El PSPV asumi¨® la subvenci¨®n a El Vedat a cambio de que modificara los criterios pedag¨®gicos sexistas

A la reuni¨®n del 12 de febrero pasado, en la que se acord¨® "proponer el concierto para todos los centros" y rechazar "la priorizaci¨®n" de unos en detrimento de otros (es decir, los vinculados al Opus Dei que no cumplen los criterios de coeducaci¨®n), participaron tambi¨¦n cinco funcionarios de la consejer¨ªa y tres representantes municipales cuya eleci¨®n resulta un tanto aleatoria: Jos¨¦ Antonio Navarro Fern¨¢ndez, asesor del concejal de Educaci¨®n de Valencia Emilio Del Toro; y los socialistas Joan Tamarit y Salvador Almenar, de Torrent. Su presencia se justifica, sin embargo, dado que dos de los colegios que ocuparon buena parte del debate son El Vedat, de Torrent, gestionado por Fomento de Centros de Ense?anza, que tiene un contrato coyuntural con el Opus, y el Guadalaviar, que es de la Obra. Ambos imparten clases seg¨²n el ideario pedag¨®gico sexista, que separa la educaci¨®n de hombres y mujeres. Hecho que choca con el esp¨ªritu de la LOGSE y que ha sido recurrido por los sindicatos ante el TSJ.En este contexto, la presencia de los socialistas de Torrent fue decisiva para que la Administraci¨®n cerrara el acuerdo completo sin oposici¨®n, excepto la opini¨®n del representante de CC OO que acudi¨® s¨®lo en calidad de "invitado", ya que el sindicato no forma parte de la comisi¨®n de conciertos, al que Tamarit calific¨® de "trasnochado". La posici¨®n de Tamarit en la reuni¨®n fue "no priorizar propuestas", sino "ponerlas todas en el mismo paquete", en referencia "a los colegios El Vedad, Vilavella y Guadalaviar". Una posici¨®n que fue asumida por la comisi¨®n en bloque: "La comisi¨®n de conciertos acuerda que no procede establecer en la misma una priorizaci¨®n, se propondr¨¢ el concierto para todos los centros que lo han solicitado".

Acto seguido Tamarit sugiri¨® al director territorial y a la Inspecci¨®n que "exijan la buena voluntad escolarizando ya chicos y chicas". Una posici¨®n que el director territorial, Pablo Antonio Crespo, subray¨® en varias ocasiones, puntualizando que su misi¨®n es "exigir a los centros el cumplimiento de las normas", como defienden los t¨¦cnicos de la consejer¨ªa.

Sin embargo, el esc¨¢ndalo que ha envuelto a los conciertos y la discrecionalidad pol¨ªtica que ha primado, lo que se ha reflejando en las m¨²ltiples irregularidades detectadas y denunciadas por los sindicatos, han hecho que el director territorial en este momento haya pedido sin ¨¦xito su cese y que el secretario, Rafael G¨®mez, seg¨²n UGT, haya sido apartado del proceso.

Al frente de las negociaciones iniciales, en la reuni¨®n de febrero, y ahora en medio del conflicto que enfrenta el Consell (lo cual deber¨¢ aclarar ma?ana el consejero Taranc¨®n en las Cortes) aparece el subdirector territorial, Camilo Mir¨®, hermano de la presidenta de las Cortes, Marcela Mir¨®, y calificado como el hombre fuerte, "el brazo pol¨ªtico", del equipo de Eduardo Zaplana en la consejer¨ªa.