La privatizaci¨®n de los archivos de historias cl¨ªnicas
Estamos asistiendo a un serio intento de privatizar los archivos de historias cl¨ªnicas de todos los hospitales del Insalud y de algunas otras CCAA (Galicia, Pa¨ªs Valenciano, etc¨¦tera). El proceso est¨¢ iniciado hace algunos a?os, pero en los ¨²ltimos meses ha tenido una importante aceleraci¨®n, especialmente en los grandes hospitales de Madrid.La privatizaci¨®n de la gesti¨®n de los archivos cl¨ªnicos de los centros hospitalarios tiene tres vertientes. La primera es que se trata de un paso m¨¢s en la lenta y progresiva privatizaci¨®n de la sanidad p¨²blica, que est¨¢ realizando el PP, a pesar de la propaganda oficial y de las declaraciones que niegan la evidencia. En este sentido, son totalmente rechazables y siguen la l¨ªnea de atomizaci¨®n de los centros sanitarios p¨²blicos, y de traspaso de la prestaci¨®n de los servicios sanitarios a las empresas privadas.
La segunda es la importancia que tiene en el funcionamiento de un centro sanitario el archivo de historias cl¨ªnicas, y como ¨¦ste no puede ser independiente del propio centro, o se estar¨¢ siempre abierto a multitud de problemas de coordinaci¨®n y conexi¨®n de las historias, m¨¢xime cuando se dice que se pretende, y parece l¨®gico que as¨ª fuera, la informatizaci¨®n de toda la documentaci¨®n para que ¨¦sta se encuentre, a tiempo real, a disposici¨®n de los profesionales que la precisen.
Una ¨²ltima cuesti¨®n, y quiz¨¢ la m¨¢s importante, tiene que ver con la confidencialidad de los datos que se encuentran recogidos en las historias cl¨ªnicas. Estos datos dan una especial sensibilidad, recogen informaci¨®n que no puede ser utilizada m¨¢s que en los casos y en los supuestos para lo que los usuarios la han dado. Pero es m¨¢s: la legislaci¨®n vigente se?ala que "los datos de car¨¢cter personal que hagan referencia al origen racial, a la salud y a la vida sexual s¨®lo podr¨¢n ser recabados, tratados automatizadamente y cedidos cuando por razones de inter¨¦s general as¨ª lo disponga la ley o el afectado consienta expresamente" (art¨ªculo 7.3 de la Ley Org¨¢nica 5/1992 sobre regulaci¨®n de tratamiento de datos de car¨¢cter personal". En la misma l¨ªnea abundan la Ley General de Sanidad (1986), Convenio de Estrasburgo (1985) y la Recomendaci¨®n del Consejo de Ministros del Consejo de Europa (1997), por lo que parece claro que es una obligaci¨®n legal de los centros sanitarios el obtener la autorizaci¨®n de los ciudadanos antes de la entrega de sus historias cl¨ªnicas a otras entidades.
Pero, adem¨¢s, en este caso se rompe con la relaci¨®n de confianza que media entre los profesionales de la salud y los ciudadanos a la hora de recabar datos para la historia cl¨ªnica, y existe el riesgo, nada hipot¨¦tico, de la utilizaci¨®n de estos datos con intereses ajenos a aquellos con los que fueron facilitados, sobre todo si se considera que la finalidad de las empresas privadas no es otra que el beneficio econ¨®mico.
Por eso, las administraciones implicadas deben rectificar. Porque los problemas que tienen los centros sanitarios para gestionar las historias cl¨ªnicas han sido generados por esos mismos centros mediante la sistem¨¢tica desatenci¨®n de los archivos de historias cl¨ªnicas. Ser¨ªa ¨¦ste un buen momento de hacerlo y tomarse en serio esta parte tan importante del proceso de atenci¨®n sanitaria, avanzando adem¨¢s hacia la implantanci¨®n de la historia cl¨ªnica unificada. Si as¨ª no se hiciera, deber¨ªa exigirse que los centros afectados recabaran la autorizaci¨®n expresa de aquellas personas cuyas historias van a ser entregadas a empresas privadas para su manejo. Por parte de la FADSP y de la CAVE se han realizado las gestiones ante el Defensor del Pueblo y la Agencia de Protecci¨®n de Datos para que se adopten las medidas oportunas.
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