"Que Straw estudie la salud de Pinochet y decida si quiere actuar"

El ministro chileno de Asuntos Relaciones, Juan Gabriel Vald¨¦s, adoptar¨¢ en las pr¨®ximas horas, junto con el presidente Eduardo Frei, seg¨²n dijo ayer a EL PA?S, la decisi¨®n sobre la presentaci¨®n al ministro del Interior brit¨¢nico, Jack Straw, de unas alegaciones para que deje en libertad al general Augusto Pinochet por su estado de salud. La teor¨ªa del Gobierno chileno es que los problemas de salud impedir¨ªan a Pinochet seguir enfrentando las apelaciones judiciales en el Reino Unido y, eventualmente, someterse a juicio en Espa?a. Este es un resumen de una larga conversaci¨®n telef¨®nica que ayer mantuvo el ministro con ¨¦ste peri¨®dico.Pregunta. El ministro Straw ha dicho que se basar¨¢ en todo momento en la ley de extradici¨®n de 1989, ?desarbola esto la idea de Chile de alegar la raz¨®n humanitaria para que Straw decida r¨¢pidamente, antes incluso de que la defensa de Pinochet apele ante el Alto Tribunal de Justicia brit¨¢nico?

Respuesta. La decisi¨®n est¨¢ a punto de ser tomada y lo har¨¦ junto con el presidente de la Rep¨²blica y se refiere a la idea de presentar al ministro Straw nuestros argumentos en el sentido de que el general Pinochet no est¨¢ en condiciones de salud para aguantar ni las apelaciones que se abren ahora en Londres ni ser sometido a juicio en Espa?a. Ya he entregado certificados, de m¨¦dicos independientes en el Reino Unido, que as¨ª lo dicen. No auguran ning¨²n desenlace inminente para Pinochet, pero analizan sus enfermedades. Y me digo: si el magistrado Ronald Bartle ha autorizado a Pinochet a no asistir a la lectura de su veredicto, el pasado viernes 8, en base a un m¨¦dico del propio general, el doctor Loxton, ?por qu¨¦ no puede Straw estudiar el diagn¨®stico de m¨¦dicos independientes realizado en el mes de septiembre?

P. La ley prev¨¦ la intervenci¨®n del ministro una vez que el asunto salga de la esfera judicial, ?Usted cree que hay margen para Straw?

R. Los abogados ingleses que asesoran al Gobierno de Chile dicen -y tambi¨¦n los que asesoran al Gobierno espa?ol- que una cosa es lo que el ministro puede hacer y otra lo que quiera hacer. Los abogados entienden que Straw puede extender su discrecionalidad para actuar, si quiere, ahora. Pero en todo caso, yo deseo que, si finalmente decidimos elevar nuestras alegaciones, Straw decida cuando quiera, sin fecha fija ni emplazamientos. Nosotros no tenemos en mente la fecha en la cual la defensa del general Pinochet va a presentar su recurso de apelaci¨®n, que al parecer ser¨¢ el lunes 18 de octubre. Nuestra propuesta de que estudie si es posible dejar en libertad a Pinochet y enviarlo a Chile por ser "opresivo" para ¨¦l -utilizando la definici¨®n legal inglesa- someterse a juicio es una posici¨®n humanitaria. Nuestro candidato a la presidencia, Ricardo Lagos, ha dicho quenosotros tenemos en cuenta las razones humanitarias, aunque Pinochet no las haya tenido nunca en cuenta. Tiene raz¨®n. Por eso es una propuesta sin emplazamiento a nadie. Para resumir: nunca ser¨ªa para nosotros un fracaso si despu¨¦s de estudiarlas, Straw decidiese no actuar o rechaza hacerlo, simplemente estima que no es el momento procesal. Porque nos gu¨ªa una raz¨®n moral.

P. Por tanto, ?la decisi¨®n ser¨¢ anunciada muy pronto?

R. Creo que vamos a hacerlo muy rapido. Estamos trabajando con los abogados en Londres.

P. Uno de sus hombres en la canciller¨ªa, Alberto van Klaveren, sigue en Londres, ?est¨¢ ¨¦l trabajando en las alegaciones?

R. ?l est¨¢ trabajando en contacto con los abogados y se quedar¨¢ hasta el jueves [por hoy].

P. La Corte Suprema chilena ha autorizado el envio de un cuestionario a Pinochet sobre dos casos en los que podr¨ªa estar implicado, ?por qu¨¦ no se han materializado ninguna de esas diligencias?

R. En efecto, hace varios meses se envi¨® a Londres, a trav¨¦s del sistema de cooperaci¨®n judicial, unas preguntas relacionadas con el caso del asesinato del sindicalista Tucapel Jim¨¦nez. El interrogatorio a Pinochet deb¨ªa hacerse ante un juez brit¨¢nico. Pero no existe informaci¨®n sobre qu¨¦ ha pasado. Precisamente, he dado instrucciones para conocer los hechos.

P. Esto no supone que se est¨¦ m¨¢s cerca de una petici¨®n de extradici¨®n de Pinochet por parte de un juez chileno, ?o s¨ª?

R. Creo que para pedir la extradici¨®n un juez deber¨ªa descubrir indicios firmes de una participaci¨®n de Pinochet en los hechos de que se le acusa. El cuestionario pretende saber qu¨¦ tiene que decir sobre ciertos hechos [Tucapael Jim¨¦nez o caravana de la muerte]. Porque si un juez decidiese pedir la extradici¨®n primero deber¨ªa solicitar ante la C¨¢mara de Apelaciones de Valpara¨ªso el desafuero de Pinochet como senador, se le deber¨ªa declarar reo [equivalente del auto de procesamiento o auto de apertura de juicio oral] y entonces todav¨ªa habr¨ªa otro problema: el juez del caso, sea Guzm¨¢n o Mu?oz, deber¨ªa dejar las actuaciones en manos de un juez ministro de la Corte Suprema. Porque ¨¦sta ser¨ªa la ¨²nica manera de evitar que Pinochet pasara a disposici¨®n de la justicia militar. Estas son algunas de las razones por las cuales un juez estudiar¨¢ mucho la calidad de las pruebas que tiene en sus manos antes de plantear la extradici¨®n. En otros t¨¦rminos, porque sabe que en el momento en que pronuncie la propuesta de solicitar la extradici¨®n de Pinochet tendr¨¢ que abandonar su caso. Y cuando uno lleva a?os estudiando una causa no es bueno abandonarla... a menos que se pueda lograr el objetivo.