Agr¨® cierra la zanja abierta para desecar el marjal de Massamagrell Los ecologistas vuelven a enfrentarse al Ayuntamiento

El marjal de Massamagrell, un peque?o humedal valenciano reiteradamente desecado y en el que, antes que una decisi¨®n judicial lo paralizase, ya hab¨ªan entrado las m¨¢quinas excavadoras para construir varios edificios a pie de playa, fue ayer el escenario de otra acci¨®n reivindicativa de Acci¨® Ecologista-Agr¨®. Varias decenas de miembros de este colectivo y de otros grupos que defienden activamente la conservaci¨®n de los humedales valencianos volvieron a cerrar, por segundo a?o consecutivo, el canal que deseca uno de los humedales valencianos m¨¢s deteriorados.

Desde unos hace a?os, el Consistorio de Massamagrell procede peri¨®dicamente a la apertura de una zanja en la zona h¨²meda que ocupa parte de su t¨¦rmino municipal e integra una misma zona geof¨ªsica y natural junto al marjal de Rafalell y Vistabella (en el t¨¦rmino municipal de Valencia). Sin embargo, el maltrecho enclave se ha convertido en un s¨ªmbolo para la protecci¨®n del ecosistema m¨¢s castigado de la Comunidad Valenciana, los humedales. Y los ecologistas lo han tomado como su emblema: esto es, si se vence la presi¨®n especulativa sobre un marjal min¨²sculo (12 hect¨¢reas), casi consolidado urban¨ªsticamente y notablemente deteriorado por la incesantes manipulaciones humanas sufridas durante los ¨²ltimos a?os, ser¨¢ m¨¢s f¨¢cil acometer la defensa de otros humedales.Al fin y al cabo los ecologista tratan de demostrar que por mucho que se act¨²e sobre la zona, si no se llega a enterrar bajo el cemento, el enclave se comportar¨¢ como un humedal siempre que se le deje tranquilo. Y esgrimen que no hace falta invertir miles de millones de pesetas para recuperar las malladas valencianas, como las inauguradas el viernes por la alcaldesa Rita Barber¨¢ en El Saler, si en Massamagrell se pueden encontrar gratis.

Sin embargo, cuentan con la oposici¨®n del Consell. As¨ª, el marjal de Massamagrell se incluy¨® en un principio entre los 32 humedales que integraban el Cat¨¢logo de Zonas H¨²medas de la Comunidad Valenciana pero la Generalitat, en manos de Eduardo Zaplana, del PP, lo excluy¨® por una decisi¨®n pol¨ªtica. As¨ª, ni figura en un listado que le dar¨ªa protecci¨®n, ni ¨¦ste ha sido aprobado cuatro a?os despu¨¦s de que una ley obligara al Consell a hacerlo.

Por eso, al igual que ocurri¨® el a?o pasado, los activistas cerraron ayer de nuevo la zanja que cada a?o abre el Ayuntamiento, bajo la denominaci¨®n eufem¨ªstica de "limpieza de acequias", en el enclave para desecar el espacio. En 1998, el Ayuntamiento abri¨® una zanja de 100 metros de largo, tres de ancho y metro y medio de profundo para que el agua acumulada en el h¨¢bitat de decenas de aves protegidas se perdiese en el mar. Los ecologistas, contrarios a la decisi¨®n del municipio de "aniquilar el marjal", la taparon d¨ªas m¨¢s tarde y denunciaron la destrucci¨®n impune ante las autoridades. La defensa del marjal se volvi¨® contra ellos, y los ecologistas, a su vez, fueron denunciados.