"Los miedos de la Transici¨®n son los de cualquier adolescente"

Con su ¨²ltima obra, Alf¨¦reces provisionales (Destino, 1999), Pedro Maestre cierra una trilog¨ªa de novelas dedicada a Alicante. Al menos, por el momento, ya que este escritor nacido en Elda (Vinalop¨® Mitj¨¤) hace 31 a?os no descarta volver utilizar esta provincia como escenario para las andanzas de sus personajes. Su primera novela, Matando dinosaurios con tirachinas, con la que obtuvo el premio Nadal en 1996, vino servida con pol¨¦mica por su mordaz retrato de Alcoy, que le gan¨® la enemistad de muchos habitantes de la capital de L"Alcoi¨¤. Con la segunda, Benidorm, Benidorm, Benidorm, intent¨® reflejar el delirio de la costa. Apenas tuvo repercusi¨®n y ¨¦l mismo reconoce que no consigui¨® lo que quer¨ªa. M¨¢s satisfecho se muestra con Alf¨¦reces provisionales, una obra sobre la adolescencia en la transici¨®n espa?ola con la que Maestre, seg¨²n sus propias palabras, inicia su madurez como escritor.Pregunta. Alf¨¦reces Provisionales es su tercera novela y, como sus predecesoras, transcurre en Alicante. ?Tanto da esta tierra para novelar?

Respuesta. Es mi tierra, y un escritor siempre se basa en su experiencia. En Matando dinosaurios con tirachinas la realidad s¨ª parec¨ªa m¨¢s fiel, era un pretendido reflejo fiel de la realidad. Esta novela es s¨®lo ficci¨®n. Est¨¢ basada en esta zona, pero se sit¨²a en una ciudad inventada y todos los personajes son inventados.

P. ?Por qu¨¦ deber¨ªa interesarse por sus novelas alguien que no conozca Alicante?

R. Por la misma raz¨®n por la que nos interesamos por las novelas de Cela o de Manuel Rivas, que hablan de Galicia. Alicante es una zona como otras de Espa?a, en la que se da la mezcla de dos lenguas y es muy importante, porque para m¨ª eso es la esencia de Espa?a: el mestizaje, la mezcla de culturas. Y la zona de Alicante representa, como otras, la esencia de Espa?a.

P. ?Va a cerrar Alf¨¦reces provisionales una trilog¨ªa dedicada a Alicante?

R. No, la siguiente novela quiero que transcurra en una gran ciudad. Imagino que en el futuro har¨¦ otra novela que hable de Alicante. Tengo en mente una sobre mis inicios literarios, sobre la ¨¦poca en la que ten¨ªa 17 o 18 a?os. El personaje tendr¨ªa esa edad. Pero eso es el futuro, ahora estoy intentando abrir otro camino. Un escritor siempre tiene que evolucionar e ir hacia adelante, no estancarse.

P. En ese sentido se puede enmarcar una frase suya, en la que dice que Alf¨¦reces Provisionales inicia su etapa de madurez.

R. S¨ª, yo creo que es as¨ª. Antes de Matando dinosaurios con tirachinas escrib¨ª otra novela que se llama Trapos Sucios y todav¨ªa no ha sido publicada. Se publicar¨¢ dentro de dos a?os, creo. Pero Matando dinosaurios.. la siento como mi primera novela. En su primera novela, el escritor, aunque sea irregular -que creo que no era tanto el caso de Matando dinosaurios, aunque haya gente que pueda decirlo- debe mostrar que tiene una personalidad, una fuerza, una voz propia, y yo creo que lo consegu¨ª con aquella novela. Luego, en Benidorm, Benidorm intent¨¦ hacer otra cosa y no qued¨¦ tan satisfecho como de Matando dinosaurios o Alf¨¦reces Provisionales, pero bueno, ah¨ª est¨¢. Alf¨¦reces provisionales la considero mi primera obra de madurez. Es una obra redonda en la que he expresado todo lo que quer¨ªa.

P. ?Puede resumirnos el argumento de Alf¨¦reces Provisionales?

R. Pues en una frase, la novela va de la adolescencia en una calle de un barrio obrero durante la ¨¦poca de la transici¨®n. Por una parte, hago hincapi¨¦ en esos cambios bruscos que le suceden a toda persona cuando cambia de la ni?ez a la adolescencia. Y, por otra, tambi¨¦n reflejo el tiempo hist¨®rico, aquella ¨¦poca sosa que ven¨ªa de una dictadura, que a¨²n ten¨ªa un deje aut¨¢rquico y gris. Tambi¨¦n hab¨ªa incertidumbre, miedo, no se sab¨ªa muy bien qu¨¦ era eso de la democracia. Y los miedos que ten¨ªamos todos los espa?oles en aquella ¨¦poca son tambi¨¦n los miedos que tiene el adolescente, miedo a crecer, a tener que asumirse a s¨ª mismo. Son dos historias paralelas. La novela discurre del 77 al 81, y reflejo tambi¨¦n la problem¨¢tica social, que se ve mucho m¨¢s en los barrios obreros y en las ciudades industriales, con sus huelgas, sus manifestaciones. Somos los hijos de... hay gente que nos ha llamado los hijos de... no me acuerdo de la definici¨®n, pero ¨¦ramos ni?os cuando muri¨® Franco... En el a?o 80-81 yo ten¨ªa 12 o 13 a?os, como el protagonista.

