunir¨¢ casi en familia a 360 delegados en Vitoria. El escaso sector cr¨ªtico, muy localizado en Guip¨²zcoa, ya ha sido neutralizado antes del c¨®nclave. La ¨²nica discusi¨®n podr¨ªa surgir sobre la nueva orientaci¨®n estrat¨¦gica que se pretende impulsar en un partido que ha vivido unos a?os dram¨¢ticos en los que s¨®lo cab¨ªa la posibilidad de escuchar reacciones propias de la oposici¨®n. El acceso a instituciones de gobierno en los ¨²ltimos comicios ha facilitado un nuevo papel m¨¢s constructivo a algunos dirigentes que es bien visto desde Madrid.