Los militares rusos temen que la OTAN intervenga en la ex URSS

Los militares rusos est¨¢n convencidos de que Estados Unidos ya ha decidido desplegar un escudo antimisil y, por lo tanto, denunciar el tratado ABM (misiles antibal¨ªsticos) firmado en 1972, a lo que el Kremlin responder¨¢ con el cese del desarme y un posible rearme nuclear. Lo dijo claramente ayer Anatoli Kvashn¨ªn, el jefe del Estado Mayor. Kvashn¨ªn expres¨® su temor a que la OTAN utilice la fuerza en alguna ex rep¨²blica sovi¨¦tica. Este hombre, al que los expertos califican de art¨ªfice de la ofensiva rusa en Chechenia, considera que la OTAN est¨¢ cada vez m¨¢s dispuesta a utilizar "la fuerza militar en su forma m¨¢s simple y cruda en varios niveles"."Los ejemplos de Kosovo e Irak son s¨®lo los primeros precursores", dijo Kvashn¨ªn. "Debemos asumir que otros [casos] no ser¨¢n excluidos, incluidos los antiguos territorios sovi¨¦ticos". "Los hechos de los ¨²ltimos tiempos demuestran que el despliegue por parte de EEUU de un sistema de defensa anticohetes prohibido por el tratado ABM est¨¢ pr¨¢cticamente decidido", declar¨® Kvashn¨ªn. Aunque la decisi¨®n sobre el comienzo del programa de defensa antimisil de EE UU est¨¢ prevista para mediados del pr¨®ximo a?o, "no hay fundamentos serios para esperar que Washington renuncie a la idea de crear un sistema nacional" contra los cohetes bal¨ªsticos nucleares. Es decir, agreg¨® el alto oficial, "que podemos concluir que este proceso ha adquirido car¨¢cter irreversible". La respuesta de Mosc¨² consistir¨¢ en "suspender el proceso de reducci¨®n de las armas estrat¨¦gicas ofensivas". Los militares rusos no creen en las explicaciones estadounidenses, que aseguran que necesitan un escudo antimisil para protegerse de potenciales ataques de pa¨ªses extremistas como Corea del Norte, Irak o Ir¨¢n.