Espa?a sentencia a Suiza y se medir¨¢ en septiembre con Dinamarca
La pareja formada por Mart¨ªnez y Munar cierra la eliminatoria en Biel (6-4 y 7-5, en 1h 42m) y garantiza el acceso a la segunda ronda clasificatoria
Llevaba la serie entre Suiza y Espa?a el r¨®tulo de la Copa Davis. No lo parec¨ªa. Menos de un millar de personas en el grader¨ªo de Biel ¡ªcon equidad en la representaci¨®n, si no predominio visitante¡ª presenciaron el fr¨ªo desenlace de una serie con una sola voz, la del equipo invitado. En consonancia con la gelidez del pabell¨®n, el bloque suizo termin¨® inclin¨¢ndose sin un solo arrebato ni rebeld¨ªa alguna ante una rival que redonde¨® el fin de semana perfecto: pleno de victorias, sin ceder un solo set ni tampoco una sola vez el servicio. Y eso con la unidad B. Al buen trabajo propuesto en los turnos individuales del s¨¢bado le acompa?¨® el lazo del dobles, rubricado por Pedro Mart¨ªnez y Jaume Munar ante Dominik Stricker y Marc-Andrea H¨¹sler: 6-4 y 7-5, en 1h 42m. Faltaba un punto para superar el esta primera ronda clasificatoria y el d¨²o espa?ol no fall¨®. En consecuencia, el equipo de David Ferrer recibir¨¢ en septiembre a Dinamarca en busca del pase definitivo a la fase final de la Copa Davis que tendr¨¢ lugar dos meses despu¨¦s en Bolonia.
Enterrada la era Piqu¨¦, la federaci¨®n internacional ha intentado darle m¨¢s vuelo a la competici¨®n con la recuperaci¨®n del formato local-visitante en el tramo clasificatorio. En Biel, sin embargo, ni rastro de ese aroma caliente o emocional de la vieja Davis, sino m¨¢s bien todo lo contrario. Un paisaje as¨¦ptico, una anfitriona poco orgullosa ¡ªhasta el ¨²ltimo juego no ara?¨® la pareja suiza la primera opci¨®n de rotura¡ª y tres partidos de una sola direcci¨®n; de fondo, el buen hacer del cuadro espa?ol, que al fin y al cabo era lo que demandaba la escena. Articulado en torno a perfiles de corta experiencia en el torneo, que no en el circuito de ¨¦lite, Mart¨ªnez y Roberto Carball¨¦s abrieron v¨ªa el s¨¢bado a base de oficio y fiabilidad, y el valenciano (44?) y Munar (64?) ejercieron en la misma l¨ªnea para sentenciar y asegurar la progresi¨®n. Por tanto, a la vista queda contra pron¨®stico Dinamarca, liderada por el inestable Holger Rune y expuesta a un cruce sobre tierra batida, dado que Espa?a tendr¨¢ la potestad de elegir la superficie para el pr¨®ximo compromiso.
Introducida con calzador en el saturado calendario anual, la Davis exigi¨® en esta fase de la intervenci¨®n de los actores secundarios. Y lo pag¨® Serbia, por ejemplo, ya apeada por los n¨®rdicos y obligada a pelear pr¨®ximamente para no perder el hueco en el grupo mundial. La ausencia de Novak Djokovic merm¨® de manera considerable su artiller¨ªa, de la misma forma que Espa?a no es la misma con o sin Carlos Alcaraz. Sin el concurso del murciano ni la de otros jugadores de mayor relieve, Ferrer tuvo que confiar en una segunda l¨ªnea que respondi¨® de f¨¢bula. Esto es, hizo exactamente lo que se le ped¨ªa. A las impecables actuaciones individuales del primer d¨ªa le sucedi¨® el remate de este domingo frente a una pareja de zurdos agresiva que choc¨® con la solidez de los visitantes desde la trinchera. Se conocen bien Mart¨ªnez y Munar, de la misma quinta y pulidos al mismo tiempo en el CAR de Sant Cugat, y la conexi¨®n se tradujo en una victoria en l¨ªnea recta, sin sobresalto alguno.
Una rotura en cada parcial fue suficiente para conceder el billete para la pr¨®xima ronda al equipo espa?ol, muy acorde a la situaci¨®n. No exig¨ªa el cruce con los suizos de adornos sino de temple y consistencia, argumentos m¨¢s que suficientes para rendir a una adversaria d¨¦bil y con escaso fuego competitivo. Sin ning¨²n representante entre los cien mejores, Suiza lleg¨® seguramente al m¨¢ximo que le alcanzaba su elenco, mientras el oficio de jugadores m¨¢s que bregados como Mart¨ªnez, Carball¨¦s o Munar bast¨® a los de Ferrer, por mucho que el recorrido de todos ellos en la Davis sea corto o muy corto. El primero apenas hab¨ªa disputado cinco partidos de dobles y uno solo individual, pero ten¨ªa que liderar y respondi¨® con creces; el segundo (51?) desfilaba a sus 31 a?os por primera vez, pero contribuy¨® con su caracter¨ªstica profesionalidad; y el tercero, solo una actuaci¨®n y ya lejana, all¨¢ por 2017 y saldado con derrota, respald¨® con seriedad y buena mano, especialmente al resto. En conclusi¨®n, sobresaliente para los secundarios.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.