Hague acusa a Blair de intentar "abolir la independencia" brit¨¢nica

William Hague, el l¨ªder de la oposici¨®n conservadora brit¨¢nica, cerr¨® ayer la convenci¨®n anual de su partido en Blackpool con duros ataques contra el Gobierno de Tony Blair. Hague acus¨® a Blair de "intentar abolir nuestra moneda y nuestra independencia como pa¨ªs". Y areng¨® a sus correligionarios: "Si cre¨¦is en Reino Unido como pa¨ªs independiente que puede relacionarse con sus vecinos pero que nunca se someter¨¢ a ser gobernado por otros, si cre¨¦is en un pa¨ªs independiente, venid conmigo".

William Hague, el l¨ªder de la oposici¨®n conservadora brit¨¢nica, lanz¨® as¨ª una estrategia para iniciar a la mayor brevedad posible una robusta campa?a que apunta a recobrar la supremac¨ªa tory en las pr¨®ximas elecciones con pleno apoyo de la exprimera ministra Margaret Thatcher, que permanece como el puntal del partido virtualmente inmovilizado por disputas internas y los efectos de una direcci¨®n atrapada entre la indecisi¨®n y un d¨¦ficit sin precedentes de popularidad.En uno de sus discursos m¨¢s contundentes, el l¨ªder tory Hague respondi¨® a las acusaciones del primer ministro Blair de ineficiencia del partido conservador y atac¨® con tes¨®n la campa?a laborista contra "las fuerzas del conservadurismo", de las que Hague no tuvo reparo en declarar su vigencia y positivo aporte a la sociedad brit¨¢nica.

Fue un mensaje claro, directo y a momentos atrevido que inyect¨® br¨ªos al alica¨ªdo partido al que los laboristas se han apresurado en extender su certificado de defunci¨®n por su "defensa de los obsoletos privilegios de las ¨¦lites sociales".

A Hague le result¨® un tanto dif¨ªcil disimular sus ansias de superar en fogosidad el discurso con el que el mi¨¦rcoles la baronesa Thatcher record¨® a los brit¨¢nicos que sigue siendo la fuente de vigorosa inspiraci¨®n para los conservadores, una imbatible fuerza a pesar de estar temporalmente al margen de la pol¨ªtica. En un pasaje de su discurso que arranc¨® un prolongado aplauso, Hague anunci¨® un endurecimiento de la postura tory con relaci¨®n al euro y dijo que su agenda mantiene en nivel prioritario el bloqueo de futuros pactos europeos a menos de que el Reino Unido consiga una sustancial flexibilidad dentro de la Uni¨®n Europea.

Pero Hague reserv¨® sus m¨¢s intensos argumentos para atacar a Blair, a quien acus¨® de copiar las t¨¢cticas de Thatcher durante la campa?a que lo llev¨® al poder en mayo de 1977. "Antes de los comicios, Blair expres¨® admiraci¨®n de los conservadores de Margaret Thatcher. Impl¨ªcitamente prometi¨® ser como Thatcher. Pero Blair, definitivamente no es un tory", proclam¨®.

Promesas incumplidas

Fue, por lo tanto, categ¨®rico al ridiculizar la ofensiva laborista contra "las fuerzas del conservadurismo" denunciadas por Blair como el factor m¨¢s pernicioso y principal lastre en la pol¨ªtica brit¨¢nica afirmando que el fracaso de los laboristas se resume en "una colecci¨®n de promesas incumplidas". "Ah¨ª est¨¢n (incompletas) la renovaci¨®n de los sistemas de seguridad social y las reformas del sistema impositivo", apunt¨® Hague."Blair prometi¨® la elevaci¨®n de impuestos, combatir el crimen, pensar en lo impensable con tal de impulsar la seguridad social y luchar por los intereses brit¨¢nicos en el exterior. Esto result¨® ser una gran decepci¨®n", dijo el l¨ªder conservador. Pero la fuerza de su ret¨®rica estuvo enfocada a criticar lo que en las filas conservadoras se percibe como un innecesario y exagerado entusiasmo proeurope¨ªsta que no garantiza beneficios para el Reino Unido. "No se trata de salirnos de Europa. Se trata de sacar el m¨¢ximo provecho de lo que ofrece Europa", aclar¨® un alto funcionario tory descartando que las divisiones en el seno del partido conservador en torno a la cuesti¨®n europea pueden provocar rupturas capaces de eliminar la influencia de los tories.