P. A usted se le ha querido enmarcar en una generaci¨®n de escritores j¨®venes en la que figuran nombres como Jos¨¦ ?ngel Ma?as o como Ray Loriga. ?Existe esa generaci¨®n o es un invento?

R. Hay muchos escritores j¨®venes, pero siempre se menciona a los mismos, a Ma?as o a Loriga. Tambi¨¦n hay distintos estilos y si hay un rasgo com¨²n es la edad, ya que todos estamos en torno a los 30 a?os, pero luego hay una gran variedad de estilos... est¨¢n Ma?as y Loriga pero luego hay otros escritores que a lo mejor son minoritarios o menos medi¨¢ticos, como Bel¨¦n Gopegui o Juan Bonilla. Hay muchos escritores y muy buenos. Yo considero que somos una generaci¨®n muy buena, con mucha riqueza, algo parecido a lo que pasa en el cine. Un narrador con 30 a?os es muy joven y a¨²n faltan muy buenas novelas.

P. Eso dicen, que la literatura es un arte de largo recorrido.

R. S¨ª, yo cuando era m¨¢s joven no lo cre¨ªa, pero ahora s¨ª lo creo. La novela necesita tener una vida detr¨¢s, una experiencia para saber darle consistencia a los personajes y muchas otras cosas.

P. ?Cree que la literatura de j¨®venes y para j¨®venes est¨¢ un poco encasillada? Usted ha dicho que hay mucha variedad, pero la imagen que llega al gran p¨²blico es que de un escritor joven se espera que escriba con frases cortas, que utilice un lenguaje coloquial y que narre historias relacionadas con la noche y las drogas. ?Qu¨¦ opina?

R. No creo que sea as¨ª. De Prada es joven y es todo lo contrario. Loriga ha hecho una ¨²ltima novela, que se llama Tokio ya no nos quiere que, s¨ª, es el mundo de las drogas, pero a?ade algo innovador en la literatura espa?ola. Aunque para m¨ª es una obra un poco fallida, supone una b¨²squeda de nuevos caminos. Cada uno tiene su estilo. Las drogas, en mi literatura, aparecen de forma accesoria, salen porque est¨¢n en la vida, no es nada reivindicativo ni militante en mis personajes.

P. ?Qu¨¦ opina de las iniciativas para captar lectores j¨®venes que est¨¢n llevando a cabo algunas editoriales? Pienso en Mondadori y en su colecci¨®n Reservoir Books.

R. He le¨ªdo poco, pero todo lo que sea captar a lectores que no leen habitualmente... Mondadori creo que ha sido tambi¨¦n la que ha iniciado la campa?a de libros de poes¨ªa econ¨®micos... todo lo que vaya en ese sentido creo que es formidable.

P. Con los videojuegos, el cine, la tele, los best-sellers de consumo r¨¢pido... ?quedar¨¢ la literatura de calidad reducida a un gueto de intelectuales?

R. ?Qu¨¦ va! No, eso es un augurio que no tiene sentido. El ser humano siempre necesita expresarse de una forma ¨ªntima, y la literatura siempre tiene ah¨ª su espacio. Y de hecho se vende un mont¨®n de libros. Cada vez se publica m¨¢s y la gente lee mucho.

P. ?Qu¨¦ novela le impuls¨® a convertirse en escritor?

R. Muchas. Yo he sido y sigo siendo un lector habitual de poes¨ªa. De hecho, tengo algunos libros de poes¨ªa que no est¨¢n publicados por ahora, pero yo siempre he le¨ªdo poes¨ªa y a la novela me he dedicado hace tiempo. Tambi¨¦n he escrito teatro y he hecho teatro con un grupo amateur y puedo decir distintos nombres, porque siempre hay muchos, pero siendo adolescente, la primera novela que me impact¨®, que no quer¨ªa acabarla, fue Cien a?os de soledad. Es un t¨®pico, pero en realidad es una novela incre¨ªble.

R. Pues he aqu¨ª una pregunta t¨®pica de las entrevistas a escritores: ?qu¨¦ est¨¢ usted leyendo ahora?

P. Un libro de Manuel Rivas que se llama El periodismo no es un cuento. En realidad son art¨ªculos que ha ido publicando en peri¨®dicos y a los que realmente les da un tratamiento de relato. Es uno de mis escritores preferidos, pero eso es lo que le¨ª ayer, porque yo leo bastante.